martes, 12 de noviembre de 2019

RESACA DE SUEÑOS INCUMPLIDOS



Este vecino del mundo, tiene el ordenador encendido prácticamente las veinticuatro horas del día, con el “procesador de textos” (para no decir marcas) preparado para cazar ideas al vuelo. Uno nunca sabe dónde se esconden las musas, pero como alguien dijo, siempre te tienen que pillar trabajando.

Hoy, mañana para mis lectores, es ese famoso “día después” que la mayoría de las veces siempre tiene un sabor a resaca de sueños incumplidos. Y la resaca de hoy de “Ciudadanos” se ha llevado por delante al mismísimo Albert Rivera. Era de prever, porque el descalabro ha sido colosal. Es como ir a por patatas y volver a casa habiendo perdido hasta las escrituras del piso, porque en un momento dado se te cruzó el Casino, y no sabes decir que no…

Sólo que al Rivera le ha pasado al revés, porque se convirtió en el rey del “no”, y al final ese matrimonio con Pedro Sánchez que los mentideros de los empresarios acariciaban, tuvo menos futuro que Chiquito de la calzada, Don Gregorio, del que se cumplen dos años de su fallecimiento, como galán de telecomedia.

Viendo el mapa de la zona donde vivo, en Donosti, ha ganado el PSOE, según me dijeron los interventores ayer, concretamente en la mesa en la que estuve, normalmente ganan ellos. Seguidos por el PNV, UNIDAS PODEMOS y BILDU. Está claro que en nuestras mesas no triunfa el Ferrero Rocher, al que tampoco diría que no, sino algo con más sabor a pueblo, como un pintxo de chaca, que en algunos recetarios por internet, lo describen como “Pintxo Donosti”, y como se suele decir, algo tendrá el agua cuando la bendicen…

Por cierto, y ya para terminar, oigo en la radio a sesudos analistas políticos que achacan el tremendo ascenso de Vox, a la avaricia de los jubilados que no quieren perder lo que tienen.

Generalizar es siempre malo, y está más cerca de hablar por hablar que de blindarse de razones. Extremistas hay en todas partes, e incluso los ricos, o más que acomodados, y sus familiares, también se jubilan.
Dudo, por ejemplo, que esos jubilados que probaron las porras de los grises en los setenta, no solo en el País Vasco, sino en muchas zonas obreras, hayan cambiado sus miradas, políticas o no. Porque esos abuelos que están ayudando con sus “dineros” a los hijos y nietos, que están sufriendo, en el mejor de los casos, salarios mileuristas, o posiciones como hoy tengo contrato, mañana vaya usted a saber, crean que los de los tirantes rojo y gualda, les van a sacar las castañas del fuego, a lo mejor sí, pero para quitárselas y no pagarles nada por ellas.

Muchos de nuestros jubilados, recuerdan al menos por referencia, la famosa “época del hambre”, y saben que si no se buscan la vida ellos, al famoso perro atado con longaniza se lo va a llevar otro, siempre otro.

*FOTO: DE LA RED

lunes, 11 de noviembre de 2019

LA NOCHE DEL DINOSAURIO...



Antes de nada, y para evitar a los más despistados pérdidas de su tiempo, diré que en este post no se intenta hacer un estudio, y mucho menos a fondo, de lo ocurrido ayer en las elecciones 10N, sino abrir las tripas de este vecino del mundo, una especie de maestro de ceremonias que rige esta página.

Ayer pude comprobar que es verdad eso de que en el ojo del huracán no te enteras de nada porque reina la calma chicha.

Los que me seguís ya sabéis que  ayer, 10 de Noviembre, día de las elecciones, otra más, me tocaba estar en una mesa electoral, en Donosti concretamente, y hasta las diez y media de la noche no salimos del aula en el que estaba nuestra mesa en cuestión.

No diré que durante el recuento de papeletas no nos llegaban noticias, porque ahora en la época de los móviles, decir eso sería mentir vilmente. Además los interventores a la sazón, me apetecía usar ese término, eran unos enrollados, y algo íbamos sabiendo. Pero nada más salir,  y ya en el parque más cercano, puse la radio de mi teléfono móvil, y tuve la sensación de haber sido víctima de un secuestro, y que por primera vez me quitaba la venda que había rodeado mis ojos. 

