jueves, 17 de febrero de 2011

POLIGRAFO QUE ESTÁS EN LOS CIELOS


Estaba leyendo el periódico ayer cuando noté que mi Nuri  hablaba en la puerta con Rosa, la vecina del tercero. La Rosa, como la llamamos nosotros, ha sobrevivido a tres maridos lo cual hace que esté ya más allá del bien y del mal, y de todos los problemas terrenales; bueno, de casi todos.
Había estado preocupada estos días, porque Lasteban, ya su última razón de estar en el planeta Tierra, tenía que someterse a una terrible prueba...¡¡¡el polígrafo!!! Y claro, ayer estaba ella, la Rosa, toda eufórica porque había pasado el tremendo examen y con matrícula de honor.
Nuestra vecina ya puede descansar tranquila porque una vez más ha vencido el bien, Lasteban, por encima del mal, el resto del mundo.
Yo seguía con el periódico abierto, pero al revés, porque sólo estaba prestando atención a lo que ocurría en la entrada de casa. Mi única neurona, como diría la Nuri, comenzó a volverse loca y pensó...y pensó...
Hasta hace no mucho sólo tenías que estar temeroso ante Dios, en el supuesto, claro, de que fueras creyente. Ahora tienes que rendir cuentas ante un polígrafo y desgraciadamente una gran audiencia. Hay que desnudarse de alma para que el show continue. 
Lo que ocurre es que Lasteban jugaba con el viento a su favor, pues ahora mismo es una base muy importante de la cadena alegre, y uno de sus principales activos, y nunca querrá que el pueblo se quede sin su princesa, ni ellos sin el dinero que por ahora ella representa. Cualquier prueba que pase siempre jugará con red aunque ella esté segura de que no es así.
Lo que me gustaría saber de todo esto es el botín que se llevó Lasteban, y el botín de la cadena alegre en forma de anuncios. Al final, todo se resume en el vil metal, como se decía antiguamente.
Yo creo que el polígrafo tiene base científica y el poder de detectar tus reacciones más íntimas. Pero se puede dar la situación de que una persona, al margen de este supuesto, y con el paso del tiempo, se haya montado su historia de tal manera que ella se lo cree y en ese caso el polígrafo le va a dar la razón, porque esa persona no está mintiendo, desde el punto de vista sensorial diríamos. Otra cosa sería lo que pasó realmente. Al margen de que todo se puede preguntar de diferentes formas.
De todas las maneras con la época complicada que nos está tocando atravesar, preferimos ver el problema ajeno, y en cierta manera aislarnos de los nuestros, que no tienen que ser pocos.
La Rosa ya se retiró a sus aposentos de invierno y con ella el polígrafo, Lasteban y la polémica.
Antes era Dios quien te premiaba o castigaba, ahora  es un polígrafo, o mejor dicho la cadena que lo contrata quien está en los cielos.

*DIBUJO: EL GALLINERO

No hay comentarios:

Publicar un comentario