Ahora estamos con la gran nevada para arriba y para abajo. Si se pudiera haber hecho más o menos, o incluso haber empaquetado al blanco elemento según caía y venderlo con un lacito rosa.
Quizás el gran desacierto ocurrió el mismo viernes, al dejar que la gente trabajara por la tarde, y consecuentemente luego se les hiciera tarde para regresar a sus casas, quedando muchos de ellos tirados en las diversas carreteras de circunvalación, y con grave peligro para sus vidas.
Pero con este tema como con la mayoría siempre fallamos en lo mismo: ¿Quién le pone el cascabel al gato? ¿Quién toma la decisión y con ella la responsabilidad?
A nosotros, a todos, se nos da muy bien el hablar como si fuéramos en un ascensor, a ser posible que no sea el del Empire State Building, por aquello de que probablemente intentando llenar el silencio de ese momento, acabaríamos con todos nuestros argumentos, como armas de fogueo, antes de llegar al final.
Siempre se ha dicho eso de que cada español es un entrenador de futbol que sabe, por supuesto, mucho más que el “oficial”. Pues ahora todos somos, ya nacemos incluso con el carnet, de tertulianos. Sabemos de todo, y dominamos todos los temas. Y así se ha demostrado con nuestro comportamiento, haciendo lo que nos sale del mismísimo, bajo la excusa de que no nieva todos los días.
Lo mismo ocurre con nuestros políticos, que mas bien están actuando las veinticuatro horas como tertulianos, esparciendo la propaganda oficial de cada momento.
Muchas veces da la impresión de que antes de salir de sus casas por la mañana, reciben unos cuantos folios por el correspondiente correo electrónico, y así luego van coincidiendo en frases enteras como si fuera el estribillo de la canción que ese día toca en cada partido.
Ya para acabar, decir que lo mejor que he oído estos días sobre la gran nevada, y el comportamiento de la gente desoyendo los “consejos” de sus políticos, se refería concretamente a los madrileños, pero es extrapolable al resto de los españoles:
“Si un día en lugar de una gran nevada, hay un tsunami, pese a las advertencias, la gente saldrá a nadar”.
Lo suscribo.
*FOTO: DE LA RED