Y no sé por qué, pero la primera frase que vino a mi mente, fue la del microrrelato de 1959, del escritor guatemalteco, Augusto Monterroso, y que debe de ser el relato más corto en español:

Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí -  y yo añadí instintivamente, y por eso quizás este vecino del mundo nunca pueda escribir microrrelatos-, y esta vez no mucho más cerca, sino con nosotros.

Iba a decir que lo de Vox, los cincuenta y dos escaños, es inexplicable, pero tristemente en los últimos días se olía en el ambiente. No sé si será el mismo caso que lo ocurrido con la llegada de Trump en Estados Unidos, pero quizás en España, y a mí no me lo quita nadie de la cabeza, una razón más por lo que la telebasura triunfa en nuestra televisión, y con el “Sálvame de todos los colores y sabores” como buque insignia de la parrilla televisiva. No es que nos guste la mierda, sino que además disfrutamos con revolverla.

Los jóvenes que votan a Vox, en las imágenes de celebración se veían a muchos, y que no son de familias ricas y poderosas, les aclararé que la vida no es un videojuego, y que cuando las cosas nos van mal, y las cosas no podían ir peor, se le puede dar al reset y todo vuelve al punto de partida. 

Aquí el punto de partida ya desapareció hace tiempo, y muchos se encargaron además de que no se pueda volver a encontrar para que nadie pueda evitar lo que cada vez está más cerca: una posible revuelta entre nosotros mismos, y que nos podía llevar a un panorama muy abierto, y en la mayoría de los casos con vistas a algo desolador.,,

Ciudadanos ha recibido lo que se iba vaticinando por su falta, quizás, de perfil decisorio. Le ha gustado, desde el principio bailar “la yenka”, que tenía como punto álgido ese movimiento hacia todos lados para quedarse en el mismo sitio. Y al final la gente ya se ha cansado de su baile. Al parecer, sin embargo, a más de uno le sigue apeteciendo bailar con la derecha, y muchos, se darán cuenta con el tiempo, que se han pasado de frenada y han llegado a algo que ya es “vox pópuli”.

Y lo de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, cada vez lo está comprando menos gente, porque sólo es para los incondicionales de los éxitos de Pimpinela. Hace tiempo que ya no pueden espabilar solos, aunque estén en compañía.

Observad que no he mencionado para nada al PP de Pablo Casado, que no pincha ni corta, pero que se va aprovechando de los errores de los demás, para recuperar su territorio, y esta vez más a la derecha, por si acaso.

Y el hedor está a punto de coger forma. Ya se adivinan sus fauces…

*FOTO: DE LA RED


domingo, 10 de noviembre de 2019

EL REBUFO DE LA HISTORIA...



Para cuando leáis el post, este vecino del mundo ya estará en la mesa electoral como segundo vocal. Primero les advertiré a los que organicen la mesa, que de un ojo, y es verdad, no veo, porque pasó no sé si a mejor vida, pero sí al menos de mí y de los doctores que durante un año han estado intentando salvarlo.

Mirando, aunque a medias como ya he confesado, y en plan positivo, podré comprobar qué es eso de vivir de la política, porque nos pagan, creo recordar, que 65 Euros. Tengo miedo de volverme un orgulloso petulante...

De todas maneras, a mis 63 años, ya es la cuarta vez que me toca. Por lo que si fuera un chollo, o pelotazo, seguro que nunca hubiera olido ni la pedrea…

Si no nos jugáramos tanto mañana, hubiera deseado despertarnos con una gran nevada y que se suspendiera todo, pero seguro que alguno de los otros partidos iría a votar,  y perderíamos lo que se daba.

Tengo una vecina, muy mayor la pobre, que hoy me ha comentado que todo el mundo está hablando por la radio sobre un muro que se debió de caer hace treinta años. Y que por la importancia que le dan, aunque no ha oído ni dónde fue, ni la cifra, seguro que debieron de morir muchos...

No le he sacado de su error, si lo hay, porque en el fondo ha estado sembrada. Murieron muchos por aquel muro de Berlín, aunque ahora también hay unos cuantos, incluso en construcción, y salvo excepciones, “nadie sabe nada”.

Por cierto, llámenme quisquilloso, que seguro que lo soy, pero me gustaría juntar todas las piedras de ese dichoso muro que dice la gente que todavía tiene por ahí, y que les creo. Seguro que el muro mediría más metros que el real. Y es que siempre que se venden “souvenirs”, ocurre lo mismo. Hay listillos que se forran. Y no vamos a mirar con cara de enfado a los alemanes, que de eso en España también sabemos mucho.

