Mostrando entradas con la etiqueta fe. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta fe. Mostrar todas las entradas

lunes, 12 de agosto de 2019

LA VIDA COMO CAMBIO DE RASANTE...



En días como hoy, 12 de Agosto, prefiero no mirar ni debajo de mi cama, porque con la cantidad de gente que hay en todas partes, así me evitaré el oír una voz que sin duda me dirá “Ya lo siento pero pasaba por aquí y es el único sitio en el que no he encontrado a nadie, y he pensado que no le importaría…

Lo bueno que tiene este día, es que tengo que felicitar a varias personas que por una u otra razón son importantes en mi vida, y que ellos ya lo saben, por lo que no los voy a mencionar por aquí. Porque uno, este vecino del mundo, siempre debe dejar algo para su intimidad, sino sería una palabra sin uso, como el amor y alguien a quien amar.

El 12 de agosto sería como un cambio de rasante en lo alto de un puente, que al comenzar a bajar sin duda sabes que te llevará sin apenas respiro hasta el fin de año. Y es que, en cierta manera, la vida son subidas y bajadas en las que vas aprendiendo, o al menos deberías hacerlo, más que nada para que el viaje merezca la pena, y además, tengas algo que contar, y no ser simplemente un expendedor de saludos.

Os tengo que comentar un secreto. Más de una vez, y hoy es uno de esos días, no me queda más remedio que escribir, para así saber lo que estoy pensando, o al menos lo que se cuece en mi interior. Puede sonar un poco raro, pero así son las cosas, al menos las mías. Y es que hay muchos días, con los años uno va aprendiendo a vivir, e incluso a sobrevivir, en el que no me cuento todo lo que me mueve y me conmueve, más que nada, por lo comentado anteriormente sobre la intimidad.

Hoy será una buena noche, para como siempre, intentar ver la famosa lluvia de estrellas, las Perseidas, y como cada año no acabar de verlas, pero ya el hecho de estar junto al mar sin duda merecerá la pena...
Quizás a eso que no se ve pero que se persigue siempre se le puede llamar “fe”, o en su versión más humilde “esperanza”.

Como hubiera dicho mi madre “Ya es 12 de agosto, y sin vender una escoba…”.

*FOTO: DE LA RED


lunes, 4 de diciembre de 2017

EL ASCUA Y SU CONTORNO



La mayoría de las veces no ocurren las cosas como las tienes planeadas, quizás por eso nos pasamos la mitad de la vida improvisando, intentando arrimar el ascua a nuestra sardina o a lo que queda de ella. Y las Navidades precisamente son, la mayoría de las veces, una muestra muy elocuente, un buen ejemplo, de lo que veías en ellas en tu infancia, y lo que ahora significan para ti. Lo que vendría ser el equivalente a tu sueldo pasado por Hacienda, que se queda en nada.

Quizás la vida es una tragicomedia y depende siempre hacia dónde pones el foco y enfatizas. Estos días también, son un ejemplo. Nieves en el País Vasco al menos, y conviene no agobiarse, no ver la parte negativa, sino el manto de belleza con el que muchos paisajes se han despertado.

Pronto comenzarán los informativos con esas noticias que ya están preparadas y que hacen que la mitad, sino más del “Telediario”, ya esté pre-programado. Las mejores marcas en deportes, los peores accidentes, los famosos que este año nos han dejado...

Sinceramente, este vecino del mundo con el empacho de todo que ya lleva dentro, y especialmente político, y que se imagina que es como el del común de los mortales, en este año terrible, quizás solo necesite una sonrisa cómplice de sus personas amadas, y una lenta caricia de comprensión.

Ya el ascua y las sardinas intentaremos arrimar en otro momento. Ahora son tiempos de estar con los tuyos, y especialmente sentir que lo son.
Deben de primar las personas, y no la acumulación de cosas.

Siempre me han encantado esas fotos invernales, llenas de niebla, en las que más que ver el paisaje, se intuye, hace falta incluso un acto de fe, pero sabes que está ahí. Lo mismo ocurre con los tuyos, con tu familia, con tus amigos. En las nieblas de los problemas, en el frío de la soledad, en cualquier momento aparecerán, y si no tú mismo debes de encargarte de llamar a su puerta.


