miércoles, 21 de septiembre de 2011

LA VERDADERA CRUELDAD

 Si me tuviera que definir lo haría como un voyeur de la vida. En este caso lo digo en francés porque parece que suena mucho mejor, aunque en realidad es el de un simple mirón. Quizás ese sea el motivo por el que me guste el cine, o simplemente sea al revés, que como deformación de observar en el cine, lo haya trasladado a la pantalla de la vida. Sea como fuere, como espectador que soy, me encantan las películas de suspense, y en especial todas aquellas donde lo importante es descubrir al asesino de turno.
Lo único que pido siempre en este juego es la honestidad.
Siempre hay unas reglas no escritas que se deben de respetar, y algunas veces los guionistas quieren enredarlo tanto que casi se matan así mismos.
Recuerdo una película española de hace unos años, El tuno negro, que respecto a su factura era impecable, el problema es el argumento, al final se desinflaba.
Sin contar el desenlace, diré que lo normal es que el asesino durante toda la película disimule para que no se sepa que es él, lo que no es de recibo es que cuando el personaje se queda sólo siga disimulando. En la película en cuestión, al asesino, o asesina, al ser uno de los protagonistas, se le veía que estaba investigando el caso y con mucha preocupación. Lo que no es normal es que cuando está solo, le veas que continúa devanandose los sesos, y que se pase horas enteras él solo investigando. Eso no es justo, porque solo lo hace para despistar al espectador.
Ocurre lo mismo en la famosa escena de muchas películas, después de hacer el amor de una manera desaforada, ella utiliza todo el rato la sábana de turno mientras habla con él. No será para taparse de su en ese momento pareja, sino que en realidad lo hace por nosotros, sabe que estamos presentes; por eso comentaba lo de la honestidad.
Hago un paréntesis para decir que no voy a hablar de Hitchcock, porque toda su obra es un caso aparte.
Al comienzo de los setenta, causó furor desde Italia Dario Argento, con películas como El gato de nueve colas, Cuatro moscas sobre terciopelo gris...pero poco a poco fue cayendo en lo que se denomina cine gore, cine de vísceras, y a mí personalmente no me interesa la casquería.
Esas dos películas mencionadas estaban muy bien, y eran creíbles aunque tuvieran un toque de género fantástico; ese mismo hecho las hacía singulares.
Como todo es cuestión de modas, se intentó seguir con el filón encontrado, pero ya se quería enredar tanto, que en muchas de ellas la única escusa que presentaban al final para mostrar al asesino es que ni él mismo sabía que lo era, y que en realidad estaba loco, y nos había engañado durante toda la historia. Eso tampoco es un juego justo.
En España se puede reseñar una gran serie de televisión de los años sesenta, ¿Es usted el asesino?, dirigida por Narciso Ibañez Serrador, que nos tuvo en vilo durante varias semanas.
El mismo Ibañez Serrador, sólo tiene dos películas hechas ex profeso para el cine, y las dos magníficas. La primera de ellas, La Residencia, que durante años estuvo en el ranking de las películas españolas más taquilleras, es una película de suspense, con muy buena factura, y redonda.
Quizás a los amantes de este tipo de cine se nos puede tachar de morbosos, la cuestión es que disfrutamos de los argumentos en tanto en cuanto sabemos que todo ello es un juego. Lo verdaderamente horrible es lo que vemos todos los días en el Telediario, esa es la única verdad, y el argumento desgraciadamente lo escribimos nosotros.

* FOTO: DE LA RED

martes, 20 de septiembre de 2011

ESCALERA DE VECINOS


Siempre me ha atraído la idea de las historias paralelas. Lo que hacen los demás mientras nosotros hacemos de todo, o no hacemos nada que suele ser lo más
habitual.
Desde el punto de vista de habitante de esta comunidad de vecinos que es Europa, este fin de semana ha sido excelente como ejemplo de la idea que comentaba.
Había dos importantes eventos deportivos, y aunque los dos eran en diferentes modalidades, por esas casualidades de la vida, los países eran los mismos: España y Francia, duelo entre vecinos.
Como para estas horas todo el mundo sabe, España ganó tanto en la final del Campeonato de Europa de baloncesto, como en la eliminatoria de la Copa Davis.
El problema es que ahora, iba a decir con el momento crítico que estamos atravesando, pero en realidad ya llevamos unos dos años con problemas en la comunidad, cuando pidamos perejil al de la puerta de al lado, éste aparecerá con más morros que nunca, o con esa cara que denota haber pasado una noche etílica, y al día siguiente todavía más lívido que una pared de cal, muestras un semblante de que aquí no ha pasado nada.
En este momento es cuando llega lo de las historias paralelas. Mientras España intentaba olvidar todo los problemas que tiene en su propia casa, con estas dos victorias deportivas, mirando la prensa gala parece que ellos en ese momento habían sido abducídos por un ser superior que les ha robado cuarenta y ocho horas, y para ellos el sábado y el domingo no existen.
Siempre se han dicho alabanzas de las exquisitas maneras diplomáticas francesas, pero parece que este fin de semana no era el indicado para practicarlas al menos en letra impresa.
De todas maneras si el olvido es la táctica, habrá que subir y bajar escaleras de la citada comunidad, más que nada para molestar, ya que el resto del tiempo entre decisiones de Francia y Alemania, nos tienen contentos todo el día.
Por cierto, y hablando de nuestro aliado alemán, en el ámbito infantil se rumorea que el hombre del saco ha dejado el cargo por jubilación, y ahora la máxima candidata puede ser Angela Merkel. Aunque amenazar aún niño con que si no duerme pronto viene la Merkel, puede ser muy duro...
De todas maneras, está claro que entre unos y otros la escalera de vecinos que es Europa, está para no aburrirse, y para llevar el marcapasos con la pila bien cargada.

