Hoy, el denominado Sábado Santo, es uno de esos días que
está no por sí mismo, sino apoyando a otros de su familia pero más famosos,
como el Jueves y el Viernes Santo, y para culminar con el Domingo de
Resurrección.
Lo que en la vida corriente denominamos famosos por
familia: como, por ejemplo, la saga de los Iglesias, y con ello este vecino no quiere hacer un chiste
entre los días anteriores, y que además pertenecen a la Iglesia. Sino que los
hijos de la Familia Iglesias – Presley han sido tocados por la barita de la
suerte, y mejor para ellos. Ya en sí es una suerte que te paguen un riñón por
anunciar unos bombones de chocolate, cuando el común de los mortales tiene que
pagar por ellos. O por anunciar unas baldosas, que antes las baldosas eran eso,
baldosas, y ahora tienen pedigrí.
Como se suele decir hay quien nace con estrella, y luego
quienes nacemos estrellados. Que somos los sábados santos, que estamos porque
tenemos que consumir y para que nos consuman, naturalmente.
Como este vecino del mundo hace mucho tiempo que asumió
su papel, pero no por eso se conforma, sí tuvo claro desde el principio que si
él no es su mejor amigo…, mal andamos. Por eso en lugar de dar trabajo a
psicólogos y similares, cada día que siente que tiene que andar con cuidado,
más que nada para no pisarse la moral, no se encarga de buscar a otros que
están peor que él, sino al contrario, busca ejemplos a los que la vida aunque
sea en una décima de segundo les ha sonreído.
Internet, como toda arma poderosa puede usarse para bien
o para mal. Personalmente este vecino del mundo la utiliza para muchas cosas,
los que me siguen habitualmente ya saben que tengo dos blogs (el otro es de
pintura) y que este blog personal está creado para eso, para evitar tener que
tumbarme en una camilla y contar mi vida, pagando por ello, y eso que soy el
protagonista. Y si con ello, con este blog, consigo hacer sonreír y pensar a
alguien, mejor que mejor.
En momentos bajos utilizo “Youtube” para disfrutar de
ejemplos en los que personas humildes alcanzan ese minuto de gloria, o más. El
ejemplo más conocido puede ser el de esa Susan Boyle (https://www.youtube.com/watch?v=Ifc4a1X5vAo),
que mientras todos se reían al verla aparecer en el escenario diciendo que quería
ser como Elaine Page, toda una estrella de los escenarios en Gran Bretaña, les
dejó no solo con un palmo de narices, sino que al poco tiempo cantó con la
propia Mrs. Page (https://www.youtube.com/watch?v=r0ogG9_FBWI), no como un
regalo sino como un derecho bien ganado.
Otro ejemplo, que incluso merecería el hacerse una
película sobre su vida, tenemos el de Pablo López, un mejicano, sin hogar, sin
familia, que se presenta a un concurso mejicano, quizás para sentir la prueba de
que está vivo, y a todos sorprende con esa gran voz de roquero viejo (https://www.youtube.com/watch?v=XneqOrjFtFI)
Ya para terminar, para que esa moral no solo se levante
sino que levite, otro ejemplo, que éste si de un cuento se tratara bien pudiera
ser el de “La bella y la bestia”, y en el que las dos personas (Charlotte
and Jonathan) que intervienen no son bellas, sino bellísimas, aunque una de
ellas solo lo sea por dentro, y dependa claramente de la confianza que le da la
otra (https://www.youtube.com/watch?v=cMIXQgMMdDU).
Los sábados santos, no son unos sábados cualquiera,
aunque en teoría no tengan la brillantez de otros días, y se tengan que ganar
su razón de ser cada vez que aparecen. Por cierto, si con ninguno de los tres
ejemplos afloraron a sus ojos aunque sea unas tímidas lágrimas, es mejor que se
lo haga mirar, porque realmente tiene un problema, o muchos, vaya usted a
saber.
*FOTO: DE LA RED
No hay comentarios:
Publicar un comentario