Voy a ir preparando mi rutina de dentro de unas horas, porque seguro que el futuro de esta nación pasará muy cerca de dónde me toca estar mañana,  y estaré atento por si siento el rebufo de la historia…

*FOTO: DE LA RED


sábado, 9 de noviembre de 2019

PASANDO EL RATO, QUE ES GERUNDIO...



Mi vecina, La Rosa, me ha dicho bajando en el ascensor, y no estábamos en el Empire State precisamente, sólo eran cuatro pisos, que sospecha que ésto de las elecciones lo organiza el Señor Ferreras y Señora, o Ana Pastor y su marido, no vamos a andar a estas horas con machismos....

Pues en el caso de que fuera así, tienen un negocio bien montado... Dos elecciones al año les tiene que salir en programas de la tele por un buen pico, digo. 

Y es que ya nadie hace nada por nada, o como se solía decir, por amor al arte. Antes cuando solo había una cadena televisiva a nivel nacional, y en provincias o ciudades afortunadas, dos, incluyendo el U.H.F., podías encontrarte todavía alguna entrevista en profundidad en la que el protagonista, al final, no viniera a presentar lo último de lo suyo.

Es curioso por ejemplo la metáfora de la vida moderna que últimamente se ha materializado en una madre y una hija, famosas ambas, en sus orígenes por diferentes motivos, aunque ahora las dos coincidan en que generan “cotilleos”. La madre, Isabel Pantoja
Ahora, ya para pasar por caja, directamente la hija se hace llamar Isabel P. Que entre que preguntas por qué y te enteras que ha grabado una canción, no todo un disco, y la escuchas, pues ya has pasado el rato.

Que si te pones filosófico, puedes llegar a la conclusión de que vienes a este mundo, como mínimo a pasar el rato, y que si no tienes escrúpulos, los más afortunados hacen incluso dinero, y mucho.

Por cierto, y por razones que en estos momentos no me apetece contar, aunque tampoco son secretos de estado, son días en que tengo que hacer recopilación de todo lo que tengo en casa. Y estudiando caso por caso, todo lo acumulado, y nunca mejor dicho, llego a la conclusión de que no me conocía, naturalmente porque no he querido conocerme. O dicho de otra manera, llevo muchos años, desde el principio, compartiendo mi vida conmigo mismo, y no me reconozco.

Sabía que soy incapaz de comenzar una maleta sin llenarla de “por-si-acasos”, pero visto lo visto, al final mi casa está más llena de por-si-acasos que de una vida estable y lineal. En el argot deportivo se diría que soy más de los cien metros lisos que de la maratón.

Los que no me conocían, no conocían a este vecino del mundo, hasta este post,  habrán pensado al comienzo, que tengo muy mala baba con los demás, aunque al final habrán llegado a la conclusión de que mi mala baba me salpica a mí mismo, y que por aquello de la confianza, quizás incluso en demasía. 
Sólo puedo decir en mi defensa, o en mi acusación, ya no sé, que el ejemplo siempre se debe de comenzar por uno mismo, y en eso, en leerme la cartilla, nunca he fallado. Más de uno y una, conocidos o no, deberían de empezar sus críticas por uno mismo. La cosa, la famosa cosa, iría mejor…

*FOTO: DE LA RED


viernes, 8 de noviembre de 2019

REFLEXIONES EN ZAPATILLAS



Estos días pasados se nos ha dicho hasta la saciedad que el número de millonarios en España se quintuplica en los últimos nueve años.
Para que luego sigan diciendo que Estados Unidos es la tierra de las oportunidades. Habrá que quedarse aquí, y a lo mejor, por esas cosas del destino, o por mera aproximación, algún día nos toca a nosotros. Más que por persistentes, como diría ese filósofo de la vida que es José Mota, por “cansinos”.

Y todavía los políticos se estarán preguntando a quién habrá que subir los impuestos. ¿Qué tal un impuesto al millonario y millonaria? Además sería como un reconocimiento oficial a su estatus, “un impuesto que no se pone a cualquiera”, un espaldarazo, una especie de premio “posh” (“pijo”) al millonario reconocido y no solamente presunto.