*FOTO: DE LA RED

lunes, 19 de septiembre de 2011

HOJAS QUE CAEN


A medida que van pasando los años, y que ya conocemos la tramoya de este teatro que es la vida, nos damos cuenta de que nuestra existencia va pasando más rápido que el coche de Fernando Alonso. Me niego a citar a la escudería que le va ganando, porque como confiesa su publicidad, ellos no corren...vuelan.
Estos días que en realidad son de transición entre el verano y el otoño, creo que voy copiando las sensaciones de los árboles, y voy soltando multitud de hojas en forma de sentimientos.
Un simple hecho, como por ejemplo bajar la basura por la noche, acompañado de Afgano, mi bichón friçé, me sirve de terapia. Diez minutos aprovechados para que entre otras cosas mi compañero de fatigas ponga al día sus necesidades.
De pequeño a Afgano, para que aprendiera a no manchar en casa, le enseñamos a hacer todo sobre hojas de periódico, y luego más adelante le llevábamos al parque, con periódicos también, para que fuera poco a poco acostumbrándose a hacerlo fuera.
Todo fue fenomenal, salvo un pequeño inconveniente, ahora necesita siempre algo sobre lo que depositar sus necesidades. Normalmente utiliza, por ejemplo, pequeños pedazos de plástico (bolsas de patatas fritas), pero a medida que se acerca el otoño, encuentra hojas por todas partes, y como las utiliza para tal fin, al resto no las quiere pisar, pues es un perro...pero muy limpio.
Esta noche pasada, ante tantas hojas caídas, Afgano no andaba, saltaba para evitar tanto papel higiénico canino.
Estaba yo en éstas, cuando al darme cuenta del cambio evidente de estación, moralmente me arrugué. Pensamientos como otro año que pasa,... y ya van una porrada, después de días brillantes vienen otros que no lo son tanto.
Como no me ha quedado más remedio a través de los años, que ser mi mejor confesor, me reuní conmigo mismo, y me canté las cuarenta, pues no puede ser que todos los años uno se deprima en la misma época.
Puedes tener tus problemas, grandes o no, pero si te fijas en la gente que te rodea hay casos por los que puedes decir el célebre virgencita que me quede como estoy, porque siempre se puede estar peor.
Estábamos ya de regreso al portal cuando llegué a la conclusión de que a veces hay que valerse de los ejemplos, sobre todo si son buenos, y fijándome en lo que había estado haciendo Afgano durante todo el camino, decidí que los malos momentos hay que saltarlos, siempre que se pueda claro.
Lo mismo que las hojas, nuestros sentimientos decaen, pero siempre habrá una primavera con hojas nuevas y podamos caminar sin dar saltos.

*FOTO: DE LA RED

sábado, 17 de septiembre de 2011

FANTASMAS DEL PASADO


Mañana triste, propicia a la melancolía por los apuntes de lluvia, arropado por románticas canciones de un Nat King Cole eterno, eso sí, cantadas preferiblemente en inglés, pues incluso un sentimiento como el amor puede sufrir por un tan marcado acento americano.
Leyendo un periódico digital me he encontrado con un fantasma; con una imagen que pensaba pertenecía al pasado, y que todos los miedos ya por fin habían sido desterrados.
La estación de autobuses, idea que consideraba consolidada en Donosti, parece estar en peligro otra vez.
El máximo mandatario del ayuntamiento pone en duda la construcción de la citada estación basándose en el hecho de que la Diputación no va a cumplir su parte.
Cuando alguien está seguro de algo tiene que llegar a hacer lo imposible por conseguir su objetivo, y no volverse atrás a las primeras de cambio, porque “parece” que alguien no va a cumplir con lo pactado, y más cuando hay papeles firmados por medio.
Lo que hay que intentar es que cada entidad cumpla su palabra, y no escudarse en el comportamiento de otros.
Siempre he pensado que alguien que toma decisiones se puede confundir, pero que hay que ir con la verdad por delante. Si se toma una decisión en contra de lo pactado anteriormente, no intentes encontrar ayuda en otros compañeros de viaje, cuando en otros momentos dices que prefieres hacer el viaje tu solo. Uno se puede confundir pero ante todo está la honestidad, y no practicar juegos de magia intentando desviar la atención del espectador-sufridor.
Durante años he trabajado de cara al público, y muchos visitantes se extrañaban de que en una ciudad tan importante como Donosti faltarán dos cosas: una estación de autobuses, y los grandes almacenes del corte británico.
Uno, que en vez de años cumple décadas, se acuerda de que para los mundiales de futbol del ochenta y dos, sonaba Atotxa como una de las posibles sedes del campeonato, siempre que se acometieran obras en el campo para lo cual hubieran recibido dinero. En su momento se dijo que ese dinero mejor era para otros usos, el quid de la cuestión es que esa cantidad solo podía ser destinada a las obras en Atotxa. Se perdió aquella oportunidad, y el nuevo campo se inauguró... en 1993.
Basándonos en el famoso dicho de que aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, y que en este caso Valladolid somos nosotros, lo que hay que hacer es que cada parte cumpla con su palabra firmada, y no acabar con el cauce del río; porque en ese caso el río pasaría por algún otro lado y otros serían los beneficiados.
Miedo me da pensar, que dentro de un tiempo, con tanto recorte, y ahora que estamos en pleno festival de cine, las estrellas del festival tengan que venir con mochila y saco para dormir.
Tanto en el caso de la estación de autobuses como en el futuro del festival hay que pensar en lo positivo de ambos, que es el trabajo que puede generar y la publicidad de cara al exterior, pues gastos siempre habrá y cuanto más se tarde las cifras más altas serán.
Ahora para intentar mezclar belleza con la tristeza que siento, voy a dejarme en manos de Stephen Sondheim, y su preciosa canción Send in the clowns, un ejemplo de hacer arte con la desesperanza.

