Mostrando entradas con la etiqueta Jazztel. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Jazztel. Mostrar todas las entradas

sábado, 10 de septiembre de 2016

¿INTERNET PARA EL PORTÁTIL? LA SOLUCIÓN TIENE UN NOMBRE (3/3)



Tras los dos artículos anteriores en el que este vecino del mundo quería encontrar esa tarifa que le pudiera satisfacer  en su búsqueda de tarifa plana para su ordenador portátil mientras se está fuera de casa, faltaba ese en el que el vecino intentara dar una solución lo más cercana posible a lo deseado, que recordemos era:


Conexión a internet vía USB para el portátil, que sea tarifa plana, y así, saber de antemano, cuánto voy a gastar cada mes, con una velocidad entre 10 y 30 megas, si es ésta última mejor que mejor. Y sin permanencia.


También recordaré, que me puse en contacto, vía Twitter, con los siete suministradores de internet presuntamente más importantes de España: Másmóvil -Orange  -Vodafone -Jazztel -Movistar -Yoigo –Euskaltel.


Lo curioso del caso es que no todos me contestaron, por lo que se puede adivinar de que “la cosa”  les va estupendamente a la mayoría, y no ven necesario luchar por cada cliente.


Con respecto a Euskaltel con la que tenía 2 Gigas contratados, lo máximo que me habían ofrecido, digamos que las dos mujeres, además con las mismas iniciales, A.O., que me atendieron, fueron unos auténticos ángeles ya que cada una de ellas lo hizo durante más de media hora. Pero, será el sistema, las empresas son cuadriculadas, y no se adaptan a las necesidades del cliente, sino que tiene que ser al revés, y van muy por detrás de las exigencias de los ordenadores de hoy en día, ya que con 1 o 2 gigas al mes, en el portátil ya no llegas a nada. Y normalmente no te ofrecen más de 10 gigas, y con un precio que, siendo guipuzcoano,  parece que vas a comprar angulas, y además en la víspera de San Sebastián, cuando están más caras.


Al final he encontrado la solución, que a juicio de este vecino, no es que sea la mejor , sino la menos mala. Es un aparato (el de la foto) que te ofrece hasta 20 Gigas, de la empresa WIFI AWAY (http://wifiaway.es/)
La idea y la ejecución son muy buenas, con la salvedad de que esa cantidad de gigas es suficiente para trabajar con el portátil, o leer páginas web, pero no para usarlo como medio de ver televisión a la carta, ni muchos videos de youtube, cosa que ellos en sus instrucciones ya te lo advierten. Juegan limpio.


Para mi bolsillo, al menos, un poco caro, concretamente, en el caso de este vecino, se pasaría en  su presupuesto, unos 15 € si fuera para todos los meses. Pero si te vas de vacaciones, con quitarte una cerveza y una tapa diarias, ya lo amortizas; y tu dieta te lo agradecerá. Eso sí, y es lo más importante, da buenas prestaciones. Y a nivel usuario no se puede tener ninguna queja, añadiendo además que da muchas más soluciones que esos “pinchos” por USB. Ya que esta fuente sirve para surtir a varios aparatos a la vez, tanto en casa como en la calle. ¿Y su instalación? Aunque parezca una contradicción: apta para ineptos.



Resumiendo, es una solución fiable, pero no “la solución” que te evite buscar la perfección, especialmente en materia de más gigas sin tener que temer por tu patrimonio…


*FOTO: F.E. PEREZ RUIZ-POVEDA

sábado, 23 de abril de 2016

LA DUDA DE UN SUEÑO




Hoy me he despertado raro, más raro de lo que viene siendo normal en una persona rara. Con esa sensación que tienes cuando dejas algo a medias, un “interruptus” en toda regla. Y poco a poco, muy poco a poco, he ido sacando de las tinieblas del olvido retazos de un sueño.


Es extraño. Porque normalmente es cuando me despierto, en los primeros instantes, cuando recuerdo todo o casi todo de mis aventuras nocturnas en brazos de Morfeo, pero hoy no ha sido así.


Lo único que recordaba en un principio eran unos “ojos de mujer, como extrañados”, y como fruto de muchos esfuerzos, he ido alejando ese primerísimo primer plano para ver si veía a la persona a quien pertenecían, o el contexto en el que estaba.


Tras unos minutos me he dado cuenta que aquel par de ojos eran germanos, pertenecían a Ángela Merkel, y no estaban extrañados, sino valorando, sopesando a su interlocutor, que al parecer era este mismo vecino,  que se encontraba al final, muy al final, de una gran sala, con mesas en filas concéntricas. Frente a mí, y como interrogandome,  tenía un micrófono metálico negro, y al parecer había terminado de pedirle unas cuantas cosas a la Señora Merkel. 


Ella, primero me ha mirado con una mezcla de indignación y estupor; y tras unos segundos, haciendo gala de una gran profesionalidad disfrazada de frialdad, me ha contestado, sonriéndome, y con aire de madre negándole la paga a su hijo díscolo, gesto que no ha sido necesario traducir por los  auriculares, ha dicho “Ah, que no tenéis Jazztel”. Y dando por terminada la reunión, se ha marchado.


Mientras terminaba la larga fila india de hombres serios y trajeados, he observado  al pasar junto a un enorme espejo, que al otro lado del mismo, y frente a mí, mirándome con desdén, se encontraba Mariano, Don Mariano.



Es triste, pero ya no nos respetan ni en los sueños. ¿O en el fondo, somos nosotros mismos quienes no nos tomamos en serio?


*FOTO: DE LA RED