Por otro lado, que todos estén tranquilos porque según un estudio que se ha dado a conocer en Euskadi, se prevé que en el futuro  se recortará la diferencia entre el salario del hombre y la mujer. Pero no echemos las campanas al vuelo, porque no es que se va a acortar la diferencia porque las mujeres van a ganar más, sino que se va a recortar el salario de los trabajadores varones. Y es que para que siga subiendo el número de millonarios de algún lado deben de salir los cuartos.

Son este tipo de reflexiones las que no me dejan vivir una jubilación que no es que sea dorada, sino que como en la mayoría de los temas de hoy en día, al final siempre llegas a la conclusión de “virgencita que me quede como estoy” porque conoces a unos cuantos, bastantes además, que están peor que tú.

Antes de terminar estas consideraciones de andar por casa, o reflexiones en zapatillas, recuerdo también que este vecino del mundo ya ha visto, hace unos tres días, el primer anuncio navideño de este año, que no es original, sino que ya viene de las navidades pasadas: los paquetes cantarines de Amazón.

Hasta las grandes compañías, por muy americanas que sean, se reciclan, por aquello de ahorrar gastos. Al final, va a ser verdad la reflexión con la que comenzábamos el post de hoy: Habrá que quedarse en España como tierra de las oportunidades, o simplemente porque como ya estamos aquí, nos va a salir más barato, o menos complejo, como hubiera dicho mi madre, “irnos con la música a otra parte…”

*FOTO: DE LA RED

martes, 5 de noviembre de 2019

¿UN DEBATE REPLETO DE CALABAZAS?


No sé por qué pero ayer mientras estaba viendo el debate a cinco, en La sexta, este vecino lo vio en La sexta, me entró la sensación de que todos me querían vender una enciclopedia. Con eso ya se nota los años que este vecino del mundo va teniendo, porque desde el boom de lo digital, internet incluido, juraría que las enciclopedias en tomos, pasaron a mejor vida. Y lo peor de todo, para los candidatos especialmente, no me la compré.

Se notaba demasiado que la enciclopedia no les importaba nada. En realidad, sólo les interesaba, a los cinco hombres, solo hombres, el tenerla más grande. Me refiero, naturalmente, a la razón . Y ya se sabe que en política, lo mismo que en la verdad, cada uno tiene la suya, y basándose en lo que Groucho Marx decía de sus principios, si no le gustan seguro que tienen otros.

No fui apuntando las propuestas, que fueron más bien escasas, y seguro que se las lleva el mismo viento de siempre, el del olvido. Opté por intentar recordar aquellas cosas que me saltaron a la vista, y con Santiago Abascal me ocurrió que llegué a la conclusión de que repetía el personaje de Bruce Willis en “El sexto sentido”, porque nadie le veía y consecuentemente no le contestaban. Lo que ocurre es que de estar muerto ha pasado a estar más vivo y coleando que nunca.

Lo peor de todo es que con Abascal parece que se ha abierto una puerta al  pasado y ciertos fantasmas que parecían olvidados luchan por renacer.

Lo de Pablo Casado y Albert Rivera, es una especie de Dr.Jekyll o Mr.Hyde, Te venden la misma enciclopedia pero de diferente editorial. Mucho paripé pero al final, si pueden, cada uno montará su chiringuito y, si les dejamos, se repartirán la playa. Y lo peor de todo es que al partido de Abascal, Rivera y Casado le permitirán el alquiler de tumbonas y sombrillas de lo suyo.

En varios momentos este vecino tuvo la sensación de que Pedro Sánchez, teniendo en cuenta de que las Navidades prácticamente ya están a la vuelta de la esquina, estaba aprovechando el momento para escribir la carta a Los Reyes Magos. Porque mientras los demás hablaban, a él se le veía emborronar y emborronar papeles mientras hablaba entre dientes. Tenía la actitud de ser un maestro que está preparando la clase en la misma aula mientras sus pupilos se le están desmadrando.

Quizás por eso, porque el principal candidato, eso sigue pareciendo, estaba, lo que en mi pueblo vulgarmente se diría “yendo a por uvas”, Pablo Iglesias regañaba a todos, y les intentaba enseñar las normas básicas de urbanidad. Cuando en realidad, lo que no paraba de preguntar, sin palabras, a Pedro Sánchez, el famoso “qué hay de lo mío”.

