Mostrando entradas con la etiqueta Hermanos Marx. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Hermanos Marx. Mostrar todas las entradas

miércoles, 8 de febrero de 2017

SABEN AQUEL DEL AMERICANO Y EL ESPAÑOL...


Sinceramente, lo que voy a tratar hoy en el post, no lo quiero ver desde el punto de vista serio, solo comentarlo ya te vienen sugeridas escenas déjà vu pero siempre con un toque a gag pasado de vueltas. Porque una conversación telefónica, la ya mantenida, entre Trump y Rajoy, quizás es juntar dos mundos inabarcables, el de cada uno de ellos, e intentar ponerle voz, en cada uno de sus idiomas, pasados siempre por un tamiz a lo Gila, para bajar la intensidad agresiva de cara al público en general.

Si se toma en serio una conversación entre el Primer Americano, y el Primer Español, tiene poco de futuro y mucho de tragedia. Porque no hay que estar allí, en cada una de las terminales, para imaginarse por un lado a Trump con su dedito de apuntar/acusar, apuntando/acusando al infinito, y por el otro lado a un Mariano Rajoy transformado en una presumible alfombra para que le pisen  y, a la vez, quitarle la suciedad, a quien mantiene la conversación con él, que viene y está allende los mares; la versión americana, quizás, del gallego encarnado esta vez por Rajoy que, como siempre, ni sube ni baja.

Ya sabemos, todos sabemos, que Don Mariano no habla inglés, el otro tampoco español, y si sabe algo seguro que son palabras de esas que se dicen al final de una juega muy juerga. Pero tampoco hay que ser adivino para comprender que durante la conversación seguro que a Rajoy se le dio mejor decir “sí”, que “no”. Esperemos que a partir de ahora, no le pase como le ocurrió a Aznar al juntarse con el inglés y con el americano en las Azores, y se le quede también un insoportable acento tejano, y el trasero al aire.

Al final, no me queda más remedio que acordarme de aquel chiste, no voy a dar más pistas por ser bastante desagradable, en el que estaremos en el mejor sitio en el peor momento.

Este vecino está hoy realmente irritado porque qué se puede esperar de una conversación entre alguien que dice "Es el vecino el que elige al alcalde y es el alcalde el que quiere que sean los vecinos el alcalde" y otro que reduce a escombros la educación y la ética, cada vez que habla tanto de las mujeres como de los que son de otras razas.

Me pregunto entre otras casas, si Trump mientras hablaba con Rajoy, previa traducción en ambos sentidos, no estaba haciendo gestos a la gente de su gabinete, y todos se estaban partiendo de risa, ya directamente en el suelo.

El jefe de un gobierno que tiene como característica hacer lo contrario de lo que promete, qué seriedad puede dar a todos esos países a los que dice querer representar tanto en Europa, como en Latinoamérica, pasando por el norte de África. Y lo que es peor, ¿quién le ha dado la voz?

Cada vez añoro más a gente como los Hermanos Marx, a Gila, y a Tip y Coll. Sin duda sabías que ellos iban en broma y, además, practicaban un humor, digamos, que culto.

Decir Trump y Rajoy, presuntamente, es como juntar al hambre con las ganas de comer, aunque como siempre, me temo que con el hambre y las ganas nos quedaremos nosotros.


De todas las maneras, y ya para terminar, quizás Rajoy, y sin quererlo, haya hecho mucho, esta vez, por rebajar el flujo de gente que salga fuera de España. ¿Quién sale ahora a batirse el cobre, con Rajoy en primera línea? No es, reconozcámoslo, nada serio.

*FOTO Y MONTAJE: DE LA RED

jueves, 24 de septiembre de 2015

EL DÍA QUE SE LES FUE LA OLLA


Algunas veces para saber lo que estoy pensando tengo que venir al blog para leerme en el mismo momento en que estoy escribiendo. Me parece ya un poco obsesivo. Más o menos lo que le puede pasar a más de uno de esos políticos que se juegan mucho en la próxima consulta catalana, que de acuerdo a los resultados,dirán una cosa u otra al día siguiente, el primer día del resto de la vida.

La mañana siguiente a los comicios, en lugar de mirar el tiempo que va a hacer, habrá que mirar al mapa de España, por si le falta un pedazo o no.

Acabo de ver a través de la red una especie de tráiler  de Ocho apellidos catalanes, aunque en realidad no se ven imágenes de la propia película sino a los protagonistas promocionando la cinta. Al final en lugar de ser una película española, será una producción internacional con actores de diversos países, al menos de dos. Es una especie de triste cachondeo elevado a la máxima potencia.

