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martes, 1 de septiembre de 2015

¿QUIÉNES SOMOS "TODOS"?


 Como se suele decir, somos un poco “cansinos”.

Ahora, 1 de Septiembre, toca hablar del fin del verano y de la vuelta al cole. Todos, la mayoría, confunden la vuelta al trabajo con el fin del verano, y para redondearlo nos adjuntan unas imágenes de playas que ya se están quedando vacías, y como banda sonora “El final del verano” del Dúo Dinámico, y que a la  mayoría nos recuerdan también al final de “Verano azul” y, por supuesto, a aquel Chanquete, que cada vez que reponen la serie revive para volver a morir.

Ni Chanquete vivió nunca, ni acaba el verano ahora. Todo son tópicos, en una estación del año que, ésta, pasará a la historia de los tópicos también como UNA TRAGEDIA HUMANITARIA con una gran afluencia de refugiados que intentan cruzar las fronteras europeas, cayendo al mismo tiempo en las garras de la mafia. 

Y mientras, en Europa, repartiéndonos cifras, porque desgraciadamente eso es lo que son los que cruzan nuestras fronteras europeas, meros números; como alubias sobre un tapete en una partida de mus. En realidad, la ayuda debería de venir desde el convencimiento, y no desde "el qué dirán, y vamos a quedar bien porque nos están observando".

Llámenme malo pero es la única vez que veo a la Merkel dispuesta a repartir algo. De acuerdo que hay que ayudar a los refugiados, aunque sea solo, y esto es para los más reacios, como nos ayudaron a nosotros, o a nuestros padres o abuelos, durante la guerra civil. Pero en este caso, como en todos, cada uno cuenta la feria como le va, y solo cuando los refugiados se adentran en la, digamos, Europa profunda, o se acercan a las Islas Británicas, “todos” empiezan a ponerse nervios. Con lo cual, y no hay que ser muy listos, hay muchos “todos”, y algunos parece que son más importantes que otros. Lo mismito que en España, cuando hablamos de que “Hacienda somos todos”, y luego nos enteremos de que “todos” tienen que regularizar cuentas porque se les ha olvidado unos ahorrillos que tenían por Suiza.

En Europa también existe el “Sur”, y el sur tiene ese problema, llamémosle así por definirlo de alguna manera, desde hace mucho tiempo, y nada se solucionará mientras no se vaya a la raíz, que en algunos casos es la escasez de todo en los países de origen, y en otros pueda ser la intolerancia a todo tipo de pensamiento, desde religioso hasta vivir la sexualidad de manera diferente.

Y mientras, la Merkel intentando mostrar  su cara buena, durante su paseo con el Señor Rajoy, para intentar convencer a todos, aunque alguno ya empieza a mover el telón detrás de ella,  y a dejarse ver por el escenario dando cantos de sirena poniendo en cuestión el Acuerdo de Schengen, que contempla la supresión de los controles en las fronteras interiores (de los países que lo acataron) y por el que se trasladaron esos controles a las fronteras exteriores. Y a este vecino del mundo esa amenaza le recuerda a cuando su madre le decía que si no se portaba bien, le dejaba sin paga. Y realmente, le dejó sin ella…


En un tiempo de tópicos, la tragedia de los refugiados no lo es, aunque se repita como el “Verano azul de Chanquete” muchísimas veces, porque, como siempre, en los casos realmente importantes nunca estamos a la altura, porque seguiremos mirándonos al ombligo, al nuestro, naturalmente.

*FOTO: DE LA RED

domingo, 30 de agosto de 2015

LA JUERGA NACIONAL



¡Que no! ¡Que he dicho que no! Que no me voy a vivir a Estados Unidos, que siempre me ha gustado, pero que no me quiero perder “La Juerga Nacional”, porque vivir en España es un continuo sorprender o ser sorprendido.

Hace unos días volviendo de la playa, tenía que leer tres veces el letrero (de la foto) puesto en el cristal de la puerta exterior de un portal, y mirar alrededor para comprobar que no había ninguna cámara oculta, y que era la vida diaria y no nada preparado para gastar una broma televisiva.

La simple información de “Si alguien ha perdido algunas llaves, las tengo yo. Piso 3, p.3.  El presidente” se convierte en algo tan sorprendente que ganas te dan de haber encontrado esas llaves para poder conocer a ese presidente, cuando menos, tan duro de escritura. Por cierto, por lo que este vecino del mundo ha indagado, el citado presidente debe de ser el de la comunidad, por una vez se salva, al parecer, la autoridad política.

