Siempre se dice que todos somos iguales, aunque como dice un amigo mío: “Unos son más iguales que otros”. De aquí viene que cuando a nosotros nos pasa algo, se entera nuestra familia, nuestros amigos, y pare usted de contar. En cambio si lo mismo le ocurre a un famoso, puede ocupar páginas y páginas planteando su situación.
En momentos como el comentado, ser conocido puede ser beneficioso para la causa, porque mediante la atención de los medios al famoso, se puede canalizar información sobre el problema.
Famosos son los casos de Josep Carreras, mentalizando a la gente sobre la leucemia, y creando incluso una fundación, y reciente está todavía el caso, a nivel nacional, de Bertín Osborne, mentalizando a la gente sobre el problema de su hijo, y de niños como él, y apoyando consecuentemente a la asociación de parálisis cerebral.
En este tipo de casos, lo importante para este vecino no es cómo vienen las ayudas, sino que vengan las ayudas.
Sin embargo, ayer se ha dado un caso diferente, con la detención de George Clooney.
Toda la prensa, virtual o no, se hacen eco, con fotos naturalmente, de la detención del famoso actor, que en ese momento estaba junto a su padre, periodista, y se manifestaban en frente de la embajada de Sudán en Washington, protestando contra el presidente sudanés, Omar al Bashir, al que acusan de causar una grave crisis, bloqueando el acceso de comida y ayuda en la región de las montañas de Nuba, en la frontera con Sudán del Sur. Su arresto fue retransmitido inmediatamente a todo el mundo.
Personalmente en ningún medio de comunicación he visto más información sobre el problema. Todo queda en lo anecdótico, el de ver a una estrella siendo arrestado.
En varias emisoras de radio, y siempre con voces femeninas, he oído decir, que incluso con esposas, Clooney está igual de guapo.
De todas las maneras, el hombre de las cafeteras es suficientemente inteligente como para que el problema que le ha llevado, aunque solo por tres horas al calabozo, no sea olvidado. Y eso es lo importante, que gente como Clooney, empleen su presencia para algo más que para obtener dinero, rompiendo la presunta calma reinante.
*FOTO: DE LA RED
No hay comentarios:
Publicar un comentario