Si algo tiene de bueno haber creado un blog, o como en el
caso de este vecino del mundo, incluso dos (http://trazosyhuellas.blogspot.com.es/), es
que te obligas a tener la materia gris, como diría el bueno de Hércules Poirot, preparada para hablar
de un tema cada día, dos días, o cuando las musas se apiaden de ti, y crean
conveniente aparecer. Porque ven que estás
preparado pero el tema no llega, aunque estés, como los cursis,
pedantes, o del postureo fácil dicen, en plena catarsis. Y debido a tu propósito
del blog, de vez en cuando te sorprendes con pensamientos que no te los dices a
la cara mientras te estás afeitando ante el espejo. Esas verdades del barbero.
Hoy me he acordado de esa frase que un día oí y que,
quizás por la edad que entonces tendría, me pareció liviana o prácticamente
anecdótica, y que hoy me ha enganchado y bajado las pulsaciones hasta un estado
casi catatónico: La vida es eso que pasa mientras tú haces otros planes. E
indagando posible autoría, hoy los dioses de internet estaban todos conformes,
y se la han dado a John Lennon. Ya solo por una frase tan redonda hubiera
merecido la pena su existencia.
La vida es eso que pasa mientras tú haces otros planes, y
normalmente el destino, muchas veces en forma de crisis, te lo moldea hasta
casi dejarlo irreconocible. ¡Vamos! Que si de rodar un proyecto cinematográfico
se tratara, te han cambiado prácticamente todo el casting, y no te queda dinero
ni para rodar con principiantes. ¿Y del guión? Sólo queda la idea original, que no da ni
para un “cortometraje”. Pero ya se sabe, que nosotros, los españoles, si por
algo destacamos (sí, por nuestros tacos e improperios, cantidad y calidad,
también, pero hoy me refiero a otro tema) es por nuestra capacidad de
improvisar.
El único pero es que “improvisamos”, no por decisión
propia sino porque los que nos rodea nos obliga a ello, o bien pensado en el
ADN de improvisar está esa expresión tan española, y que me perdonen por la
ordinariez, de “que no te queda más cojones”.
“La vida es eso que pasa mientras tú haces otros planes”,
y a este vecino del mundo le quedan cinco minutos de que alguien, siempre mucho
más joven, le incluya en alguna lista de la tercera edad. Mientras que a ti todavía
te parece que todavía llevas encima algún grano del arroz que te lanzaron el día de
tu boda, y, en realidad, hasta aquellas fotos ya están amarillentas…
Y sólo caes en la cuenta de que el tiempo pasa para
todos, cuando muy de vez en cuando vuelves a tus raíces, y las arrugas de tus
amigos de entonces, te advierten de que si tú les ves así, ellos te pueden ver
a ti peor. Y que de John Lennon, de aquel moderno melenudo, y rompedor, solo
quedan, y no es pocos, sus canciones, y su bondad reflejadas en ellas. Y el recuerdo que muchos todavía tenemos
de él, antes de que un desgraciado, del que nunca diremos su nombre para que no
pase a la historia, tuviera otros planes, y los impusiera a la fuerza…
*FOTO: DE LA RED