*CUADRO: PAYASO TRISTE, DE PIERRE ROSSION

viernes, 16 de septiembre de 2011

SU FAN NÚMERO UNO


Lo mismo que la publicidad invade los programas de la televisión, cuando eres pequeño tus padres te van guiando por la vida, o deberían al menos, porque esa es otra, dándote coordenadas de comportamiento, como el célebre ésto no se hace, o aquel otro lo importante es participar.
Ya de mayor todo el mundo lleva en su interior una especie de caja negra, como la de los aviones, que va registrando todos los acontecimientos que ocurren a su alrededor y va comparándolos con el bagaje vital que cada uno lleva, y va juzgando el comportamiento de los demás sin querer, porque es inevitable, con el suyo propio.
Juzgamos lo que vemos, no los pensamientos de los otros porque eso no se puede ver.
Todo el mundo, en general, porque siempre habrá excepciones, se siente mejor cuando al estudiar a los demás descubre que el que parecía ser perfecto tiene sus fallos.
Encontrar una torpeza en el que estás juzgando ayuda para ingresarlo en el concepto de lo que es tu idea del mundo normal.
Un buen día aparece en nuestro universo un tal Cristiano Ronaldo dos Santos Aveiro, más conocido como Cristiano Ronaldo, y saltan todas las alarmas. Buen futbolista, atleta nato, guapo, y se le presupone millonario. Nuestra caja fuerte recoge el evento como si de un terremoto se tratara, pero no de un terremoto cualquiera, sino de uno magnitud, 7.9, terremoto mayor, causando graves daños.
Si sigues fijándote en el personaje, con el tiempo descubres, ¡por fin! que tiene un fallo, y para nuestra caja negra, muy grande, no es humilde, está encantado de haberse conocido.
Sus últimas declaraciones tras el partido contra el Dinamo de Zagreb, cuando se encontraba molesto, por ser pitado en el campo, en las que afirma que le silban «por ser guapo, rico y bueno y me tienen envidia» tampoco ayudan, y nos hacen reafirmarnos de que aparte de que como vulgarmente se dice, no tiene abuela, llegamos a la conclusíon de que Cristiano Ronaldo es su fan numero uno.
Estamos acostumbrados ahora a héroes que en sus declaraciones siempre son comedidos, y agradecidos por lo que han logrado ser con la ayuda de la afición, figuras como Andrés Iniesta, Pep Guardiola, Xabi Alonso, Iker Casillas, Rafael Nadal, incluso el mismo Fernando Alonso.
Lo que ocurre es que desde la arena de unas Justas medievales, siempre se disfruta más cuando entres los caballeros a combatir aparece también algún caballero negro, donde también podemos incluir a Mourinho, caballero negro donde los haya, y que además él mismo se encarga de resaltar con sus trajes, también negros.
Los caballeros negros están destinados a no ser comprendidos y a que los caballeros blancos aún lo sean más, pero sin ellos cualquier torneo de la vida diaria sería mucho más aburrido.

*FOTO: DE LA RED

jueves, 15 de septiembre de 2011

DESDE FUERA


Cuando la economía de una familia está bajo mínimos, se impone el tomar unas acciones drásticas para que todos los componentes del núcleo familiar, una frase que aunque manida queda muy aparente, puedan sobrevivir, y se intenta que todos se ajusten el cinturón, aunque no lo lleven.
Si justo tienes para terminar el mes, no vas a regalar comida o enseres a otros, aunque también lo estén pasando mal. En todo caso practicarás aquello de donde comen dos comen tres.
Ésta introducción viene porque ya todos sabemos, aunque no leas el periódico ya te habrás dado cuenta en carne propia de que la cosa no está como para dejar un kilo de filetes olvidado en la parada del autobús, pues puede desaparecer hasta la misma parada. Y que tras recordarnos de que la culpa siempre es nuestra, cosa que no entiendo porque de cara al exterior nunca he tenido que tomar una determinación trascendental para el resto de los mortales, se están tomando todo tipo de “soluciones”, de modo que nuestra vida sea una auténtica aventura.
En nuestras relaciones con los demás países, en cambio, seguimos como siempre, explicando por qué Don Quijote nació en España y no en ningún otro sitio.
Somos una auténtica delicia de buenas maneras y comportamiento ejemplar, y antes de que nuestros vecinos nos pidan perejil, nosotros ya les damos el ramo entero. Y si nos enteramos de que en otro país por muy alejado que esté, alguien tiene catarro, ayudamos también.
Que no se me entienda mal, soy de la opinión de que siempre hay que intentar ayudar al prójimo, pero también hay prójimo en éste mismo país y que lo está pasando realmente mal, y a nosotros a la fuerza nos tiene que afectar más.
Allí donde hay una tragedia, cubierta por los medios de comunicación, siempre llegamos de los primeros. Pero hay muchos tipos de tragedia, y la peor es la habitual, aquella que a fuerza de verla, ya prácticamente ni nos afecta.
Al final nos pasará lo que le ocurrió a un amigo mío. Estaba haciendo unos trámites burocráticos, y faltaba un cuarto de hora para que se cerrara la taquilla de turno. Delante de él estaban otras cinco personas, y la funcionaria en cuestión no paraba de contestar al teléfono con la consiguiente paralización de la cola.
No le iba a dar tiempo a ser atendido.
En ese momento, tuvo una brillante idea... Llamó por teléfono a esa misma funcionaria, y en tres minutos tenía el asunto resuelto.

*FOTO: DE LA RED

miércoles, 14 de septiembre de 2011

EL TIRO POR LA FACTURA


En algunas autonomías se va a poner en marcha para la Seguridad Social el denominado sistema de copago, por el cual cuando te den el alta en el hospital, vas a recibir una factura, que no la tienes que pagar, mostrando los gastos causados por la operación a la que has sido sometido, pues como las autoridades quieren recordarnos la seguridad social es gratuita pero tiene sus costes.
En primer lugar, vaya por delante, que a mí personalmente no me gusta para nada esa medida, porque quiero creer que cuando uno va a un hospital es porque bastantes problemas tiene, como para encima darle a entender que por su culpa el estado, que es de todos, aunque como siempre de algunos más que de otros, ha incurrido en más gastos de los que ya tenía.
En segundo lugar, en el caso de que la medida, el copago, sea acertada ¿por qué quedarse solo en eso?
Yo exigiría copago para todo.
La línea del gobierno, de éste y de los anteriores, no va en línea recta, sino en quebrada. Siempre son todo dudas, hoy hago esto, mañana rectifico.
Cada vez que un Gobierno, por ejemplo, lanza una campaña para informarnos de algo, mandaría factura a los responsables de ello, y a la opinión pública, con un seguimiento de lo conseguido a posteriori con respecto al objetivo final de la campaña. No olvidando poner siempre quién es el beneficiario del dinero gastado, es decir, la empresa encargada, y nombre de cada socio. Es posible que nos lleváramos más de una sorpresa, y hasta pudiera ser clarificador.
Cada vez que se hace una recepción en algún sitio a alguna autoridad, pasaría la factura correspondiente, aunque como hemos quedado, sin que tengan que pagarla, especificando todo lo organizado, lo que costaba, incluso nombre de cada uno de los invitados, a los que se les enviaría por supuesto, una gentil copia de todo lo gastado para su agasajo, empresa organizadora, y respectivos nombres de los socios y propietarios. Haría especial incapié en comprobar que todo lo facturado realmente se consumió. Más que nada por recordar que en España se acuñó el término de picaresca.
A medida que voy pensando en la idea que he lanzado, mi ángel malo se regocija y se pone más rojo todavía, mientras el ángel bueno, ha llegado a un blanco pálido.
Quizás de ésta manera se podrían evitar, por ejemplo, construir aeropuertos donde
al cabo de un tiempo de su finalización, todavía no hay aviones, y ésto es real, no pertenece al mundo de Gila, donde de paso diré no había tanta mala uva, sino solo el gusto por jugar a ser malos por un ratito, y a dar la vuelta a la realidad.
Se hacen edificios con el dinero de todos, cuyo fin incluso al terminar la obra no está nada claro.
Al final de cada mandato se podría preguntar a cada persona implicada por la cantidad de facturas que tiene, y que naturalmente no las va a pagar, pero de las que sí es responsable.
Quizás se podrían evitar también con el copago, viajes triunfales de autoridades, incluso extranjeras, incluidas las de la Iglesia, y que al final mientras el estado, nosotros, pierde dinero, hay compañías, por ejemplo, que han retransmitido los eventos, y han hecho el agosto, en agosto, o en cualquier otro mes. De todo eso también nombres y facturas de los responsables del gasto, y de los socios y propietarios de los que han salido beneficiados.
Bien pensado, me gusta el copago...pero para todo. A más de uno le iba a salir, como se dice en mi pueblo, el tiro por la factura, digo...por la culata.

