De pequeño, este vecino recuerda que cuando llovía
mucho solía decir que era porque los angelitos estaban llorando. Por eso, hoy
al levantarse, y mirar por la atalaya, no ha tenido más remedio que pensar que
esta vez los angelitos debían de haber sufrido una tragedia, porque entre
diluviar y lo que está haciendo en mi querido Donosti, no hay una gran
diferencia.
No le extrañaría a este vecino, que en cualquier
momento vaya a ver flotando el arca, con Noé al frente y toda la colección de
animales abordo.
De todas maneras, y puestos ya a imaginar, ahora
Noé tendría más difícil el construir y botar el barco, entre todo tipo de
permisos necesarios para la obra, más los requeridos también para poder tener a
los lindos
animalitos, y el precio cambiante entre lo que te dicen que te va a
costar la obra, y lo que te ha costado al final, y si no, pensemos en lo que
está ocurriendo con el Canal de Suez…
Las cosas que se imagina uno cuando se acaba de
levantar, será que todavía está entre dos
tierras: la realidad y los sueños.
Y quizás sea mejor así, la realidad con toques
surrealistas, y ver a todos los poderosos de este país en la cubierta de ese
arca intentando salvarse de lo que pueda pasar. Porque no nos engañemos, es más
fácil que subieran ellos al arca que nosotros, ya que ha quedado demostrado con
creces, que en este país se cambian las leyes en un pis-pas, y “democráticamente”
siempre se salvarían los mismos.
Siempre nos quedará el consuelo y la esperanza de
un ligero cambio en la historia bíblica, y que al final, “solo” se salven los
que no se montaron en el arca. ¡Vamos! Seguro que el “inadaptado” guionista de
la nueva historia, se llevaba el Goya al mejor guion adaptado. ¡Cosas de la
vida!
Como también son cosas de la vida, el que haya
bajado el paro, según el último estudio publicado, y quizás sea porque ya no existan más puestos de
trabajo por destruir. Y como aquel que ya está en el fondo del mar, y lo único
que puede ver, encima suyo, es el arca del viejo barbudo, solo le queda coger
impulso, e intentar salvarse.
*FOTO: DE LA RED