A este vecino del mundo le da mucha pena, y nunca ha querido tener esa sensación, ni mucho menos que la tengan por él. Pero entre unos y otros se ha llegado al borde mismo del abismo, a un momento en que ya nadie puede seguir adelante con su discurso porque no queda ni terreno ni tiempo, y lo próximo puede ser oscuridad. 

Se deberían de dar pasos atrás, y dejar de decir lo que se ha estado proponiendo hasta ahora, eso de “yo la tengo más grande”, porque puede ser como encontrar entre varios un billete de quinientos euros, y como nadie lo quiere soltar, al final se rompe y no sirve para nadie. 

El punto en el que nos encontramos es digno de una película de  los mismísimos Hermanos Marx, el de la parte contratante de la primera parte…, o como diría ahora el pueblo llano, esa frase tan reiterativa de “se les ha ido la olla”.

Unos pusieron una especie de cortina de humo para intentar ocultar sus miserias o las de, al parecer, una familia que fue “muy honorable”, y otros han entrado al trapo más que Islero, el toro que mató a Manolete y que comprobó que incluso matando no le sirvió para salvarse.


El domingo terminará una novela, y el lunes empezará otra. No sabemos si será de política ficción, de humor negro, o de diversos géneros entremezclados,  pero lo que sí es seguro es que no será como parece que se promete, "escrita entre todos", porque siempre la historia la hacen unos cuantos, disfrazados, eso sí, de pueblo llano.

La próxima vez que se desafíen dos políticos, o más, que sea mediante el método de comprobar quién resiste más sin respirar. Y que los dos, o los que sean,  resistan mucho, muchísimo, hasta que vean esa luz que se dice que ven los que... ¡En fin! Ya me entendéis.

*FOTO: DE LA RED

sábado, 28 de junio de 2014

DIFERENTES MUNDOS

Esta mañana me he debido de despertar filósofo porque he llegado a la conclusión  de que cultivarse es una manera de crecer, por eso cada vez que vas creciendo ves el mundo desde diferente ángulo, y te va pareciendo diferente.
Por lo que se ve, ayer, tras ver “Sálvame Deluxe” mis neuronas han debido de sufrir  una especie de ataque radioactivo y, o desaparecían, o se volvían hiperactivas…Y aquí estoy, preguntándome sobre la vida, y las miles de vidas que hay, dependiendo del ángulo por el que se mire. La verdad es que ver la vida según Pau Gasol tiene que ser, cuando menos, curiosa, muy desde arriba, y como alguien se cambie la raya del pelo de sitio, ya no lo conoce.
Este vecino es un gran oyente, e incluso escuchante de la radio, y llega a establecer un vínculo muy grande con sus locutores/periodistas favoritos. Ellos incluso llegan a convertirse en una especie de Pepito Grillo de tus inquietudes, sufren y se quejan por las mismas cosas que tú, incluso tienen los mismos problemas, y no les llega el dinero prácticamente desde el final de la primera semana del mes en cuestión, como a ti.
Sin embargo, a finales de Junio ocurre un fenómeno muy curioso, descubres que ellos son estrellas de la radio, y se despiden de ti, porque se van de vacaciones hasta Septiembre/Octubre, dos o tres meses de vacaciones, por mucho que “lo vendan” como que se reciclan o invierten su tiempo en ver nuevos formatos para seguir estando en primera línea en la comunicación. Quizás por eso, unos locutores/presentadores se tratan entre sí de “maestros”. Debe de ser porque cogen las vacaciones igual de largas que ellos.
Y mientras tanto, en las ondas, como se decía antes, sigue el mismo programa pero con los segundos o terceros espadas, y plagado además de becarios. Y tú, en el fondo, te sientes colaborador a la fuerza de este sistema que solo premia bien a las estrellas y los demás sobreviven como pueden. Y cuando los más afortunados ven la vida lo más alejada posible de la realidad, otros, la mayoría, vemos primeros planos de “los poros” de nuestros problemas. Y como no tenemos vista aérea  u otro tipo de referencias, cada problema se convierte en una especie de jeroglífico insalvable.
Por otro lado, el mundo de la política está apartado de todo, y como si fuera un gag de los Hermanos Marx, antes de votar tienen que votar para saber lo que tienen que votar, y mientras, hoy, en el PSOE, están todos preocupados por el número de avales que ha conseguido su futurible candidato. A este vecino lo de enseñarse los unos a los otros sus avales le parece algo que se acerca a lo pornográfico y que se pudiera resumir en “veamos quién la tiene más grande”. Como siempre, en un mundo aparte y muy alejado de la realidad.

*FOTO: DE LA RED