viernes, 2 de mayo de 2014

GESTOS CONTRADICTORIOS

Esto que voy a contar a continuación es real como la vida misma.
Como muchos de mis seguidores ya saben, durante muchos años este vecino estuvo trabajando en una empresa ubicada en un pueblecito de Guipúzcoa, cercano a la capital.
Era pleno invierno, de hace ya más de diez años, y cayó una nevada impresionante. Quien más quien menos fue a trabajar por los medios que pudo, si fue, y uno de los trabajadores fue andando unos diez kilómetros, más o menos, para decir que no iba a ir a trabajar porque la carretera estaba muy mal e iba a tener dificultades para volver a casa.
Ni que decir tiene que en la empresa, ya que había llegado le dijeron que se quedara todo el día y que luego ya se buscaría la vida como pudiera para volver a casa. Que lo primero era lo primero, y ya se sabe que lo primero para una empresa es que tú, trabajador, vayas a trabajar, porque en ese caso, hasta el mismo empresario es menos importante.  Incluso será la única ocasión en que es menos importante.
No hace falta decir que en ese momento la cara del trabajador fue un auténtico poema al darse cuenta de la misma contradicción del gesto que había tenido al ir a trabajar.
Pues más o menos todo ésto vino a la mente de este vecino, cuando hace unos días recibió una misiva, muy bonita ella, muy cuidada ella, muy sorprendente ella, de su telefonía de cabecera, Euskaltel, que al ser presuntamente vasca, y con RH+ de pro, se supone que es el ojito derecho del gobierno autonómico de turno.
Según la foto que se adjunta, se puede observar que estaba todo preparado con muy buen gusto, y se componía de un cartón, también impreso, con los colores y símbolo de la empresa, y una hoja, doblada en tres, en la que gentilmente se informaba de que la empresa estaba orgullosísima de poder ofrecernos gratis dos canales más de televisión.
Fue leer todo ésto y subirle la tensión al vecino hasta un punto que le hizo sopesar la posibilidad de llamar al representante del Libro de los records esos, porque seguro que había batido alguno de levantamiento de tensión sin el mínimo esfuerzo.
Y es que hace muy pocas semanas este mismo vecino tuvo que realizar unas cuantas llamadas a esa empresa de telefonía para protestar porque había llegado a un acuerdo de lo que iba a pagar, y le estaban cobrando más. Pero no se pudo demostrar, porque, y palabras textuales de ellos, solo existe obligatoriedad de grabar las llamadas cuando se hace un compromiso de permanencia, y como no era el caso, no había pruebas, y por supuesto mis palabras, que eran exactas, para mí, claro, se las llevaba el viento.
Estamos hablando de una diferencia de unos ocho euros, no más, pero que para este vecino todos los meses supone muchísimo.
Pues como si el cabreo no fuera suficiente, mandan esta bonita publicidad, que no hace falta decir es un auténtico derroche de dinero y tiempo, de los que tienen que imprimir, preparar cada uno de los “juegos” y envío correspondiente. Una auténtica contradicción con la política de abaratar gastos que se nos inculca por todos lados, porque además no es necesario que se sepa ésto para recibir los nuevos canales, ya que se codifican desde la misma empresa, y a ti, como consumidor, te aparecen en tu televisor, sepas de su existencia o no.
Además, este vecino está convencido de que se han visto forzado a ello, a ofrecer más canales gratuitos, por la actuación de la competencia, y están haciendo de la necesidad, virtud.
Lo mismo pasa no solo en las empresas sino en la política en general. Se está recortando de todo, y aunque el gobierno nos cuente milongas, no hay signos evidentes de una recuperación, porque los puestos de trabajo que se van creando, en cuanto a condiciones y salario, no tienen nada que ver con los de antes. Sin embargo, ellos siguen con sus reuniones en todo tipo de sitios y sin bajar su tren de vida durante el trabajo, hoteles de alto standing, coches de alta gama... Y otro tanto se puede decir de los representantes europeos, muy importantes ellos, muy rigurosos ellos, que son incapaces hasta que les tomen en serio en el conflicto de Ucrania.
Y mientras tanto la tormenta social no escampa, y ya no sabes si quedarte en casa o salir, como aquel trabajador, porque hagas lo que hagas, siempre, siempre, ganan ellos.

*FOTO: DE LA RED


2 comentarios:

  1. Hola Patxipe:
    Te acabo de leer . Me ha gustado mucho el ejemplo del trabajador que "contra viento y marea" acude al trabajo para decir que no puede ir a trabajar etc......
    Lo de Euskaltel............pues como todos los demás.............al principio me decía.!Por fin! Una telefonía y demás "de aquí".......y total, como los demás............Esto es ! la gran decepción!
    Joxepaximur.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Para: Joxepaximur
      Muy buenos días. Los de Euskaltel lo único que saben decir es que ellos tienen fibra y los demás no. Lo que ocurre es que Movistar ahora tiene también, al menos yo en Donosti, y tendrán que cambiar su discurso.
      Con respecto a lo de ser de aquí, me imagino que eso es como cuando pedíamos policía de aquí, que algunos pensarían que en lugar de multas te iban a regalar flores...
      Un abrazo.

      Eliminar