La nota en sí es un auténtico editorial sobre la educación y la falta de ella en España. Lo más sorprendente, ya que este vecino ha hecho un seguimiento de la nota, es que lleva cinco días puesta en la puerta, sin que ninguno de los vecinos haya estimado necesario, o se haya atrevido, a quitarla, al ser el Presidente el que se supone que firma.

Que no me voy de este país, y menos teniendo en cuenta que podemos encontrar en cualquier rincón a personajes, por ejemplo, de los interpretados por Chus Lampreave, aunque la figura de la portera enterada de todo, ya esté en declive.

A más de un guionista de los “estates” se le debería de recomendar dar una vuelta por esta “Juerga Nacional”, y sus argumentos sin duda virarían más hacia los temas de la juventud de un Almodovar, Don Pedro, en estado de gracia.

Un país en el que la mayoría de los famosos acaban escribiendo un libro, o diseñando joyas o ropas no se puede abandonar así por así. Este vecino ya está ahorrando, para cuando Álvaro Muñoz Escassi escriba un libro sobre diversas maneras de ganar dinero sin hincarla, o precisamente, como ya me entenderéis, hincando, que vaya usted a saber.

¿En qué país si no es en España, alguien, un súbdito de la Merkel precisamente, se entera en directo por teléfono, y gracias a que unos periodistas, sin ánimo de molestar, pero metiéndole el dedo de la noticia en el ojo, de que su segunda hija, en realidad no es de él, y que durante veinte años presuntamente ha sido engañado por su mujer, y por un “amigo” de la familia?

Cualquier día el autor de esa nota dejada en el portal de su comunidad, se hace famoso y le vemos en algún reallity, e incluso en algún programa casi-cultural. ¡Al tiempo!


Seamos serios, siempre se ha dicho que Estados Unidos es el país de las oportunidades, pero desde hace un tiempo, si le echas mucha cara, eso sí, e incluso bragueta, España puede ser el lugar en el que la utopía se hace orgasmo.

viernes, 17 de julio de 2015

DIVERSAS FORMAS TIENE EL DEMONIO...



Si me pidieran definir esta semana que ya se escurre por las esquinas del calendario, quizás pueda pecar de iluso, pero para este vecino del mundo puede ser aquella en la que Alemania se ha quitado el disfraz  de diplomático y ha quedado como lo que es, el jefe de la pandilla que pega a todos en el recreo. Porque es lo que ha hecho con Grecia, y menuda paliza que le ha dado, eso sí, animada por otros países, que lo hacían en inglés, con la excepción del Señor Rajoy que lo hacía en castellano, y además su ignorancia para con las lenguas era disfrazada como “marca España” y larga vida tenga Cervantes.

A simple vista los griegos han quedado humillados, y como se diría antiguamente, con el rabo entre las piernas. Pero no nos engañemos, la Merkel, y su ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble, ese tan beligerante y que todo el tiempo va repitiendo que sería mejor si Grecia saliera TEMPORALMENTE del Euro, tampoco se han ido de rositas, con ese aire de perdonar la vida pero no el dinero. Y ha quedado meridiánamente claro que Europa solo respira cuándo quiere y cómo quiere Alemania.

Personalmente este vecino del mundo va a procurar no cruzarse este verano con grupos de turistas alemanes, por miedo a que se le hinche la vena del cuello, al modo de la Patiño de la Cadena Alegre, y les baile un sirtaki, acabando la actuación con un gran y firme corte de mangas. Y es que, a mí desde pequeñito me enseñaron eso de “vive y deja vivir”, y no el modelo alemán que parece ser “vive y que los demás vivan para ti”.

En días como hoy, que uno siente una curiosa mezcla de hartazgo y un dilatado y silencioso ataque de nervios, sería gozoso que la gente se comunicara con “tweets” porque así los mensajes serían más cortos y de forma más cuidada. Eso, o que fuera un eterno San Valentín. Porque quizás ese día está más ligado a los susurros y a las risas, pero nunca a los gritos. 

