jueves, 22 de septiembre de 2011

LA SOMBRA DE NINO BRAVO

Todos tenemos una especie de jardín de los recuerdos por donde paseamos cada vez que nos encontramos solos o melancólicos, o incluso ambas cosas a la vez, volviendo a saborear momentos, que por un motivo u otro, se han fundido con nuestro corazón. Fotos, canciones, libros, todo sirve para anclar esos recuerdos. Por eso cada vez que en los recovecos de la vida encontramos algo nuevo para nosotros, una nueva puerta que da a aquella época, es recibido con la alegría de un niño en su primer regalo de su primera Navidad.
Ahora con internet lo tenemos mucho más facil para indagar en todo tipo de referencias de cualquier época que queramos estudiar, y no digamos de aquellos años donde la flor y la paz eran símbolos de una manera de vivir. Y nuestra televisión y nuestras vidas eran en blanco y negro y con una larga variación de grises, donde la televisión española era la mejor cadena, porque entre otras cosas no había otra.
Hoy estaba poniendo al día la colección de canciones que tengo guardadas cuando he descubierto unos cuantos temas, nuevos para mí, de los chicos de Liverpool, Los Beatles. Aquellos melenudos modernos, sin embargo, tenían maneras de niños buenos, aunque un poco revoltosos, eso sí, no olvidemos que los malos siempre serán Los Rolling Stones. Como ya he dicho, esas canciones nunca antes las había oído, y sin embargo, me han parecido excelentes y a su altura.
Por unos momentos me he sentido con casi cuarenta años menos, y con las ilusiones tan vivas como el primer día.
Hace años me ocurrió lo mismo al encontrar una canción de Nino Bravo, Cartas amarillas, que nunca antes había oído, y que además ahora es de las que más me gustan.
Es más que probable que esa canción y las otras de Los Beatles formaran parte de alguna cara B, pero quién nos asegura a nosotros que el hombre no pertenezca a la cara B de los éxitos de Dios. 
Cuando alguien es un genio lo malo solo es menos bueno, porque nunca nos importaría ser el quinto componente de Los Beatles, o simplemente la sombra de Nino Bravo.

*FOTO: DE LA RED

2 comentarios:

  1. Nino Bravo siempre fue uno de mis favoritos y entonces me sabía la letra de todas sus canciones. No ha vuelto a haber una voz como la suya. Las cartas amarillas...preciosa canción.

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  2. Primero de todo, perdona Marian,porque no me iba bien el blog, y no me han aparecido un montón de contactos, entre ellos el tuyo, hasta el 28.09.11.
    Perdona por el retraso.
    Siempre nos acordaremos de sus vestimentas negras y chaquetas blancas. Al morir tan joven,siempre permanecerá así en nuestro recuerdo.

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