Mucho me temo que ésto no lo arreglan unas nuevas elecciones. Y lo peor para este vecino es que este domingo se va a sentir más toreado que la mayoría, porque además, ya lo adelantó en un post anterior, le toca estar en la mesa electoral como “segundo vocal”.

De todas maneras, que a nadie se le ocurra no cumplir con su deber de ir a votar ese día. Especialmente si eres de izquierdas. Porque si “la cosa” puede ir a peor, irá a peor. Hay ejemplos recientes como el Brexit y Donald Trump. 

Algunas veces Halloween no tiene por qué ser el 31 de Octubre…

*FOTO: DE LA RED



viernes, 25 de octubre de 2019

EL ÚLTIMO VIAJE...¿PARA TODOS?



Este fin de semana habrá que recordar que a las tres de la madrugada del sábado serán las dos. Más o menos, como ayer, que siendo 24 de Octubre del 2019, nos tele-transportaron, y nunca mejor dicho por aquello del helicóptero y la televisión, a finales de Noviembre de 1975, para modificar el final de aquella historia pergeñada por los que movían el cotarro en aquella época.

Ahora, estamos discutiendo, como en la fábula de antaño, si eran galgos o podencos los perros a vigilar por los conejos, cuando en realidad lo que debería importar es que ya se ha subsanado un mal final, aunque sea cuarenta y cuatro años después. Y es que, quizás, los españolitos podemos ser de difíciles entendederas, y si encontramos un cascabel y un gato, nos sigamos preguntando donde están los galgos y los podencos de la fábula, en lugar de ponerle el cascabel al minino en cuestión.

Y es que los españoles, así nos parió el destino, somos más de discutir y de abrir comisiones de investigación, porque discutiendo, y abriendo comisiones, no se hace nada y parece que se hace todo.

Se ha tardado una eternidad de cuarenta y cuatro años en ponerle el cascabel al gato de la historia, e incluso de la histeria, por lo de la tardanza en hacerlo, y ahora muchos estiman que todo ha sido inconveniente porque las elecciones están, no cercanas, sino aquí mismo.

Por esa regla de tres, en España, como todo siga así, será imposible hacer algo, porque las elecciones, a cualquier cosa, incluso a presidente de la escalera, siempre estarán cercanas. Y la vida, nuestra vida, única e imparable, continuará hasta que se pare para siempre.

Ya no habrá escusas, ni galgos, ni podencos, ni más comisiones que nos den falsas esperanzas. E incluso será tarde para descubrir que lo que hemos vivido no ha sido a nuestra libre elección, sino que el guion de nuestra vida la han escrito quizás los mismos que nos están diciendo que este sábado a las tres serán las dos.

*FOTO: DE LA RED

sábado, 19 de octubre de 2019

...COMO UN HUEVO A UNA CASTAÑA


Lo del Brexit parece que ya está hecho. Veremos si ellos mismos, los británicos, en el Parlamento, al parecer hoy, se ponen de acuerdo. Porque inglés lo hablan, pero debe ser por disparidad de acentos que no se ponen de acuerdo. Y es que la mayoría pone acento en lo suyo, ¿Qué hay de lo mío?, y ya se sabe que cada mío, o cada suyo, se parecen al de al lado como un huevo a una castaña. Y en esas estamos…

Este vecino del mundo, en otro orden de cosas, sabe que el 10 de noviembre, lo tiene comprometido con el Gobierno, o desGobierno de la nación, y ya ha fichado como segundo vocal de su mesa electoral. Y no sólo está convocado sino que jugará en el equipo inicial sea quien sea su míster. Y viene a huevo, esta vez sin castaña, el decir que si los políticos hubieran hecho su trabajo, por el que les pagan, y muy bien por cierto, este vecino ese domingo de noviembre lo tendría tan libre como para levantarse temprano, o no, como para salir con su familia, o no, o como para hacer lo que le saliera del “altiplano”. 

Cuando tienes mala baba está comprobado que cualquier palabra te sirve para dar rienda suelta a tus más bajos instintos por la vía de acentuarla o recalcarla. Y este vecino se ha planteado durante varios segundos el recalcar “altiplano” con un tamaño de letra cuatro veces mayor que el resto del post. Pero ha recordado, nunca debía de haberlo olvidado, que sus seguidores son inteligentes y saben leer mucho más lejos de lo que en teoría delimitan las palabras.

