Que sí, que estoy muy cabreado. Y hoy no escribo solo
como vecino del mundo, sino como seguidor de la Real Sociedad.
Intentando ser positivo diré, que lo tengo claro, que si
algún día me reencarno, no quiero ser ni rey, ni príncipe, ni otro Michael
Jackson tan blanco como el anterior, quiero ser jugador de la Real Sociedad.
Eso no es un trabajo, es un chollo. De vez en cuando con que corras un poco, no
dispares a tu portería, y de vez en
cuando te masturbes el pecho, a la altura del escudo, poniendo cara de gusto,
ya está hecho.
Yo diría que trabajan más los periodistas intentando
domar a la masa, perdón, a los simpatizantes del equipo, y maquillando lo hecho en los distintos campos, que el once de gala.
Hoy, por ejemplo, el Diario Vasco, en opinión de este
vecino del mundo, más que ejercer crítica sobre lo que hace el equipo, o
principalmente deja de hacer, parece que ejerce de auténtico relaciones
públicas. Habiendo perdido (Celta 1 – Real Sociedad 0), el citado periódico
se descuelga con este titular
“Adiós
al último tren europeo.
La
Real cae ante el Celta de Vigo y queda a diez puntos de la séptima plaza que
ocupa el equipo gallego.”
No hay ninguna mentira, por supuesto. Pero como más sabe
el diablo por viejo que por diablo, y por “piensa mal y acertarás”, este vecino txuri urdin, a las doce de la noche del sábado al domingo, empieza a mirar en la
clasificación, y… estamos a nueve puntos del descenso. ¡Hay que joderse! Un poco
más y el periodista de turno, al parecer
optimista de lujo, dice lo que nos falta para igualar al Barça, y así poder
ganar la liga.
Por cierto, y ya metidos en harina, ese mismo medio lleva vetando más de dos años mis opiniones en su versión digital. Automáticamente a los cinco minutos exactos, tras haberlas editado, desaparecen. Está en su derecho, por supuesto, lo único que ocurre es que la gente que me sigue, sabe que no soy dado a las malas maneras, ni a los insultos, muy al contrario, tiño mis opiniones de ironía y humor. Otra cosa es que al Diario Vasco no le interese difundir todo tipo de opiniones...
Por cierto, y ya metidos en harina, ese mismo medio lleva vetando más de dos años mis opiniones en su versión digital. Automáticamente a los cinco minutos exactos, tras haberlas editado, desaparecen. Está en su derecho, por supuesto, lo único que ocurre es que la gente que me sigue, sabe que no soy dado a las malas maneras, ni a los insultos, muy al contrario, tiño mis opiniones de ironía y humor. Otra cosa es que al Diario Vasco no le interese difundir todo tipo de opiniones...
Y Carlos Vela parece que está queriendo irse del equipo.
Yo si fuera su mejor amigo le diría que sus tiempos de ganar títulos con
cualquier equipo ya se fueron, y que mejor que aquí no va a estar en otro
sitio. Al menos, que saltándose todas las reglas del equipo, mienta y le pillen,
y encima le perdonen, porque todos al unísono gritan que “es un chico excelente”,
y ese mismo fin de semana aunque no salga de inicio, porque el staff también tiene
que hacer el paripé, sí juega la mayor parte del segundo tiempo.
Por si Carlos Vela me está leyendo, ésto se lo diré
directamente a él:
En
otros equipos seguro que ganarás más, pero si haces un estudio de caloría
perdida por partido, no en todos, es
verdad, el equipo que mejor te paga, seguro, seguro, que es la Real Sociedad, más
o menos como las angulas la noche del 19 de Enero minutos antes de la
tamborrada.
Antes, en los tiempos de Atotxa, los jugadores no serían
tan técnicos, pero tenían “casta” y orgullo, y ahora tristemente eso lo dejamos
para los leones vecinos.
Seguro que más de uno ahora querrá investigar quién es este
vecino que intenta despertar al rebaño. Fui socio durante bastante años, ahora
solo soy accionista, de aquellas famosas cinco acciones de cuando se inauguró
el nuevo campo. Pero seguro que si haces cuentas, mis humildes cinco acciones,
seguro que son más que las acciones que algún jugador txuri urdin lleva a cabo
en cada partido. Por cierto, lo de llevarse la mano al escudo, eso, no cuenta,
aunque pueda valer, como en aquel célebre anuncio, como animal de compañía.
*FOTO: DE LA RED