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domingo, 19 de junio de 2016

...ESTA VEZ, VENDRÁ EL APOCALIPSIS



¡Tranquilos! Desde hace una semana no sabéis nada de mí, pero estoy bien y no he sido víctima de ningún secuestro. Como decía mi madre: “Nadie quiere alhajas con dientes”.


Ocurre que he estado fuera y aunque tenía contratado el famoso “pintxo” de Euskaltel, los dos gigas que se podían contratar como mayor opción sirven para muy poco. Y digo yo, en lugar de para mis adentros, para mis afueras: Si eres el único favorecido como cliente, no hay nadie más en tu casa, y cuando no estás, tanto la televisión, como internet y el teléfono fijo no se usan, y tienes que pagar 20 euros más por el servicio de “pintxo”, como se dice en mi pueblo “Hacemos un pan con unas … tortas”. Porque pago mucho más por algo que se ha demostrado que no llena las expectativas, y me he quedado sin actualizar el blog, y consiguientemente sin estar en contacto con vosotros.


Me niego a pensar que no hay un dispositivo que, estando fuera del domicilio, indique que no se está consumiendo nada de los productos, y mientras, se pueda sustituir por algo más efectivo que ese pintxo de marras. Parece que el hombre llegó a la luna y … ¿se quedó allí?


Por lo demás, y no es poco, con ganas de ser abducido a otra época que no sea electoral; porque si ya en los genes de un político está el decir mentiras como sandías, de grandes, y no de sabrosas, lo de ahora ya linda la histeria.


Rajoy recitando odas a las alcachofas y al ganado vacuno. Se le dan bien los auditorios que no replican. Por cierto, y no es una crítica sino un consejo: No hay nada más triste, y surrealista al mismo tiempo, que poner un par de micrófonos, CON EL LEMA INCLUIDO, en pleno campo. Aunque popularmente a los micrófonos se les llame también alcachofas, desentonaban con el paraíso, según Don Mariano, en el que estaban.


Pedro Sánchez está, pero como si no estuviera, porque es una especie de Monchito, y José Luis Moreno y su mano serían los que verdaderamente cortan el bacalao de su partido, empezando por la Emperatriz del Sur, Doña Susana Díaz.


Albert Rivera, por su lado, se nos ha transformado, y sin ánimo de faltar, en una especie de Mary Poppins de nuestra política; regañando a todos lados una y otra vez, e intentando inculcar buenas maneras, evidentemente, las suyas o las que le convienen. Por cierto, y si entre receta de azúcar y aceite de ricino, hay que hacer como que se escucha a un cantante callejero que se “bambolea”, pues se hace el esfuerzo aunque se esté más perdido que el pulpo Paul, que en paz descanse.


Para terminar estos pequeños apuntes, y no por ello el último, aunque muchos así lo desearan, el Señor Iglesias, Don Pablo, que es más difícil de encontrar en su verdadero yo, que un traje de camuflaje en “El Corte Inglés”. El camaleón que lleva dentro está en pleno funcionamiento. Y si el líder de Podemos se mirara un poco en su propio espejo, quizás  se diera cuenta de que él mismo puede ser su peor enemigo.


Y mientras, el españolito medio se debate entre votar o botarles. Este vecino, sin embargo, lo tiene más que claro, como se dice en mi pueblo: “clarinete”.


El día 26 de Junio hay que ir a votar para botarles a la mayoría, y si pudiera ser, castigarles escribiendo un millón de veces el siguiente texto:
Lo importante es el país y sus habitantes, todos los votantes, y nunca, nunca más, volveré a favorecer ni a mi partido ni a los poderosos. Si lo vuelvo a hacer, esta vez vendrá el Apocalipsis”.



¡Así están las cosas!


*FOTO: DE LA RED

martes, 8 de julio de 2014

PONIENDO NOMBRE AL PARAISO (Y A LA CANCIÓN DEL VERANO)

Hoy este vecino del mundo se encontraba "muy disperso", con poca materia prima para hincar el diente, y ya solo mirar por la ventana era deprimente: la lluvia y el gris que ocultaba el mes en el que estamos, Julio. Y este vecino se ha retrotraído a otros veranos, y su correspondiente banda sonora, o también conocida como canción del verano.
Y me ha dado por pensar cuál sería la canción de este verano. ¡Ojo!  Que esta respuesta puede estar envenenada, ya que no es lo mismo la canción que las casas de discos, emisoras de radio, quieren promocionar como aquella que dará mucho dinero a ganar a unos pocos, y la canción que verdaderamente te haga mover los pies, e incluso el cuerpo entero, sin remisión. Y este vecino no ha dudado en ningún momento. Ya hay una canción que se ha ido colando, muy poco, a poco, casi humildemente.
Tan humildemente que he tenido que investigar su procedencia, vía Google naturalmente, el ojo que todo lo ve, todo lo sabe. Sabía su título, al menos lo presuponía por repetirse en toda la letra, más bien escasa por otra parte, pero ignoraba el nombre del grupo.
Ellos, los agraciados con MI LOTERIA DEL SORTEO DE CANCIÓN DEL VERANO 2014 recae en DVICIO, cinco amigos madrileños, y la canción PARAISO.
Seguro que la mayoría ya la había oído, por eso porque te va ganando poco a poco, y haciéndose cómplice de tus movimientos.
Para ilustrar el post de hoy, este vecino adjunta el video “oficial” del grupo, pero, ojo, ronda también por los mundos de internet, un flashmob (o acción organizada por un gran grupo de personas generalmente en un lugar público, que hace algo inusual y luego desaparece inmediatamente) organizado por una franquicia americana de hamburguesas, que es muy bueno, y, claro, está hecho con más medios, por eso este vecino ha creído más que justo el adjuntar el video del grupo.
Este año quedará en nuestros recuerdos como aquel verano en el que pusimos nombre al paraíso…ANDRÉS. Y luego para justificarnos diremos eso de que yo soy heterosexual, aunque no tengo nada en contra de los que no lo son, porque tengo además muchos amigos de otra opción sexual….  y vistos desde fuera nos pareceremos al padre de la protagonista del video.

*FOTO: DE LA RED