Este vecino está un poco harto del llamado “milagro alemán”, que llegados a este punto, da más la impresión de ejercer exorcismos en lugar de milagros. Y ya se sabe que los exorcismos siempre están ligados al demonio, del cual nos han enseñado que puede adquirir diversas formas…y a mí personalmente, a este vecino del mundo, se le están ocurriendo unas cuantas, y ninguna buena, especialmente desde que ha visto por internet a una Ángela Merkel dura y fría con una niña palestina que le pide ayuda para su familia que se encuentra de manera irregular en el país. Queda más que evidente, ante esa escena, que en el diccionario de la Señora Merkel no existe la palabra "empatía", aunque ella lo disfrace de "hacer lo que se tiene que hacer".

*FOTO: DE LA RED


domingo, 24 de mayo de 2015

COMENTARIOS A EUROVISIÓN 2015, O EL TIMO DE CADA AÑO


Como hice el año pasado (http://patxipe.blogspot.com.es/2014/05/mi-festival-de-eurovision-2014.html) y que, al parecer, tanto gustó, hoy solo voy a pasar a limpio, los comentarios que he ido anotando a vuela pluma, mientras he visto las actuaciones,  y ese primer impacto, que a la postre es lo que realmente cuenta.

Los comentarios y últimas valoraciones llegarán horas después, pero desde ahora digo que yo echo de menos desde hace varios años un único escenario que se te quede en el recuerdo. Ahora siempre es igual, un espacio en negro que se convierte en cualquier cosa. Tendrá sus cosas buenas, y un gran despliegue técnico, como es de comprender, pero en este caso me quedo con lo tradicional, aunque pueda ser más aburrido. También echo de menos la música en directo. Ahora el festival es como un gran musical con música enlatada, que le resta valor. Y es una pena.

Comienza el festival.

En primer lugar, Eslovenia, “Aquí por tí”. Mientras un  chico toca un piano en un segundo plano, Maraaya  canta  con los auriculares puestos, dice que es para sentirse como durante la grabación del disco, y para concentrarse. Personalmente, me parece una falta de respeto, pero seguro que soy incomprendido.  
La atención se posa todo el rato en la bailarina que vestida de un negro brillante y con brillantes, simula tocar el violín. Llega a ser molesta la imagen del pelo de la cantante más que mecido, huracanado por el viento. Entre el viento y el violín de la bailarina que no aparece, termina la canción sin pena ni gloria.

Segundo, canta Francia: su título en castellano “No olvidéis”.
La cantante vestida de negro delante de un paisaje con toques tenebrosos, pero de gran belleza. Salvo por el vuelo de una paloma, pudiera casar con el musical “Los miserables” por los colores y un paisaje desolado; una gran voz.
Si antes nombro a “Los miserables” al poco aparecen cuatro tambores en vivo, con otras decenas de ellos, en una grabación, desfilando al más puro estílo  revolucionario, al más puro estilo del musical.  Si no olvidamos la canción es porque nos lo pide el título y la pericia de la cantante.

Tercero: Israel, presenta “Chico de oro”. Tras un comienzo clásico, unos efectos especiales hacen aparecer al resto del grupo  y la canción se convierte en una especie de rap con toques étnicos, y con mucha marcha. Puede dar que hablar.

Cuarto: Estonia,Adiós a ayer”, presenta un dúo que se juntó gracias a las redes sociales. La puesta en escena, sobria, con dos puertas que se abren, a los espectadores veteranos nos puede recordar a  “Historias para no dormir”. Más que por la canción, se mantiene el interés por la pareja protagonista, y sus miradas. Se respira una tensión sexual que no se resolverá con el resultado del concurso, porque está claro, salvo sorpresón, que no ganarán.

Quinto: Reino Unido, “Todavía enamorado de ti” es un electro-swing. Canción y puesta en escena divertida de un dúo, hombre y mujer. Suena a Cole Porter, lo cual no es poco. En cualquier momento se puede cometer un asesinato y aparece Hércules Poirot. Las bandas eléctricas que lucen tanto cantes como bailarines desvían demasiado la atención. Me ha gustado, pero sería una sorpresa que ganara.

Sexto: Armenia, Varias voces, dos hombres y tres mujeres, todos vestidos de negro. Canción clásica que recuerda, a pesar de haber gente de ambos sexos, a cualquier canción de Il Divo. No pasará nada con ella.

