jueves, 14 de marzo de 2013

LOS SUEÑOS COMO RECURSO

Hay un país donde nacen y viven los sueños. Desde pequeños les enseñan a ser muy rápidos y esquivos para que nadie los atrape, porque un sueño sabe que si es capturado, muere.
Viven junto a la frontera de la realidad, y hacen que ésta se mueva buscándolos.
Atrapar un sueño es el final de un viaje de búsqueda, y el comienzo de una interrogación.
No tienen cuerpo, y la realidad sí. Un sueño es belleza, y la realidad un cuerpo rudo y cruel. Son dos caras de una moneda. Están juntos pero no se pueden ver.
Los sueños nacieron para poder resistir la verdad, para alumbrar la oscuridad.
Hace muchísimos años, alguien intentó tender un puente entre los sueños y la realidad, y se creó el arte, que sigue siendo, como los sueños, una continua búsqueda disfrazada de piel.
Los sueños van cambiando a medida que cumplen años, porque los sueños cumplen años. Jóvenes, son grandes y salvajes, pero la realidad empequeñece, y corta sus alas.
Juegan a disfrazarse, y lo pueden hacer en forma de musa, dejando tras ella una estela de trabajo, y algunas veces éxito, y otras incomprensión.
Soñar es vivir, pero los sueños siempre van por delante a modo de guía, o zanahoria.
Los sueños son el norte en el mapa de nuestra luz. Nos enseñan lo que buscamos, pero cuando llegas, o crees que has llegado, nunca están.
Un sueño atrapado, desaparece, y se reencarna en otro.
Son como dulces de nube con sabor. Hay sueños de amor azucarado, y otros tienen un regusto amargo. Hay sueños robustos que resisten tormentas de sentimientos encontrados, y sueños enclenques, que deben ser manejados con cuidado.
Es conveniente soñar para vivir, pero no hay que vivir de los sueños.
Lo dicho, hay un país donde nacen y viven los sueños, pero la realidad borró su camino, para no dar con ellos.

*DIBUJO: DE LA RED

2 comentarios:

  1. que significa soñar con el nombre de un papa Juan xxiii

    ResponderEliminar
  2. Quizás deberías de indagar en su vida, y lo que significó en su tiempo, y compararlo con tu vida, con tus inquietudes, con tus expectativas. Quizás, entonces, encuentres alguna equivalencia.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar