Ayer nos enteramos de que
la reina Beatriz de Holanda ha abdicado en su hijo, y a buen seguro
muchos españoles habrán pensado en ese refrán que habla de unas
barbas peladas, y otras puestas a remojo.
Vaya por delante que este
vecino no se considera ni monárquico ni republicano, solo un
ciudadano del mundo, pero monarquía es el sistema que en estos
momentos tenemos en nuestro país. Y como en los bailes de salón
cuando toca un vals, o bailes latinos, a nosotros nos toca bailar
monarquía.
En cuanto se ha sabido la
decisión de Beatriz, ya han salido las primeras voces que se supone
enteradas, y quizás interesadas, en decir que allí, en Holanda,
existe esa tradición, la de abdicar al llegar a una cierta edad.
Sinceramente al oír ese
comentario, a este vecino le afloró una sonrisa en los labios, al
pensar cuál es la tradición española.
No nos engañemos,
venimos de una dictadura, iba a decir eso de especialmente dura,
pero es que todas las dictaduras por definición lo son. Antes de
eso, y de alguna que otra república vista y no vista, también
existió la monarquía, pero eran otros tiempos.
Si nos están vendiendo
continuamente “la moto” de que hay que modernizarse y ponerse las
pilas con respecto al resto de Europa, en cuanto a empleo, y a
encarecerlo todo, también se debería de modernizar la monarquía y
dejar atrás ciertas costumbres que quizás solo sean un lastre. Así
el hasta ahora rey podría dar rienda suelta a todo tipo de pasiones
y hobbies, sin que tenga que andar discerniendo entre la vida pública
y privada.
Por otro lado, ya que se
ha “invertido” mucho dinero en la educación del príncipe
Felipe, habrá que aprovecharla cuando éste todavía pueda rendir al
máximo, y a sus 45 años, la misma edad que el heredero holandés,
es una buenísima edad, y que no pase como en esas islas que están
por el Canal de la Mancha, en las que el heredero se va a pasar la vida
esperando, y ya está casi más pensando en las ventajas de la
tercera edad, que en heredar un trono.
Para algunas cosas somos
de costumbres fijas y para otras, como ha pasado con la ley del
empleo, de un día para otro se ha cambiado todo, por supuesto, que
desde el punto de vista del currante a mucho peor.
Por eso sería una buena
jubilación para una persona que después de mucho tiempo de estar en
la primera fila de un país, un retiro voluntario, y con su campechanía habitual disfrutando como
el protagonista del video que adjunto,y recordando que “siempre
sale el sol”.
*VIDEO: DE LA RED