Séptimo: Lituania, Canción “Esta vez”, otro duo, mixto. Por las sonrisas que lucen puede ser un anuncio de Coca-Cola o de “Profident”. El fondo colorido simula una especie de abanico. Parece que en cualquier momento vamos a entrar en “Oz” o en “Los mundos de Yupi”.  Salvo por los besos que se dan los cantantes y el coro, me sigo preguntando por qué parecen tan contentos, si “esta vez” no van a ganar.

Octavo: Serbia. Al ver a la cantante, potente en todos los sentidos, he creído que estábamos ante una representación de Ópera, concretamente “El anillo de los Nibelungos”.

Noveno: Noruega. “Un monstruo como yo”. Por el vestuario del cantante pareciera que ha tenido que salir al escenario en el último momento. A eso ayuda su “look” de barba de varios días.
Ahora sale una joven pelirroja, el, al parecer,  solista se convierte en dúo, y la interpretación y la canción ganan. Un bonito y delicado dúo, aunque no es precisamente la alegría de la huerta. La parte más bonita suena como ya oído y a Celine Dion.

Décimo: Suecia. “Héroes”. Está claro que es una de las grandes favoritas, pegadiza, a mí me suena a “Sting”. Es una actuación que en próximos años podrían copiar otros países, con mezcla de dibujos animados. Para mí personalmente le falta algo, aunque como ya he dicho, puede ganar.

Decimoprimero: Chipre. “Una cosa debía haber hecho”, canción mayormente representada en blanco y negro. Me recuerda a algún video de Elvis Costello, e incluso el cantante ayuda a ello. Me he quedado esperando a que apareciera la protagonista de “Notting Hill”, pero no ha aparecido. Nada pasará.

Decimosegundo: Australia, país invitado. “Esta noche otra vez”. Una gran voz de góspel. Puesta en escena divertida. Por la etnia de los que actúan, brindo una idea, anuncio de Bennetton. En total, distendido pero intrascendente. Una gran voz desperdiciada por una canción que mucho me temo pasará inadvertida.

Decimotercero: Bélgica.  Una canción nada fácil, pero resultona, con una elegante puesta en escena en blanco y negro.

Decimocuarto: Austria, país anfitrión. “Soy tuyo”. Canta un grupo con look a lo Woodstock. Sabiendo que la canción no es muy allá, aparecen llamas del piano, intentando no pasar desapercibidos. Me temo que Austria se ha dormido en los laureles.

Decimoquinto: Grecia.     “Un último aliento” El comienzo me suena más a un fado, pero Portugal ha quedado eliminada ya, y Melina Mercuri también ya es historia, historia griega pero historia.
Una gran voz femenina que pese a una melodía ascendente se pierde sin pena ni gloria.

Decimosexto: Montenegro. “Adio” Una chica, ahora sí con violín, recibe al cantante entre azules y oscuros en el escenario. Una de las pocas canciones cantadas en el idioma del país.
Me recuerda mucho a una canción, "Tajabon", el intérprete es Ismael Lo, que forma parte de la película de Almodobar en “Todo sobre mi madre”. No será plagio, porque no copiará las notas necesarias para demanda…

Decimoséptimo: Alemania, ”Humo negro” Entre siluetas de la cantante y focos apuntándonos tengo la impresión de que en cualquier momento va a salir Roger Rabbit, pero no sale y me decepciono. Una buena voz para otra canción más que pasará desapercibida.

Decimoctavo: Polonia, ·”En el nombre del amor”. Piano blanco y colores rosas y violetas en escena. El romanticismo es otra cosa.
A mí no me gusta la canción, pero me considero romántico.

Decimonoveno: Letonia. Canción nada fácil con toques claramente étnicos. La cantante es también la compositora. Puesta en escena muy elegante en colores rojos y negro. Cantante con una gran voz que da sensación al mismo tiempo de fragilidad y fuerza. Está claro que es una de mis favoritas.

Vigésimo: Rumania, Canta un grupo masculino. Junto a ellos varias maletas. Espero que no estén de mudanzas, significaría que están de paso, y al oír la canción, la primera idea se me confirma. No espero nada de ella, ni de ellos.

Vigesimoprimero: Por fin, Edurne en el escenario. Intentaré ser imparcial.
Una gran canción,"Amanecer", una excelente voz, la única en bailar en el escenario, poco pero peligroso. Valiente puesta en escena. Magnífica actuación, y un gran final con una silueta muy sugerente. Esperemos que a los demás países les “sugiera votarnos”.
Se ha hecho todo lo posible, ya no depende de nosotros.