*FOTO: DE LA RED

martes, 13 de septiembre de 2011

AMIGOS DEL BUENO


Desde que era pequeño, al salir de casa mi madre, mi padre siempre estaba o trabajando o con sus amigos, me decía que fuera con buenas compañías, y me lo decía con la facilidad de lo cotidiano, pero que al pensar sobre ello se me habrían infinitas variantes. Una frase sencilla pero con trampa.
Solo años después, y ya en el cine, encontré otra frase tan sencilla, y que implicara tanto. Era el después célebre Que la fuerza te acompañe, de La guerra de las galaxias.
Cuando eres joven, la gente te habla desde la experiencia, y te dan pistas, pero tú tienes que jugar como en la búsqueda del tesoro y encontrar las claves correctas.
Salía a la calle, y me preguntaba: -¿Y cómo me entero yo de lo que son las buenas
compañías? Y me iba con mis amigos de siempre, pero jurando fijarme si encontraba alguna pista que me guiara por el buen camino que quería mi madre.
Ya de mayor te das cuenta, y con la ayuda del cine, que sólo vale ser el bueno, pues serás guapo, inteligente, nunca te vas a equivocar, y seguro que tarde o temprano, vas a encontrar a otra mujer buena, inteligente, pues tiene que serlo para descubrirte, y que físicamente está mejor.
He dicho que solo vale ser el bueno, pues si eres bueno pero amigo del que es mejor que tú, andas aviado, pues en este mundo o solo te va a recordar tu madre, o si te recuerdan será porque te han matado, no sea que el público se encapriche de ti, y eso sirve para que el bueno en tu honor se cargue a todos los malos, si queda alguno habrá una posible secuela. El bueno no se puede cargar a nadie sin un por qué, y normalmente la razón viene desde los mismos malos.
Ser malo, sobre todo en el cine, es más divertido, pues cuanto más pasado de rosca estás en la interpretación, más malo eres. Normalmente para ser el malo, no simplemente malo, uno más, ser feo ayuda, y si tienes la cara acribillada de viruela, mejor que mejor. Llegas a la excelencia si además tienes acento y eres extranjero, pues así no tenemos que reconocer que hay malos en nuestro propio país.
Hasta ahora como la mayoría de los españoles eramos católicos, eramos buenos a la vista de la Iglesia, que no de Dios. Ahora entre el divorcio, y otro tipo de depravaciones, no solo es que los católicos no están libre de pecado, sino que los mismos curas no están libres de sospecha por el mero hecho de serlo.

Desde que era pequeño mi padre siempre estaba o trabajando o con sus amigos. Seguro que él tuvo mucha suerte y encontró a la buena compañía, por eso aparecía poco, porque lo que se dice ser bueno, él siempre fue el mejor, por eso es el padre del protagonista... .

*DIBUJO: DE LA RED

lunes, 12 de septiembre de 2011

LA BOLSA Y SUS EFECTOS

En los diarios digitales y en la radio están todo el tiempo comentando sobre la caída de las bolsas europeas, y como europeos que hemos querido ser, de nuestra bolsa también.
Yo no entiendo de esas cosas, pero he estado un buen rato mirando dentro del armario donde tenemos las bolsas en casa, y yo no veo nada raro. Eso sí, están cada vez un poco más chuchurrías, y si alguna vez no descargábamos todo el contenido al regresar de hacer compras, ahora desde luego están vacías.
En nuestra casa hemos aprendido del mundo taurino, y hemos recibido a la crisis a puerta gayola, sin perder nuestro sitio en la plaza, con auténticos pases de pecho a los acreedores, y manoletinas al hambre, es decir, creando arte de los momentos complicados.
Tenemos la despensa como los chorros del oro de limpia que está, entre la escasez y los productos blancos, en cualquier momento tendremos que ponernos gafas de sol.
Hay que ver el lado positivo, ya nada se pone malo y hay que tirarlo a la basura porque caduca. Además tenemos los reflejos a flor de piel, en cuanto notamos un cambio en la despensa, para bien o para mal, enseguida nos damos cuenta, cantidad de latas, fecha de caducidad, número de serie...
Por lo demás, salvo ligeros cambios, seguimos haciendo la misma vida de siempre.
Cada dos semanas solemos ir a un centro comercial, donde cenamos en un chino, después compramos unas chuches, bebida y luego vamos al cine. Normalmente vamos tres, mi mujer, uno de mis hijos y el que escribe este blog.
El único cambio por la crisis ha sido a mejor, pues hemos aprendido a repartir, uno cena, otro va al cine y el otro se come las chuches. Así estamos los tres contentos, y más unidos que nunca, pues el que va al cine luego tiene que contar con pelos y señales todo lo que ha pasado en la película. Ni que decir tiene que cada vez que salimos al centro comercial, el orden de disfrute va cambiando, como una auténtica familia democrática que somos.
Ni en las vacaciones ha habido un impedimento por la crisis. Este año por ejemplo hemos estado dos semanas en Acapulco, eso sí solo la Nuri y el menda, una pensión malagueña, pero éste detalle lo obviamos, para qué vamos a dar información que no se nos pide. Además nos pusimos como tarea leer un libro sobre los usos y las costumbres de México, con lo cual, la crisis nos ha venido bien hasta para ampliar nuestra cultura. El único cuidado que hemos tenido es que no se nos notara los dichos malagueños que hemos podido aprender esos días.
Por lo demás, ya digo, no hay mal que por bien no venga, pues los michelines ya sólo son un recuerdo, y de agilidad como un gato. El otro día encontré un billete de veinte euros en el suelo, y sin flexionar las rodillas en un segundo era mío. El problema es que era publicidad de un gran almacén, y lo único que han conseguido es que nosotros ya no vamos a ir nunca más a esa gran superficie por publicidad engañosa . No hay derecho a que te ofrezcan algo..., y luego sea mentira.
En resumen, no se preocupen por lo de las bolsas porque a nosotros, los de a pie, no nos va a afectar, porque no tenemos ni para invertir...

