sábado, 13 de abril de 2013

SPAIN IS DIFFERENT, O CASI


Spain is different”, ya lo decía el eslogan franquista, utilizado para promocionar esta piel de toro llena en un tiempo de playas y chiringuitos.
Mientras que lo normal es que la juventud, paradigma de ideas y utopías, ponga en un brete al gobierno de turno, aquí son los para mí mal llamados “yayoflautas” los que se parten la cara en nombre de sus nietos, con el recuerdo de la época posterior a la guerra civil, que pensaban que habían abandonado para siempre, pero que en realidad está más cerca que nunca.
Hasta el gobierno es diferente a los de los otros países.
Para que luego digan que este gobierno no tiene recursos. Que no puedes impedir el movimiento “escrache” pues los acotas a trescientos metros de todo, que eso puede ser, como diría el ya olvidado Álvaro de la Iglesia, “en la porra”, y además, vía sanciones les sacamos bastante pasta, que no nos vendrá mal para lo que sea, incluido un poco de confeti para algún que otro cumpleaños, si hiciera falta.
Y es que el español, no el idioma, sino el nativo de España, es una persona de recursos.
Será el único país, por ejemplo, en el que hay un programa del corazón en el que las noticias son los mismos tertulianos, con sus filias y sus fobias.
El periodismo de la llamada prensa rosa, salvo excepciones que no se si llamarlas “honrosas”, últimamente se ha transformado en arte total. Son una especie de escultores que con los materiales que en ese momento tienen modelan situaciones utópicas a las que luego dan rasgos hasta cierto punto reales.
Ayer mismo, en la cadena alegre, dieron unas imágenes, de Zeus, el hijo de Sara Montiel, tomadas al día siguiente del funeral de la actriz, en el que se le ve, con aparente tranquilidad, ir al gimnasio. Unas imágenes que analizadas fríamente, no es que no sugirieran nada, sino que llevaban al aburrimiento. Pues ahora viene el arte que citaba anteriormente. Los contertulios, convertidos en ese momento en una especie de comité psicológico llegaron a la conclusión de que su comportamiento en ese instante denotaba total indiferencia con el drama que acababa de vivir unas horas antes, y que según ellos ven la vida, su actitud distaba de lo que ellos estiman que es lo “normal”.
Me imagino que como todavía la Semana Santa está cercana, esperaban que se flagelara un día sí y el otro también. Y en ese momento, el citado comité, quizás hubiera estimado que eso era excesivo y que rondaba el mundo del paripé.
Y es que todos somos diferentes en un mundo diferente, que no por ello mejor.

*FOTO: DE LA RED

2 comentarios:

  1. Y si hubiera estado llorando por los rincones habrían dicho que qué verguenza, que en vida no le había demostrado nada y ahora lloraba su pena. Si es que en el fondo tienen que hablar de algo y sacar los trapos sucios de quien sea para decir que trabajan. De lo de los abuelos tienes razón, son los que más narices tienen y los que se partieron la cara con los grises y ahora se la tienen que volver a partir porque los demás a veces somos pasotas. Ana Martxueta

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  2. Con respecto a Zeus, el hijo de Sara Montiel, es lo que decía en el texto, no tienen nada, y analizan las pocas imágenes en el tono que ellos quieren.
    Con respecto a las nuevas generaciones, hemos vivido con prácticamente todo conseguido por nuestros padres, mediante movimientos sociales en su momento, y si nosotros hemos vivido bien, nuestros hijos mejor todavía, y ahora no tenemos reflejos para actuar, y actúan los de siempre, que ya son abuelos.

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