El cine me gusta. Es bien sabido entre todos los que
siguen a este vecino del mundo que el denominado “séptimo arte” es uno de
sus vicios, ocultos o no. Pero también lo es el teatro, sin los primeros planos
del cine, pero con ese sabor a verdad, de momento irrepetible, y que si hay
varios personajes en el escenario a la vez, puedes prestar atención a cualquiera
de ellos, al azar, y seguirá con su
papel hasta las últimas consecuencias sin pestañear, pero en realidad no está
sintiendo lo que ocurre, o parece que ocurre, allí, en el escenario, porque, a eso, se le llama “actuar”,
o como los jóvenes de ahora resumirían con un simple “hacer el paripé”.
Estos últimos meses con la aparición de, primero
fenómeno, ahora partido político, “Podemos”, este vecino del mundo
estaba convencido de que ese hecho serviría para que los demás partidos, tanto
de izquierdas como de derechas, se pusieran las pilas e intentaran hacerse una
especie de lifting tanto de pensamiento de partido, como de maneras de
proceder.
Sin embargo, visto lo de hoy en el Congreso, que se ha
desperdiciado un buen momento para “hacer las cosas bien” y que SOLO han acordado, entre el PP y
PSOE han condimentado la tarta y se la han comido, que la Cámara Baja
publique en su web de forma limitada, y cada tres meses, un informe global con el coste total de todos los viajes
de los diputados que paga el Congreso.
A destacar además, que se seguirán incluyendo los viajes
políticos en representación de su partido. Y si ya en todo lo anterior es más
que evidente que publicarán los viajes que les dé la gana y como les dé la
gana, lo de los viajes de partido se los deberían de financiar, evidentemente,
a través de su partido, y no ser el pueblo, o la sociedad en general , quienes
paguen como siempre los platos rotos.
Lo dicho, como en el teatro, “pretendiendo” hacer mil
cosas, ahora que se sienten ofendidos porque les llaman “casta”, pero ni
quieren ni pueden cambiar de actitud. Como en el teatro, nos quieren engañar
con su actuación, solo que ellos ya son malos actores, se les nota el “método”,
y el argumento de la obra está muy trillado, tras muchas representaciones, y ya aburren.
Con los años que ya va cumpliendo este vecino, hay muy
pocas cosas que le sorprendan, y pocas cosas son también las que espera, pero
al menos hubiera creído que con la amenaza, según la mayoría de los partidos,
de la llegada del “lobo Podemos”(esos chicos bolivarianos/antisistema/gente
chunga), todos se iban a disfrazar de Caperucita, inocente, y totalmente legal,
para al menos ponérselo difícil. Pero como hubiera dicho mi padre, “no
hay tu tía, lo que no puede ser no puede ser y además es imposible”.
Tal como dice esa vieja canción “lo suyo es puro teatro”
y a partir de la próxima temporada, tras las votaciones, hay más que visos de
que sea otra la compañía que actúe…Nos quieren convencer de que esos, Podemos, son
malos malísimos, pero por ahora solo se ha probado que las compañías estables
que han actuado durante más de treinta y cinco años en nuestro teatro de la
vida, se han, por decirlo de una manera suave, más que acomodado, y que
conviene moverlos de la poltrona, por lo menos para cambiar la tapicería que ya
va siendo hora.
Lo de hoy no se puede perdonar, y además suena a tomadura
de pelo, y los que me conocen ya saben que por ahí, precisamente por ser calvo,
no paso.
*FOTO: DE LA RED