Viernes, y antesala al fin de semana. Mañana fría, muy fría, y la fría gente ocupando el doble de superficie en la calle porque muchos de ellos parecen armarios andantes. Pienso que puede ser porque como ya, según el calendario, al invierno le queda menos futuro que a un trabajador de más de cincuenta años, la gente intenta amortizar la ropa invernal poniéndosela toda a la vez.
Estos días estoy solo en casa, y me tengo que dar de comer, aparte de tener que soportarme en días como hoy en que no es que ande bajo de moral, sino que tengo que andar con cuidado para no pisarla.
Tras una breve reunión con el inquilino que vive dentro de mí, hemos decidido que hoy tenemos paella para comer. Como resultado de esta decisión he tenido que salir, encima con el esfuerzo añadido de llevar al inquilino puesto, para comprar unos guisantes, porque la paella se podrá hacer de carne o de pescado, ambos negociables, pero un requisito indispensable en toda paella que se precie es el guisante. De hecho, a una familia se le ha medido más de una vez por la cantidad de guisantes que ingería, si en los platos condimentados había abundancia de guisantes, la economía familiar era saneada.
La mía últimamente no es muy boyante, como la de casi todos los españoles honestos, pero que no me vean que como sin guisantes, porque no quiero que el gobierno se entere que ya me están afectando sus medidas.
Hace un tiempo decidí que lo único que se puede hacer para luchar contra la política del gobierno, es no darse por aludido, porque su comportamiento es como el de un niño pequeño al que le acaban de regalar un juguete. Al gobierno prácticamente le ha puesto el poder en bandeja el ahora partido en la oposición y la está gozando usando todo su poder, y necesita sentir, además, que repercute en nosotros. Por eso yo he decidido, como hago con el comportamiento de los niños, no darme por aludido, y así espero que se cansen y aburran, y dejen de joder, porque hoy es viernes, y antesala al fin de semana, y hace tiempo que me quedé frío, muy frío, como la fría gente.
*FOTO: DE LA RED
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