*FOTOS: DE LA ENTRADA

domingo, 11 de septiembre de 2011

SU PRIMER VUELO


Tengo un sobrino de tres años que tiene mucho peligro, pues está todo el día preguntando, a parte de que si le vas a sacar una foto, seguro que sale movido.
Tenía la radio puesta cuando alguien, uno de los participantes en el coloquio de turno mencionó algo de los efectos especiales.
Diego, mi sobrino lo cogió al vuelo, y me preguntó: -Tío, ¿qué son los efectos especiales?
Le comenté que lo que se ve en las películas es una historia que no es real, que es como un cuento de los del abuelo, pero con imágenes, y que los que lo interpretan son actores, y que ni Superman vuela, ni los X-men tienen poderes. En mi mente aparecieron los tres magos de oriente, y un viejo carbonero un tanto gordito, pero giré por otro lado.
Cuando ya parecía que había quedado todo claro, vino la pregunta de todas las preguntas:-Tío, ¿existen los efectos especiales en la vida?. Me lo preguntó sin mirarme, mientras rompía un edificio que acabábamos de construir con piezas de plástico.
Hablando de efectos especiales, al instante, y como efecto de la pregunta, fui teletransportado a lo más profundo de mi yo.
Me ví conociendo a mi primer amor, con mi primer beso. Era como el increible
Hulk, por lo poderoso que me sentía, pero en vez de verde, en rojo, por el calor que desprendía mi cuerpo. Eso eran efectos especiales. Incluso sentía efectos de sonido, con pajaritos al lado de mis sienes, latidos con eco de mi corazón, y la más maravillosa de las bandas sonoras, un cruce entre el Tema de Lara, del Doctor Zhivago, pero acabando con un remedo del célebre tema de Superman.
Aquellas noches de Reyes, mezcla de noche de cuento de hadas y de historia de Hitchcock, con efectos de sonido del reloj de pared que está en el pasillo, y primer plano de las gotas de sudor que cruzan mi frente.
Esos días de alegría donde todo parece que ha encogido, por lo grande que eres, y estás en el país de Liliput, o esos días de desprendimiento de retina moral, y que todo lo ves a cámara lenta, y grande muy grande y un tanto desenfocado.
Estaba yo en éstas, cuando noté que un par de pupilas, grandes muy grandes, continuaban mirándome.
Al instante contesté lo primero que pude: -Me parece que tu padre te está buscando, vamos a ver que quiere-, agarrándole de una mano le convertí en Superman volando por primera vez.

*FOTO: FOTOGRAMA DE CHITTY CHITTY BANG BANG  (DE LA RED)

sábado, 10 de septiembre de 2011

LA ROPA DE LOS DOMINGOS


Siempre me acordaré de aquellos domingos, con la ropa del día de fiesta, agua en el pelo, y cada pelo en su sitio. A misa de diez, la misa mayor, y a las doce, si tocaba, concierto de la banda en la plaza del pueblo.
Al tener familiares tocando en ella, no me perdía ninguno de los conciertos. De hecho, nadie se lo perdía, aunque sea un poco, entre vermouth y vermouth, en versión niños entre Kas y Kas.
No se por qué pero siempre me acuerdo de la figura, las figuras de los jovenes del pueblo que estaban en la “mili”, y vestidos de “conejo”, escuchaban con cara de panoli, las piezas que se habían preparado para ese día.
Para mí aquella imagen del joven militar significaba lo máximo, la frontera, el ser mayor, la clave para entenderlo todo.
Mi sentimiento de pequeño era el de una continua aventura, y de que la mayoría de las veces, había algo que no entendía. Yo preguntaba en casa, y siempre había algún momento, en que recibía por contestación el célebre cuando seas mayor lo entenderás.
Yo estaba convencido, que en el momento de ir a cumplir el servicio militar, y oficialmente ser mayor, iba a recibir una especie de código, con el cual, en caso de cualquier duda en algún momento de mi vida, buscaría en él y tendría la luz. Se acabaría aquella pátina de secretismo en el que de una manera u otra siempre caía.
Quizás fue porque me libré de ir a la mili, pero a mí nunca me dieron ese código, y siempre he tenido que ir pasando por esta vida en continuo proceso judicial, es decir, intentando juzgar por mí mismo lo que creo que está bien o no, lo que es justo o lo que no lo es.
Intentas que la vocecilla con eco que tienes en tu interior te lea la cartilla lo menos posible, pero siempre acabo con la imagen de estar en la plaza de mi pueblo, vestido de domingo, agarrado a las barreras de madera azul que separaban a los músicos.
Creo que la única explicación que le puedo dar es que, aunque intenté aprender solfeo más de una vez, siempre toco la música de oido, y eso se extiende al resto de la vida.
Como jamás encontré el código que descifraba el misterio de la vida, siempre he tocado de oído, intentando que mis decisiones, eso sí, desafinaran lo menos posible en el concierto de cada día.

