Este vecino cree en la reencarnación, y por aquello de
los por-si-acaso, ya ha pedido que en
la próxima vida él quiere ser famoso, y si ésto no fuera posible, porque ya
hay muchas peticiones, y este vecino, incluso en la próxima vida, sigue sin
tener ninguna recomendación que altere la lista de “por estricto orden de prelación”,
como mínimo que sea pariente directo de un famoso.
Todo tiene una explicación, y remedando a Pepe Isbert en “Bienvenido
Mr. Marshall” “como bloguero vuestro que soy os debo una explicación, y esa
explicación que os debo, os la voy a dar”.
Este vecino siempre ha querido ir a un reality. Durante
muchos años ha querido ser vigilado por el “Gran Hermano”, aunque él en
realidad solo tenga una hermana. Pero, bien pensado, lo mejor es ir a “Supervivientes”,
que por cierto, este domingo pasado ha vuelto a la pantalla de la “cadena
alegre”, tras dos años de ausencia televisiva. Y es que su logística
aparte de complicada, debe de ser muy cara.
¿Por
qué “Supervivientes”? Es muy sencillo. Por lo oído, o más
bien leído por internet, a algunos, y me imagino que a todos, les pagan unos
veinte mil euros por semana. Viajas, antes y después del programa, conoces
gente aunque algunos sean insoportables, y además adelgazas, mientras estás
vigilado por un estricto plantel médico.
Además, tu señora no tiene por qué preocuparse, o sí, de
lo que haces, o de lo que te hacen, porque antes de que recapacites de la que
has montado, o te han montado, tu sufrida, La Nuri en este caso, ya se ha
enterado. Y si está muy mosqueada, puede que pasee tus miserias por diferentes
platós, ganándose ella también un dinerito extra, que visto lo visto, no viene
mal a nadie.
De todas maneras, más de uno de mis lectores todavía se
estará preguntando el por qué de lo dicho al principio sobre “reencarnarse
como pariente directo de un famoso”. Y es muy sencillo.
Durante muchos años uno se hacía famoso por su esfuerzo
personal, bien trabajando, estudiando, como actor, como deportista…
Desde hace ya bastantes años hay famosos vía “braguetazo”,
noviazgo, donación de cuernos… Y al ser conocidos del público se les abren las
puertas de ciertos programas televisivos, incluso hay alguno/a que llega hasta
a coquetear con la pseudonobleza, con títulos extra oficiales como “princesa
del pueblo”. Si éstos trabajos, en un principio, estaban mal vistos por algún
sector de la crítica y público, al final ocurre como con el “trabajo
mileurista”, que visto lo visto, y a toro pasado, dices eso de “quién
lo hubiera pillado”. Y es que en la realidad, como los últimos personajes nombrados también
se encuentran en el “Olimpo de los
Deseados”, se ha dado un nuevo giro de
tuerca, y ahora son contratados para los concursos, como el que acaba de
empezar, familiares de los famosos, que a alguno de ellos, y en el
sentido estricto de la frase “sólo les conoce su padre”.
Ya para terminar por hoy, incluso habrá más de uno que le
parecerá poco, porque seguro que los hay, los comentados veinte mil euros
semanales. Sin embargo, y la realidad coloca a cada uno en su sitio, este vecino,
y otras veintinueve personas lograron muchísimo menos en proporción, por un ERE
en la empresa en la que trabajaban. Y visto lo visto, entre los años trabajados
en esa empresa, veintiséis, los meses de huelga, algunos incluyendo a toda la
plantilla, comparándolo con lo que pagan en el citado reality, éste último es una
verdadera bicoca, y si hay que estar en pelota picada durante todo el reality,
se está también. Porque ya la vida misma se encarga de mostrar tus vergüenzas,
y además sin cobrar.
*FOTO: DE LA RED