Este "blogger" acaba de comprobar que el Black Friday de este año será el 29 de Noviembre, aunque sin duda la semana negra para todos nosotros, independentistas o constitucionalistas, sin duda será esta semana que estamos, más que pasando, sufriendo.

Unos la relatarán, siguiendo el planteamiento anterior en este post, como un huevo, y otros como una castaña. Y en lo único que coincidirán entre los “unos” y los “otros”, es que tanto el huevo como la castaña se nos habrá quedado atascado, o atascada, en nuestro tercer ojo, que siempre, hay que recordarlo, está detrás. Por eso muchos no lo veían, o no lo querían ver, venir. Y para escarnio de todos, ahí lo vamos a llevar...

*FOTO: DE LA RED


martes, 15 de octubre de 2019

EL PROCÉS, UN LAVADO QUE VA PARA LARGO



Se debería de pensar que quien duerme descansa, pero ésto al menos hoy no le ha ocurrido a este vecino del mundo, quien se fue ayer a la cama un poco bastante “fed up” que dirían los hijos, y padres, del “brexit”, y que nosotros en series con doblaje sudamericano de años sesenta, hubiéramos traducido con un otoñal, por no decir caduco, “hastiado”. Porque abrieras la puerta, ventana, o medio de comunicación que abrieras ayer todo se vestía de “procés”.

En realidad este vecino no sabe si realmente el mundo se paró tras la sentencia, pero lo que sí sabe es que más de uno lo intentó parar en las calles y en los medios.

La experiencia, y especialmente los años, nos dicen que después de un día, por muy negro o multicolor que sea, vendrán otros que harán olvidar la importancia de aquel. Pero hoy, como ya ha dicho al comienzo este bloguero, ha dormido pero no descansado y continúa tan “fed up” como ayer o incluso más.

Y es que sus sueños, o mejor dicho sus pesadillas han estado protagonizadas por el matrimonio formado por Antonio García Ferreras and wife, o Ana Pastor and husband, que tanto monta, monta tanto. Se han pasado toda la noche, en su pesadilla naturalmente, dándole noticias, el Ferreras desde el estudio, y la Pastor desde cualquier lugar de Cataluña que se requiriera, y lo que más le ha dado que pensar a posteriori, y quizás el motivo de que desgraciadamente recuerde todo, es que después de cada ráfaga informativa, cada uno de ellos sellaba con un grande y ruidoso tampón que tenía al efecto, el papel recién leído, mientras sonaba de fondo el inequívoco timbre que siempre ha sonado, al ingresar dinero en caja.

Este vecino sabe de que al final le tacharan de intentar matar al mensajero, eso incluso en el mejor de los casos, porque le pueden acusar de querer coartar el célebre derecho a la información, una de las bases de la democracia y que cada uno ahora intenta pintarla de todo tipo de colores y especialmente convertirla en la base que sustente, al final, el producto que nos quieran vender.

Este vecino tiene la sensación de que acaba de salir de una lavadora, en la que ha sido centrifugado junto con siete kilos de noticias, lo que cabía en cada lavado, fueran del tenor que fueran.

Lo peor no es eso, sino que la colada del procés se antoja cuando menos larga, y cada vez hay más lavadores, no se sabe si limpiando, pero seguro que agitando, lo que luego alguno debería de planchar. Y que como mínimo, lo dice la experiencia, si no andamos finos, al final nos quemaremos nosotros.

Este vecino ya lo está, quemado. Y si algo tiene seguro hoy, es que no va a abrir la puerta de su casa a nadie, porque mucho se teme que si suena el timbre, es más que posible que le recuerde al de la caja, que en su pesadilla, no paraba de convertir noticias en dinero. Y ya nos vale a todos. Como decía aquel célebre personaje de “Aquí no hay quien viva”: Un poquito de por favor…

*FOTO: DE LA RED

domingo, 13 de octubre de 2019

¿HUMOR? ¿QUÉ ES ESO?



Lo nuestro es de hacérnoslo mirar. Tal como está este patio con forma de piel de toro que cualquier día nos lo cierran porque ya no es nuestro sino de los acreedores,  y ayer copó todas las miradas, iba a decir “el ligero”, pero que cada cual lo juzgue como quiera, accidente de Luis Fernando Pozo, cabo primero de la Brigada Paracaidista, chocando contra una farola al tomar tierra ante el palco de autoridades en el desfile de las fuerzas armadas organizado en Madrid con motivo del 12 de Octubre.