Vigesimosegundo: Hungría. Todavía en shock por la actuación de Edurne para cuando vuelvo de “urgencias” la representación húngara ha debido de pasar sin pena ni gloria.

Vigesimotercero: Georgia, “Guerrera”. Por un momento parece Angelina Jolie haciendo de madrastra para Disney. Canción con toques étnicos y muchos tambores. Años atrás hubiera ganado, pero ya está muy visto, digo yo.

Vigesimocuarto: Azerbaiyán, “La hora del lobo”. Lo mejor, la actuación de la pareja de bailarines emulando a sendos lobos. Balada resultona que pudiera estar en los primeros lugares. Muy cuidada ambientación a lo “Luna de Calenda”, gama de grises y mucha oscuridad. Nos hemos quedado con el cantante y su canción. Eso es muy importante.

Vigesimoquinto: Rusia, “Un millón de voces”. Por un momento he pensado que era Marilyn cantándole al presidente, pero de aquello hace muchos años. Ahora es en color. Una voz extraordinaria, pero la canción aunque con una gran producción a mí personalmente no me pone la carne de gallina, y eso siempre es importante.

Vigesimosexto: Albania, ”Ahora sí” Me temo que el título no es un vaticinio. Una canción más, en mi opinión, tristemente sin pena ni gloria. Eso sí, una gran voz, como lo han sido en la mayoría de las actuaciones.

Vigesimoséptimo y último: “Grande Amore”. Un trio internacional, Il Volo, lírico y ya muy famoso. Me los habían vendido como Il Divo, pero aunque son buenos, no son excelentes como ellos. Gran puesta en escena. Se convierten por lo buena de la canción, y esa aureola de “importantes” que tienen las voces líricas, en uno de los máximos favoritos.

Mientras esperamos a las votaciones una gran actuación al estilo de “echar la  casa por la ventana” con una gran orquesta y coro dando espectáculo con algo, que se supone, debería de ser serio y aburrido. Un gran acierto. Varios estilos de música con una gran percusión. Si este espectáculo se pusiera en gira me apunto a verlos, pero parece ser que son más de un grupo juntos, y será “solo una vez en la vida”.

El lema de este año del festival, que cumple sesenta años y se celebra en Viena es “Tendiendo puentes”, pero como siempre nos han escamoteado la actuación, yo al menos no la he visto, del ganador de Eurovisión para niños de este año. Me he acordado de los andaluces y de las uvas de este año, solo que ésto ha sido con premeditación y nocturnidad.

Imágenes de ganadores de otros años, los dos títulos de España están ya en la prehistoria, y la vuelta al pasado del grupo de imágenes, no llega a tanto.

Comienzan las votaciones. ¡Suerte para Edurne!
No voy a comentar cada una de las votaciones, pero Montenegro ya nos ha dado dos puntos, que me temo puede ser una especie, en el mejor de los casos, de predicción.

Portugal nos ha dado tres puntos. De los pocos vecinos que nos dan puntos, porque el compadreo como otros años es más que evidente entre los países de la Europa del Este especialmente.
Moldavia nos dan un punto. Espero que Edurne  no esté sola porque es para cortarse las venas. Ya está claro que no hay nada que hacer, otro año más.

Otro punto de Azerbaiyán.

En la octava votación, Serbia, ya la “cosa” está entre pocos países: Rusia, Italia y Suecia, los demás descolgados. Y a mí me da mucha pena Edurne, que aunque tiene a unos cuantos por debajo, solo lleva cinco puntos. Espero que no le afecte mucho, porque se ve venir un gran desastre.

Gracias, Francia, os dejaremos venir a veranear este año, cinco puntos lo merecen.

Seguimos con la modalidad de estos años, yo te doy el perejil, entre vecinos, a ti, y tú me das sal a mí.

Llega Alemania. Solo utilizan a España para venir a veranear y comprar todo, barato para ellos. No olemos un solo punto, solo se acuerda de nosotros la Merkel, y eso nunca es bueno.

Israel nos ha dado un punto y Rusia también, gracias.

Italia tampoco se acuerda de nosotros, ¡Hay que joderse!