*FOTO: DE LA RED

viernes, 9 de septiembre de 2011

PESADILLA A LO PONS



La verdad es que no tengo claro si estoy escribiendo en el blog. Llevo todo el día con la sensación de que estoy soñando.
Hace al rededor de cuarenta grados; miro por la ventana y ni estoy en Torrevieja ni mucho menos en el Caribe. En frente está la misma casa, con los mismos vecinos, y en la calle los mismos perros haciendo las mismas cosas de todas los días.
Entro en internet para leer los periódicos por la cara, bueno, en realidad estoy pagando la línea de ADSL que por lo que tengo entendido es de las más caras del mundo. Entre sueños, creo, pienso que para este tipo de cosas no se fijan en los demás paises; para hacer cortes y recortes sí, pero para bajar precios y copiar sueldos no.
En los periódicos digitales se hacen eco de las declaraciones del Vicesecratorio de Comunicación del P.P., el Señor Pons, indicando que cuando gobiernen ellos su objetivo va a ser crear tres millones y medio de puestos de trabajo.
Me da la impresión de que si estoy en un sueño, me debo de estar agitando incontroladamente.
Si en su momento ya nos pareció una locura la pretensión por parte del partido socialista de los ochocientos mil puestos de trabajo, ahora los del partido popular han dado un órdago como si se tratara de una partida de cartas.
Cómo habrá sido la cifra que ninguno del partido ha salido apoyandole, y luego él ha tenido que salir matizando lo dicho de que no era una promesa, sino un deseo.
Me ha recordado a Chiquito de la Calzada y a su ya famoso: Donde dije digo...
En realidad como promesa hubiera sido el ofrecimiento de una auténtica utopía, como deseo se queda corto, porque debería de ser trabajo para todos y no sólo para esos tres millones y medio.
Me he obsesionado con la idea de que con tal cantidad de trabajo, alguno conseguirá dos, y no sé si es mejor que me toquen los dos trabajos a mí, o que alguien se quede con el mío.
Lo más seguro es que si consigo despertarme, si es que estoy dormido, me dé cuenta de que ni tres millones y medio, ni trescientos cincuenta mil.
Mi sentir es de total frustración, por lo que no sé si intentar despertarme o no, ya que a lo mejor cuando vea la realidad, es el momento en el que esté dentro de la pesadilla.

*DIBUJO: DE LA RED

jueves, 8 de septiembre de 2011

INVISIBILIDAD A LA DONOSTIARRA

Acabo de descubrir uno de los enigmas más buscados por la humanidad, me refiero al don de la invisibilidad.
Tenía ya sospechas sobre el tema, pero hace unos momentos lo acabo de corroborar.
Aprovechando la hora, tres de la tarde, más luz y calor que en un estudio de televisión, volvía cargado con un carro de la compra, que aún siendo de color azul originalmente, se había vuelto rojo, un rojo tensión, ya que estaba a punto de explotar, para repartir de esa generosa manera todo lo que había comprado durante mi incursión en una gran superficie; después de irme, una superficie normal.
Llego a un paso cebra, entre las calles Balleneros e Isabel II en Donosti, voy a pasar con todo mi cargamento, y en ese momento viene un coche, yo no distingo de marcas, coche si era porque me ha dado tiempo a contarle las cuatro ruedas, y a poner en duda la honorabilidad de la madre del que ocupaba la plaza de conductor, y cruza el paso cebra a milímetros de mí, casi me hace una liposucción.
Lo mejor del caso es que el conductor ha puesto cara de no haberme visto, cuando yo he podido comprobar que no usaba ningún tipo de colutorio. Su actuación  digna de la Concha de Oro en el próximo festival de cine.
De aquí viene mi convicción de que en Donosti, un peatón que se precie al llegar
a un paso cebra se vuelve invisible. Además al conductor, en ese mismo momento, siempre le entra urgencia, pero no una urgencia cualquiera, sino la madre de todas ellas, y en vez de frenar acelera.
Somos los del marco incomparable, los mejor vestidos, los más educados, y ahora...los descubridores de la invisibilidad.
Ahora fuera de bromas, como residente en Donosti desde hace muchos años, sinceramente creo que tenemos entre las asignaturas pendientes la de la educación vial, en especial con todo lo relacionado con los pasos cebras y lo de dar preferencia al otro. En el noventa por ciento, o más, el conductor de un coche siempre intenta pasar antes que el peatón, porque entre otras cosas lleva las de ganar.
Resumiendo, y como hubiera dicho el todavía recordado Rodriguez de la Fuente: las cebras en San Sebastián son animales en extinción.

*DIBUJO: DE LA RED

miércoles, 7 de septiembre de 2011

PRESENTE ON LINE

He estado un rato pensando, solo pensando, por aquello de que no podemos hacer dos cosas a la vez, al menos bien, por lo de la neurona única, y he llegado a la conclusión de que esta sociedad actual hace que la persona, por no tener que andar diferenciando entre hombre y mujer, sea más solitaria.
Proliferan todo tipo de aparatos, móviles, tablets, portátiles, para que el individuo, continúe dentro de su castillo, solo y sin la compañía de otros.
En realidad, la técnica actual le brinda la posibilidad de estar todo el tiempo conectado con otros, pero sin mezclarse.
Cada vez hay menos tiempo para, y voy a aprovechar para meter una frase hecha que queda fenomenal, conciliar la vida social.
Ésta es la realidad, soledad y frases hechas.
En mi juventud, intentabas estar en casa el menor tiempo posible, dejabas una foto y cada cierto tiempo la ibas cambiando, para que les sonara tu cara. Y unos años antes, más todavía.
Por éste tipo de actitudes, nació aquí por ejemplo, la costumbre de cantar en los bares, y las canciones típicas de la tierra, lo que en Vizcaya conocen como bilbainadas. No podía ser de otra manera: El mundo capital Bilbao.
Ahora si quieres cantar una bilbainada lo tienes que hacer en un chat, porque hasta en los bares con el famoso “Reservado el derecho de admisión”, seguro que si amagas con cantar, en dos minutos estás en la calle.
Siempre que empezabas a entonar con la cuadrilla, se intentaba cantar a varias voces. Puede que venga de aquí, lo que ahora se conoce como “disparidad de opiniones”, otra frase hecha, y que se acentúa más en Guipúzcoa que en Vizcaya. Todos empiezan con el mismo tema pero con diferentes matices.
Con relación a la toma de decisiones, para cuando te das cuenta, los vizcainos no es que se hayan puesto de acuerdo, sino que, por ejemplo, la obra ya está hecha.
Ejemplos son el metro, el Guggenheim, y todo lo demás.
En Guipúzcoa, estamos atascados con la estación de autobuses, y no hay manera de pasar a otro tema, ya se han proyectado una buena colección de ellas, pero para cuando la tengamos de cuerpo presente, seguro que el autobús ya no está de moda.
Ya no podemos ni esgrimir como excusa lo del marco incomparable, pues esta semana grande en Bilbao ya he oído referirse al Guggenheim como al marco incomparable, y es que el que no se conforma es porque no quiere.
Lo dicho, me voy a dar una vuelta por la Parte Vieja, la de Donosti, la de toda la vida, porque me encanta, pero eso sí, virtualmente, porque luego no me da tiempo
a escribir en mi blog. Tengo también ganas de ver un poco la Concha, pero lo haré desde mi página web on line, para algo tengo cincuenta megas monárquicos, osea, reales.