Y es que estamos a la mínima que salta para echarnos las manos a la cabeza, del otro, siempre del otro. ¡Ojo! Obsérvese  que estoy hablando de aquel que aprovecha la mínima para poner a parir al personal, o al sistema.

Otra cosa es hacer chistes que no tienen por qué degradar a nadie, y no reírnos de alguien sino con alguien. Porque ayer se demostró una vez más, que de reflejos humorísticos andamos también bien.
Porque una de las masacradas en Twitter, ayer y como siempre es Anabel Alonso, la actriz, y a su vez asidua participante en dar su opinión, y a la que no se puede tachar de que le duelan prendas; ya que se diga lo que se diga, tiene el arte de nunca pasar desapercibida, ni rayar en la sal gorda ni en la falta de estilo. Ayer con su tweet
¿Iba de farol?
Impacta contra una farola el paracaidista que llevaba la bandera de España
https://elmundo.es/espana/2019/10/12/5da1a398fc6c83406c8b45f1.html” demostró para unos, su gran sentido del humor, ya lejos de recitar guiones ajenos, y para otros, lo muy mala, malísima que la ven, quizás incluso más allá de lo que en realidad ha dicho.

Eso sí, si nos reímos con eso, también habrá que defender chistes, eso creo que en realidad fue, del Señor Rafael Hernando que en otro tweet, el mismo medio que Anabel Alonso, decía:
“Todo mi apoyo y admiración para el cabo 1º Luis Fernando Pozo.
El no tiene culpa alguna, cuando en la Tribuna está Presente un Presidente en funciones como Sánchez, q todo el mundo sabe q es “gafe”.

Digamos que el humor va por barrios, y que en el fondo define al humorista y por supuesto a su escuchante.

De todos modos obsérvese que hay una gran diferencia en ambos chistes. En el primero, en el de Anabel Alonso, ella pregunta a titulo personal, y en el segundo, en el de Rafael Hernando, asume que todos lo sabemos, y desde ese momento nos hace participes de que asumimos que Pedro Sánchez es gafe. A este vecino del mundo, por ejemplo, el Señor Hernando no le ha preguntado por si lo sabía o no. Y ha sacado, sin incluso darse cuenta, “la patita” del político y reparte responsabilidades por si acaso, siempre por si acaso.

Al final habrá que recordar aquellas palabras de Don Miguel Gila, en las que hablando de las fiestas de su pueblo y de lo brutos que eran allí,  dice: “Y si no saben aguantar una broma, que se marchen del pueblo.
Pero que conste que nadie les echa, solo es, visto lo visto, una sugerencia.

¿Dónde quedó el humor?

*FOTO: DE LA RED

sábado, 12 de octubre de 2019

VAGABUNDEANDO CON LA MIRADA...



Vagabundeando con la mirada en la pantalla de mi “ordeñador” (de ideas) observo que falta, en teoría, menos de un mes para tener nuevo gobierno, y no sé si eso es bueno, malo, o como dicen muchos, "mediopensionista". Y en realidad tendrá bastante de los terceros, porque más de uno de nuestros políticos deberá echar mano, en algún momento, de algún miembro de esa especie de ejercito conseguidor en que se han convertido los abuelos.  Y habrá que mantenerlos contentos, especialmente si pertenecen a nuestra estirpe, o mejor dicho, nosotros a la suya.

Bien mirado, y desde la perspectiva que le dan a este vecino del mundo los más de sesenta años que ya dura su periplo en esta experiencia que es la vida, la gran diferencia que se puede observar con décadas anteriores es la falta, digamos, de referentes vitales. Porque prácticamente todos acaban, acabamos (que algo habremos hecho también), con el trasero al aire, y si no es defraudar a Hacienda, y consecuentemente, eso dicen, a todos, es que sus supuestos principios se convierten en finales, y donde hubo amor ahora como mínimo hay cuernos, especialmente en una sociedad, que para más inri, huye cada vez más del mundo de los toros. 
Quizás, en nuestros días la paradoja sea la moneda de cambio corriente.