Con todo esto, no voy a ir a la cama ahora, porque no voy a poder dormir. Lo mejor es dar un paseo…hasta Australia concretamente, aunque me traiga recuerdos de este festival.

Hoy como os habréis dado cuenta, ésto no lo ha escrito “el vecino del mundo”, porque me lo tomo como algo personal.

Suecia, el ganador, al final 365 puntos, y España 15. ¿Era tanta la diferencia? En mi opinión, no.

Por cierto, además de sufridores, somos los más tontos de Europa, porque continuamos sufriendo el timo del tocomocho: Votar en España cuesta 1,45 € y, por ejemplo, en Alemania solo 0,20 €

Si me repongo, mañana haremos una especie de resumen de sentimientos y recuerdos de antaño relacionados con el Festival de Eurovisión (http://patxipe.blogspot.com.es/2015/05/reflexiones-eurovision-2015-o-esa.html)

*FOTO: DE LA RED



sábado, 18 de abril de 2015

ESPAÑA COMO UN BALCÓN INTERIOR



Si tuviéramos que hacer un símil de España, una comparación, no me cabe ninguna duda: España es un patio interior, o incluso, una corrala.
Este vecino del mundo no vive en Andalucía, sino en el País Vasco. Galopa por razones personales entre Guipúzcoa y Vizcaya, y ya se sabe que tenemos fama de ser más discretos, más secos en el Norte que en el Sur. Pero, incluso así, España es un patio interior.

Aún antes de tener televisión con muchas cadenas, nosotros ya teníamos multi-programas. Más de una vez nos hemos sentado en nuestro balcón interior  (suena a algo filosófico, incluso transcendental, pero es literal), y nos hemos pasado horas muertas muy vivos.

Pasan los años y los espectáculos interiores, como el patio, van cambiando.

Actualmente tenemos en cartel, entre las dos alturas que alcanzamos a ver, a la del segundo izquierda que convive con su cuñada, y todos los días tenemos una especie de sitcom, comedia de situación, mezcla de ricas y famosas y criadas y señoras.  Reivindicaciones y reproches están a la orden del día. Alguna vez aparece como estrella invitada el señor de la casa, a la par marido y hermano, intentando hacer de una especie de negociador entre ambas. Es cuando la comedia ácida adquiere tintes de thriller porque sabes que en cualquier momento va a pasar algo, y nunca adivinas qué.

En el segundo derecha tenemos aires juveniles. Es un piso de estudiantes, y además el único balcón que tiene programación nocturna, con concursos de bailes y realities de supervivencia a los excesos. Está muy entretenido aunque los decibelios, especialmente en horario nocturno, suelen exceder el buen gusto.

Por el contrario, en el tercero izquierda tenemos una especie de cine de barrio con tres generaciones de una misma familia. Los abuelos y padres nacidos en el Sur. Entre su corta pero nada homogénea programación, tenemos a Lola Flores, Manolo Caracol por un lado, y un Arturo Pareja Obregón, actuando como bisagra de un cancionero, que bascula entre el Sur de las primeras generaciones, y un Benito Lertxundi y Ken Zazpi a cargo de la generación ya nacida en Euskadi. El espíritu de esa vivienda se puede resumir en ese abanico con flecos blancos y azules cosido a la pared, y esa pancarta descolorida pidiendo la independencia que hace ya años que lleva puesta.

Y ya para terminar, tenemos el tercero derecha, que puede ser todo un símbolo de nuestros días. Aunque recordemos que es un patio interior, luce desde  hace más de dos años un gran cartel de “Me venden” con el consiguiente número de teléfono. La familia lleva el mismo tiempo que el cartel, malviviendo en Alemania a la que se trasladaron, primero con ganas de decir cuatro cosas a la Merkel, y a la que finalmente solo dijeron “Socorro”, eso sí, mediante un traductor al que, por supuesto, tuvieron que pagar.


Muchas veces, esos balcones interiores dicen más que el mejor de los editoriales en cualquier medio de comunicación.