Hay llamadas que en sí mismas son un acto de amor. Hagámoslo.

*FOTO: DE LA RED

jueves, 21 de septiembre de 2017

¿EL HUMOR TIENE BANDOS?


¿Cuándo uno se encuentra en la tesitura de que le están enseñando un capote para que embista, aparte de que se presupone que le están llamando cornudo, pero ni hay pruebas de ello ni las habrá, merece la pena embestir, si ve que en el fondo todo lo que está ocurriendo es con fines publicitarios?

Es lo que está ocurriendo con la denuncia que la Unión de Guardias Civiles ha interpuesto a la plataforma de televisión por "streaming" Netflix ante la Fiscalía de la Audiencia Nacional por considerar que la publicidad de su película, "Fe de etarras", constituye un delito de "humillación a las víctimas" del terrorismo.

El motivo de la denuncia es un gran cartel, mostrado en la foto al comienzo de este “post”, que cubre un edificio en pleno centro de Donosti, y en el que se puede leer la frase: "Yo soy españooool, españoool, españoooool", con las palabras "español" tachadas en , rojo, bajo la que figura el título de la citada película. 

Una comedia (detalle éste, comedia, que hay que tener muy en cuenta), en la que con el mismísimo título, ya se da a entender que va a tratar, cuando menos de ETA, y luego con un poco más de información (y para eso se publicita), nos enteramos, que de manera "desenfadada", trata sobre las peripecias de un comando etarra en Madrid. 

Película dirigida por el donostiarra Borja Cobeaga, guionista, junto con Diego San José, de la populares "Ocho apellidos vascos" y "Ocho apellidos catalanes", y uno de los responsables del exitoso programa satírico  de ETB “Vaya semanita".

Ocurre que en presuntos delitos donde la censura anda por medio, ya de primeras es aconsejable, y este vecino pide perdón de antemano, “cogérsela con papel de fumar”, y como en el ámbito de la ley estamos hablando, seguro que ambas partes, y ninguna, van a tener razón.

Además, una empresa tan pujante como Netflix, y utilizando las mismas palabras que hubiera empleado esa gran filosofa que todavía es Doña Amalia, la madre que me parió, “si se han metido en semejante berenjenal” es porque un grupo de sesudos abogados ya han previsto el posible litigio, y han dado su visto bueno.

Para ciertas cosas tenemos la piel hipersensible, aunque al final sólo se trate de promocionar una película, se presupone que con buenas dosis de ironía y humor, que se presentará en el Festival de San Sebastián el próximo 29 de septiembre, y en la ya supercitada plataforma,  el próximo 12 de octubre. La publicidad, en realidad, ya está más que hecha entre todos, y muchos de nosotros, sin cobrar un euro. 

Hasta el mismísimo presidente del PP de Gipuzkoa, Borja Sémper, ha expresado públicamente sus "ganas" de ver la película, argumentando que se trata de un filme que se ríe de ETA, lo que a su juicio es lo contrario de "avalar" la trayectoria de la banda terrorista.

Quizás muchos vascos, la mayoría, y seguimos en tono de humor pero sin alejarnos de la realidad, porque no tienen por qué ser excluyentes, en su momento podíamos haber interpuesto muchas demandas; porque cada vez que salíamos de nuestra autonomía, y al decir de dónde eramos, con cara medio pícara/medio seria, nos decían eso de "Ah, eres etarra". Y parecía que teníamos que demostrar que éramos buenas personas, lo cual hubiera sido harto difícil, porque primero habría que ponerse de acuerdo en qué es ser buena persona.

Muchas veces, el problema, si lo hay, no es en lo que se dice en un momento determinado, sino cómo se percibe y recibe por el otro "bando". Y mientras haya "bandos", siempre habrá polémica, y lo más importante, nada de humor; y si algo es el humor, o debería de ser, es salud en potencia.

*FOTO: DE LA RED,