*FOTO: EL GRUPO GUIPUZCOANO "LOX XEY"; DE LA RED

martes, 6 de septiembre de 2011

RECORTES Y MÁS RECORTES


Comienza un nuevo curso, el de los estudiantes, el normal, aunque también empieza el otro, el político, si ésto fuera La guerra de las galaxias, nos estaríamos refiriendo al lado obscuro, y he decidido no esperar a comer las doce uvas de rigor, y casi morir en el intento, para hacer una serie de propósitos de enmienda con relación a cambios que tengo que llevar a cabo con respecto a mi vida diaria.
Me voy a tener que regir, como si fuera un país, desde el punto de vista económico, e ir evitando las subvenciones a todo lo que me rodea. Unas de las más importantes son a los bancos y, en mi caso, cajas de ahorros. Ir limitando la colección de tarjetas para sacar dinero de las citadas entidades, ya que al final siempre es el banco en cuestión el que más dinero saca de mi dinero.
Voy a limitar las condenadas tarjetas a una, e intentar que para cuando la utilice de una vez a otra ya haya cogido polvo.
Otra subvención es a las empresas de telefonía móvil. En la contratación de éstas siempre tienes el pensamiento de coger tarifas planas para todo, por si acaso.
Nuestras vidas están llenas de por si acaso, voy a contratar un seguro para la casa, para el coche,,,,, y que contemple todo tipo de problemas. Al cabo de los años y calculando, el no contratar ese por si acaso hubiera hecho que tuvieras otra casa u otro coche con lo que te hubieras ahorrado.
Otro gran recorte que hay que dar es al tema del asueto y su consiguiente celebración en forma generalmente de cine.
No hace falta decir que adoro el considerado séptimo arte, el problema es el ritual que se ha creado artificialmente en torno a él. Entre chuches y bebidas varias, al final del año hubieras conseguido que por el mismo gasto un Harrison Ford, por ejemplo, hubiera actuado en persona para ti.
Voy a darle orden de prioridad al teatro, aunque es más caro, pues prefiero pagar la diferencia de las chuches y cenas varías anteriores o posteriores, a los hijos de Talía, a los actores. Ya que son subvenciones, que vayan a donde realmente hace falta dinero. Además aquí se puede hacer una buena pregunta: ¿Por qué para el cine te gastas un montón de dinero en dulces caprichos de todo tipo para el disfrute gustativo, y en cambio, generalmente, al ir al teatro ésto no ocurre? Una buena pista puede ser: el evitar hacer ruido que moleste a los demás. Aunque, esto es curioso, pues el ruido molesta siempre.
En otro orden de cosas, junto a la puerta de entrada a casa, voy a poner una serie de cascos, como a los mineros, para que todo aquel que entre en mi reino, lo haga pertrechado con semejante invento para evitar las tarifas abusivas. Se trata de pagar lo que consume uno mismo, no, por la cantidad a pagar, lo consumido por toda la comunidad.
Voy a darme de baja del gimnasio. No es que no tenga intención de hacer ejercicio físico, lo que no quiero es ir de-pascuas-a-ramos, y a la salida después de haber estado treinta y cinco minutos, porque ya más me produce alergia, regalarme por lo buen chico que he sido una Coca-Cola. La chispa de la vida la tengo que poner yo día a día, con ganas de vivir.
Donosti es lo suficientemente grande y con suficientes alicientes como para moverme de un sitio a otro en el famoso tren de San Fernando, y hacer ejercicio mientras me socializo un poco.
Más adelante y sin jefe de prensa, iré anunciando nuevas medidas para renovarme, pues considero que el mejor lifting que una persona puede hacerse a sí misma es escuchar su corazón, y hacer que palpite cada día con más fuerza. Y el secreto es la ilusión y la risa. He dicho risa y no sonrisa, pues hay que reírse de todo, y en especial de uno mismo, ya que de los demás queda un poco feo.

* FOTO DE LA RED
 

lunes, 5 de septiembre de 2011

UN MUSICAL DE COSTUMBRES

Oído esta mañana en las oficinas de Pesa junto a la estación de autobuses en Donosti:
-Perdone, señor -una señora que sólo podía utilizar Loewe, dirigiéndose al caballero de la taquilla – Me podría decir esta tarde a qué horas hay autobuses para Loiu.
-A las horas en punto - le responde una voz varonil.
-Pues entonces deme uno para esta tarde a las 4:30- ella le contesta con un aire de decisión total.
-Señora, le estoy diciendo que a las horas en punto- le corrige la misma voz varonil de ya no tan caballero señor.
-Perdone, no me daba cuenta – le contesta la señora toda amabilidad y comprensión.- Démelo entonces para las 16:30.
Mi primera reacción ha sido mirar por los alrededores por si descubría alguna cámara oculta, pues la tal señora tenía que ser un autentico cebo, no podía ser otra cosa.
Tras explicarle en plan profesor a niño pequeño a qué se refería, la señora Loewe ha cogido el billete para las cuatro de la tarde, totalmente erguida, y con cierto aire de ingravidez se ha dispersado en el exterior.
Sinceramente, tras pensarlo no me ha extrañado nada esta conversación, pues últimamente he comprobado que hay un gran problema de incomunicación.
La gente en general, no escucha, hace que escucha, y va a lo suyo.
Hace mucho tiempo que lo tengo comprobado con el siguiente detalle. Salgo del portal de casa a la calle, si hay otras personas, de primeras ellas entran antes.
Entro en el portal de casa desde la calle, si hay otras personas también entran las primeras. Todo sonrisas y buenas maneras, eso que no falte.
Pues lo ocurrido hoy es lo mismo, la gente va con un plan predeterminado, y de eso no se apea.
Muchas veces en nuestra sociedad lo que se lleva no son las buenas maneras, sino la buena coreografía, somos auténticos bailarines de un musical de costumbres, en el que prima los buenos ademanes, pero que al final...cada uno va a lo suyo, y lo demás no 
importa.