*FOTO: DE LA RED

lunes, 16 de septiembre de 2013

ALMA DE DRONE

Hoy se hace eco la prensa de lo “selecto” que se ha vuelto el empresariado, pidiendo el oro y el moro como requisitos para sus futuribles (mezcla de futuro y factible) empleados. Propuestas como la de ingenieros dispuestos a establecerse en Egipto por seis mil euros anuales brutos es lo que le espera a aquel que siguiendo el pensamiento general estudió una carrera para ser un hombre, o mujer, de provecho.
Sin embargo, lo que ha llegado al corazón de este vecino del mundo es lo que pudo comprobar ayer en su cuenta de facebook.
Entre las personas que tiene agregadas, está la escritora Lucía Etxebarria, quien ayer pedía a sus seguidores que leyeran su artículo en un periódico, daba el nombre y el link, en el que ella colabora, y que aportaran un comentario, “pues mi trabajo depende de que el señor director sepa que, efectivamente, me leen”.
Si la Señora Etxebarria necesita demostrar que la gente le lee, indefectiblemente éste es un país de locos, en el que a este vecino del mundo le gustaría convertirse en un “drone” (pequeño avión teledirigido), el mismo que ayer se posó delante de los mismos morros de la Merkel mientras estaba en un mitin. Me imagino que sería para fotografiarle las barbas, digo yo, porque sino no es comprensible acercarse tanto.Y es que parece increíble el morro que le echan muchos a la vida, y solo viéndolo en directo, con la cámara del “drone”, es creíble.
Éste que escribe desde su atalaya, se acaba de dar cuenta que tiene alma de drone, ya que es cotilla por naturaleza, y quizás eso es lo único que, por ahora al menos, no paga impuestos en este país: el mirar. Lo que no se han dado cuenta las autoridades pertinentes, es que el que mira, normalmente ve, e incluso aprende, y al final a este vecino, y a todos los vecinos de este país, les ocurre como a los toros, que solo se nos puede torear una sola vez, porque luego aprendemos. ¡Y vaya que si lo hacemos! 

*FOTO: DE LA RED

martes, 3 de septiembre de 2013

COLECCIÓN DE IDEAS

Lo mismo que las personas atraviesan por diversas etapas, el año lectivo, por decirlo de alguna manera, también tiene sus diferentes épocas, y ahora ya están anunciando la vuelta al cole para los menudos de la casa, que para los que están todavía en edad de procrear, se lo piensen bien, pues te cuesta, como diría Shakespeare, “one egg”, y Cervantes añadiría “y la yema del otro”.
Nosotros, sin embargo, tampoco nos libramos de los anuncios, y nos dedican los famosos fascículos. No nos escapamos nunca de ser, como se dice ahora, “target, u objetivo, de todo tipo de campaña publicitaria, quizás porque se supone que tenemos dinero, y nos quieren aligerar de esa pesada carga mediante sus sugerentes ofertas.
Hace muchos años comenzaron con la Enciclopedia Salvat, y más tarde con los libros de Félix Rodríguez de la Fuente. Eso, era comprensible, pero desde hace años ya, parece que le han cogido el gusto, y presentan de todo, hasta colecciones de abanicos, e instrumentos musicales, ambos en miniatura naturalmente.
Como hay que modernizarse con los tiempos que corren, cualquier día
de estos comercializaran una colección de parados, en miniatura también, naturalmente, con todo tipo de profesionales, algunos incluso en el acto de rellenar los papeles para intentar irse a Alemania, que dicho sea de paso, debe de estar super-poblada ya, más que nada para fastidiar a la Merkel.
Quien diga que no ha comprado nunca nada por fasciculos coleccionables, como siempre dice la publicidad, miente como un bellaco, porque qué es normalmente la compra de un piso, sino la adquisición encubierta de una casa por fascículos, solo que te dan la colección entera al principio, y lo que coleccionas son las letras a pagar.
Se echa de menos una colección de famosos de televisión, incluso alguno de ellos merecería en sí una colección aparte, como por ejemplo Belén Esteban, o el mismísimo Jorge Javier Vázquez, ambos con elementos intercambiables de quita y pon, y la primera con brazos, manos y dedos articulados, para poder hacer todo tipo de cortes de manga, y peinetas incluidas. Más de uno compraría alguno de los muñecos para hacer vudú, y quizás eso motive a que las mismas empresas se resisten a lanzar al mercado este tipo de colecciones, y prefieran promocionar sus libros, porque ahora, si quieres ser un famoso con pedigrí, tienes que haber escrito un libro como mínimo, aunque nunca hayas leído uno, lo cual en sí ya tiene su gracia.

*FOTO: DE LA RED