Con un día totalmente desapacible en lo meteorológico, se celebró ayer, sábado, el V. TORNEO INTERNACIONAL BERA BERA DE KARATE PARA DEPORTISTAS CON DISCAPACIDAD, en el que estaban inscritos 44 karatekas que se desplazaron desde Alemania, Francia, Italia y de todo el Estado.
Como ya viene siendo habitual, el tatami en Anoeta se convirtió en un lugar de exaltación al esfuerzo y a la ilusión, tanto para los deportistas en cuestión, como para sus entrenadores y el equipo arbitral que gentilmente siempre presta su ayuda a tal acontecimiento.
Como para recordarnos el esfuerzo y pundonor necesarios durante todo el año, viene siendo habitual en todas las ediciones un malísimo tiempo, y como este vecino del mundo ha recordado al principio de este artículo, lo de ayer pudo ser una manera de celebrar el primer lustro del citado certamen por parte de la naturaleza, mostrando parte de su poder mientras caían, como se suele decir vulgarmente, "chuzos de punta" y un frío que te borraba de la cara, al tensarla, cualquier arruga.
En las tres pistas con que cuentan las instalaciones donostiarras, desplegaron todo su arte e ilusión los diferentes karatekas, entre los que se incluyen deportistas con síndrome down, discapacidad física, e intelectual en un Campeonato internacional que sigue siendo único en su género.
También intervino como viene siendo habitual, la compañía Verdini Dantza Taldea, en el que se incluye un grupo de bailarines con síndrome Down, y cuya actuación, especialmente en el Baga, Biga, Higa, cosechó grandes aplausos y el reconocimiento del público.
Desde esta ventana, este vecino del mundo ha ido viendo crecer y consolidarse un acontecimiento deportivo, que por lo que signifia de esfuerzo e ilusión para muchas personas involucradas, debiera de tener más cobertura por parte de los medios, pero año a año, y paso a paso, lo va consiguiendo, porque no hay duda de que el que va, aunque sea como mero espectador, queda enganchado, como en una tela de araña, por el sentimiento que envuelve a todos los involucrados, y en la próxima edición volverá para comprobar la evolución de unas personas que son algo más que deportistas.
¡Ya queda menos para el próximo año!
*FOTO: F.E.PEREZ RUIZ-POVEDA
En las tres pistas con que cuentan las instalaciones donostiarras, desplegaron todo su arte e ilusión los diferentes karatekas, entre los que se incluyen deportistas con síndrome down, discapacidad física, e intelectual en un Campeonato internacional que sigue siendo único en su género.
También intervino como viene siendo habitual, la compañía Verdini Dantza Taldea, en el que se incluye un grupo de bailarines con síndrome Down, y cuya actuación, especialmente en el Baga, Biga, Higa, cosechó grandes aplausos y el reconocimiento del público.
Desde esta ventana, este vecino del mundo ha ido viendo crecer y consolidarse un acontecimiento deportivo, que por lo que signifia de esfuerzo e ilusión para muchas personas involucradas, debiera de tener más cobertura por parte de los medios, pero año a año, y paso a paso, lo va consiguiendo, porque no hay duda de que el que va, aunque sea como mero espectador, queda enganchado, como en una tela de araña, por el sentimiento que envuelve a todos los involucrados, y en la próxima edición volverá para comprobar la evolución de unas personas que son algo más que deportistas.
¡Ya queda menos para el próximo año!
*FOTO: F.E.PEREZ RUIZ-POVEDA
No hay comentarios:
Publicar un comentario