*FOTO: UN MOMENTO DEL MUSICAL "HAIR"

domingo, 4 de septiembre de 2011

TURISMO QUE DESPIERTA PASIONES


Estos días está en boca de todos esas imágenes difundidas en primer lugar por la red de redes, y después haciendose eco los diferentes medios de comunicación, en las que se ve a una pareja de turistas, teniendo relaciones sexuales en el Palacio Real de Olite, imágenes captadas  por otro turista con un potente teleobjetivo.
No son además, lo que se pudiera pensar en un primer momento, la típica pareja de jovencitos despertando a la llamada del amor, sino más bien una pareja, diríamos de adultos, dejándose llevar por sus instintos rodeados de historia por los cuatro costados.
En declaraciones de la protagonista, alcaldesa de la localidad belga de Aalst y miembro del Partido Popular Europeo, esas imágenes parece que tienen ya cuatro años aunque se han dado a conocer ahora, y dice que no deben de afectar a su carrera política, porque pertenecen a su intimidad.
Nunca es deseable que te pillen con las manos en la masa, pero tratandose de alguien perteneciente al círculo político es mejor salir a la prensa por quererse intesamente, que por dar un pelotazo; aunque bien pensado, en este caso los pelotazos se los han dado a ella. Perdón por la broma, pero no me podía, ni quería, resistirme.
El gobierno de Navarra, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, aunque pertenezca a otra autonomía el dicho es así, ya estará pensando en sacar partido de esta publicidad añadida. Frases como Tierra que despierta pasiones, Un placer a su alcance, Olite, te pone..., o incluso Dejate poseer por la historia, son frases que se me ocurren, como diría un cursi, a vuela pluma.
Algunas veces un hecho de este tipo, te puede ahorrar millones de euros en una campaña de publicidad, y como se suele decir, lo importante no es que hablen ni bien ni mal, sino que hablen.
Es mejor este caso, que esas campañas que en especial hacen por tierras británicas, y que inducen a que jóvenes extranjeros invadan en especial tierras catalanas, para hacer turismo de borrachera y de saltos desde el hotel a la piscina.
Nunca es deseable recibir aguas torrenciales, pero si las puedes en cierta manera aprovechar para que rieguen tus campos mejor que mejor, y éste es el caso.
El único problema que le veo, es que miles de parejas se pongan a imitar, y lo que no pudo la guerra, pueda el amor, y los muros de este palacio se vengan abajo, por un estallido de pasión.

*FOTO: DE LA RED

sábado, 3 de septiembre de 2011

UNA NUEVA CADENA

Viernes noche, en ninguna de las cadenas hay alguna película que me haga perder la razón.
Mientras surfeo por internet voy a poner la cadena alegre para pulsar como está el corazón amarillo del país.
Hoy hay un plato fuerte pues una de las pesos pesados de su oferta televisiva, para mí acordandome de un personaje de guiñol de mi época infantil la denomino la princesa pachuchita, porque siempre está quejandose de todo y de todos, va a airear los trapos sucios, sólo de este verano, pues ésto también, de acuerdo a la época en que estamos, se vende por fascículos.
Dejando al margen a los contertulios reunidos, que cada uno siempre juega su partida de ajedrez para enrocarse más a su sillón, y si puede arrear unas cuantas patadas a las partes nobles de los de al lado, la contundencia de los argumentos no se sostiene con la descripción de las palabras, sino con los decibelios usados para mandar su mensaje.
Intentando hablar de una manera aséptica diré, que dos personas, ella y su pareja, que están siempre discutiendo no llevan un buen camino, por mucho que la sabiduría popular refrende esa posición con dichos como amores reñidos, amores queridos.
Más de una vez he dicho desde estas páginas que a veces la mejor manera para ver las cosas claramente es contarlas con el sexo de los personajes cambiados. Es decir, si en vez de ser mujer la protagonista, fuera un hombre. En este caso, está claro de que todos sus argumentos nos darían como mínimo el perfil de un auténtico machista, lo que familiarmente conocemos como un autentico moro.
Siempre habla de su casa, de su dinero. No toman las decisiones entre los dos, ella le dice lo que tiene que hacer. A él le ofrecieron ir al programa de Supervivientes; lo más normal es que la decisión se hubiera tomado entre los dos, pues dicho por ella misma le prohibió ir, porque en cuanto ve un par de tetas pierde la noción.
En cada pareja las reglas las deben de poner entre los dos, y en este caso creo que no es así.
La televisión se ha convertido en un auténtico patio vecinal, y en el otro lado del patio estaba la cadena triste.
Como continuación de la semana anterior, en la que se mostraron imagenes de un famoso bailarín en una playa pseudonudista, pues en realidad por lo que he oído, van todo tipo de personas, aunque muchas de ellas se desnuden, dando rienda suelta a sus impulsos sexuales con otro varón, que en ese momento era su pareja.
Ahora se ha descubierto que todo fue una trampa para pillar a ese famoso personaje, y nunca mejor dicho, con las manos en la masa, trampa urdida entre otros por su pareja en cuestión.
Como premio a esa delación, palabra bien escogida porque rima con felación,
ayer dieron un gran pedazo de audiencia al hasta ahora novio.
La excusa de este proceder es que la cadena quería desenmascarar a este individuo.
Para mí el espectáculo no tiene ningún tipo de perdón. En primer lugar la persona entrevistada, no hubiera pasado el mínimo test de comportamiento. Está claro que siendo compasivo diremos que esa persona necesita de ayuda, pero mucha además. Y siendo realista, como mínimo el individuo en cuestión da miedo si piensas que te puedes topar con gente así en la vida real.
Si tu quieres ofrecer cualquier imagen en televisión siempre puedes poner cualquier tipo de excusa para darla, pero a la postre eso es inexcusable.
Estoy pensando seriamente añadir otra cadena a mi televisión, y ésta seria la del váter. Tengo que hablar un día de estos con mi fontanero...
El miedo que me da es que al tirar de la cadena..., desaparezcamos todos.

*DIBUJO: DE LA RED