El
gobierno de juguete que tenemos, con sabor a Señorita Pepis, está
demostrando otra vez la falta de visión de futuro, y de complicarse
el presente, con respecto a un tema polémico que está otra vez de
actualidad.
Como
consecuencia de que la Policía Nacional recibiera montones de quejas
de ciudadanos y colectivos denunciando que los antidisturbios
llevaban su número de identificación o muy pequeño o escondido, la
misma institución ha anunciado este fin de semana que a partir de
ahora los agentes lucirán un número de identificación en la
espalda de 30 centímetros de largo por 10 de ancho y que irá pegado
con velcro. Poco después, este mismo lunes, las mismas fuentes
policiales añadían que ese número cambiará a diario y no será el de la placa, aunque servirá para identificar a
los
agentes.
A
este vecino del mundo, y tras tomar una buena bocanada de aire fresco
matutino desde su atalaya, con el fin de aclarar ideas, la medida le
parece no sólo insuficiente, sino que ella misma representa una
complicación para los que tengan que llevarla a cabo, con minutos de
desorientación antes de salir a patear las calles, buscando su
correspondiente letrerito todos los días, lo que se materializa en
un buen número de personas que tendrán que estar encargados del
nuevo método, y varios minutos diarios por parte de cada uno de los
policías para consultar su número correspondiente, y ponerlo al
día.
Como
indicaba al comienzo de este articulo, este vecino piensa que sería
necesario una visión de futuro, y ya metidos en gastos, colocar a
cada uno de los policías uno de esos letreros luminosos que ya
existen para camisetas. De esta manera, y aunque haría falta un
cierto desembolso inicial, luego el mismo sistema atraería dinero,
no solo para pagar los gastos propios, sino para poder hacer frente a
otros gastos del gobierno.
La
nueva idea que este vecino propone es que ya que el número va a
cambiar, se puede aprovechar el nuevo sistema para que cada cierto
tiempo aparezca publicidad, acompañada de información sobre la
hora, los grados y principales noticias. Así mientras los polis,
cumplen con parte de su cometido, en controles de todo tipo, o se
enfrentan a ti en las manifestaciones obsequiándote con todo tipo de
caricias varias, te sientas debidamente informado.
Además
en caso de disturbios y accidentes, cuando salgan imágenes de ellos
en la televisión, puedan mandar información a su casa de que
llegarán tarde, para que sus familiares estén más tranquilos, y
con mensajes del tipo de: -Cariño, vete preparándome la cena,
que en media hora estoy en casa.
O
frases tan románticas como: Cariño, vete abriendo la cama, que
te voy a dar tu merecido y el de tu prima.
Así
mientras se personaliza el trato, y actualiza la información, sin
duda entrará a las arcas del maltrecho estado un buen dinero, que en
estos días es más que necesario.
*FOTO: DE LA RED