Prometo
que este vecino del mundo ha desayunado lo mismo de siempre, sin
embargo parece que me he despertado un poco filósofo esta mañana,
y diré cosas como que la vida no es una ciencia, y menos exacta.
Que dos personas, criadas de la misma manera te pueden salir
completamente diferentes, y que tampoco podemos coger el rol de
pequeños dioses e intentar que nuestros descendientes miren por
nuestros ojos.
Todo
lo anterior viene porque ayer me encontré con la madre de una
amiga y me dijo que Eli, mi amiga, y su marido, mi amigo también,
para evitar malentendidos, estaban intentando escribir la carta a
la cigüeña, aunque ella ya le había avisado a su hija de todos los
inconvenientes que iba a tener, y más en esta época de
crisis en que una boca más se va a notar mucho, y
especialmente en su educación. Eso sí, luego me dijo
también, que una vez informada su hija de todo lo que ella opinaba,
y como no le iba a hacer cambiar de idea, desde ese mismo momento
le iba a ayudar en todo.
Evidentemente
ella esperaba mi aprobación, pero como la vena de mi cuello
tiene vida propia, y no obedece a instintos netamente racionales,
en ese momento se hinchó y me vi abocado a decirle, que ella ya
había tenido hijos y sin embargo le aconsejaba a su hija a que no lo
hiciera.
Le
pregunté luego, si ella cuando era joven hubiera obedecido a su
madre en momentos así, y me dijo claramente que no.
Por
mi parte le dije que nosotros básicamente somos animales,
tristemente pero es así, y estamos aquí para perpetuar la especie,
y que los de la prehistoria estaban peor que nosotros, y que si ellos
no se hubieran decidido, nosotros no estaríamos aquí, fuera eso
bueno o malo, porque visto todo lo que está pasando, y lo mal que
nos comportamos muchas veces... Aparte de que como he comentado
anteriormente, la vida no es una ciencia exacta, y ahora en plena
crisis, se comienza a dar, al menos se dice que hay claros síntomas
de ello, otro “baby boom”. Algunas de las mujeres implicadas, ya
están diciendo que ahora que están en el paro, y sin apariencia de
conseguir algo a corto plazo, es el momento de ello.
Resumiendo, la
próxima vez que nos veamos, la madre de Eli y este vecino del mundo,
si es que ella hace por verme, seguro que no me invita a comer, creo
yo. Pero, si algo aprendí hace mucho tiempo, es que no debo de dejar
nunca nada en el tintero, y eso se aplica también a la boca.
*DIBUJO: DE LA RED