Casi se le olvida a este vecino del mundo que hoy es 12 de Octubre, Día de la Hispanidad, de la Guardia Civil, Fiesta Nacional de España, Día del Pilar, y si se empeñan y se les empieza a marcar esa vena termómetro que todos tenemos en el cuello Día-de-nada-celebrar o Día-del-todo, que nunca mejor dicho, por un día no vamos a discutir, que nos quedan los demás del año.

Siempre se ha dicho que gana el que más resiste, y por lo que parece Don Pedro Sánchez debe de ser un gran maestro de sobrevivir en apnea permanente y sin miedo a los abismos de encuestas cambiantes.

Para terminar este post, que este vecino está seguro que puede escocer a muchos, pero así es la vida, que no siempre gusta, he querido dar con una imagen que en mi infancia asociara con este día, 12 de octubre, y ha ganado por goleada, aquella cabeza india que desde la mesa de nuestro maestro nos recordaba que teníamos que dar dinero para las misiones.

Desgraciadamente nuestras nuevas generaciones-degeneraciones la única misión que conocen es …”misión imposible”. Y así nos va…

*FOTO: DE LA RED

viernes, 11 de octubre de 2019

ARETA Y LOS OJOS DE TU MEMORIA (...A ESTAS ALTURAS DE LA PELÍCULA)


En mi post del día 2 de Octubre comentaba las ganas que tenía de ver la nueva película, y hasta hace muy poco inesperada, porque se había despedido del cine, de José Luis Garci, “El crack cero”, una especie de precuela de las anteriores “Crack”, vehículo de gran éxito para un Alfredo Landa en aquel momento cambiando de piel, o de imagen, que vaya usted a saber.

Antes de nada, y para abreviar, para los incondicionales de las dos primeras, que por razones de calendario, muchos no volvemos a cumplir los sesenta, digamos que no defrauda en absoluto, sino al contrario. Da ganas de pasar por taquilla, no comprar por internet, no, sino de pasar por taquilla a modo de homenaje al cine de entonces, y pedir ya una entrada para la siguiente historia que nos cuente, sea precuela o secuela, porque siempre “cuela” lo que sea  que nos vuelva a contar el Señor Garci con Germán Areta dentro.

Rezuma añoranza, de acuerdo, pero quizás se trataba un poco de eso, porque después de más de treinta años, los incondicionales de entonces algo de añoranza tenemos que tener, no a la época, sino a los personajes y consecuentemente al hábitat en que vivían. Y en realidad, desde la ventana en que ahora miramos, el hoy, “las cosas”, las historias, siguen siendo iguales, e incluso se les puede poner el sello de “y no aprendemos”.

El Señor Garci, una vez más nos da una lección de cine, y no se regodea en ello, sino que nos muestra “lo imprescindible”, con diálogos redondos, de un guion en el que también forma parte, junto con  Javier  Muñoz, con frases cortas y rotundas que pudieran formar parte de un Twitter para aventajados en lo que sólo se dice lo que se quiere decir y porque se tiene que decir.

Carlos Santos, muy bien en el papel principal, de un Areta que no tiene que dar explicaciones a un Alfredo Landa, que seguro que hubiera visto con buenos ojos el devenir de su personaje, y por lo que se comenta, también ha tenido el visto bueno de sus hijos, que no es imprescindible pero siempre es mejor.

Miguel Ángel Muñoz, y quizás se lleva, a la postre, la parte del león, con un personaje, “El moro”, en las dos anteriores entregas interpretado por un Miguel Rellán en un personaje que en parte le encumbró en su carrera de sólido actor de reparto, al que ahora el Señor Muñoz le da otro toque, como de tecla desafinada en una sinfonía que parece que va de otro rollo, pero en la que él se sabe hacer querer con esa imagen de marginado no a su pesar, sino a su querer.

No hay que olvidar a un Pedro Casablanc cogiendo el papel que en las anteriores pelis, interpretaba un recordado José Bodalo, y no sólo no desmerece, sino que lo hace fácilmente suyo, siendo el eslabón que por siempre unirá a Germán Areta con su pasado en la policía.

A resaltar los personajes femeninos, con esa tan especial secretaria, Molly, inequívoco nombre para una novela negra, una gran Luisa Gavasa. Y ese reparto tan femenino, machista y sufrido encabezado por Patricia Vico y Macarena Gómez, dos mujeres enganchadas de un mismo hombre al que nunca veremos pero que en realidad será el desencadenante de la aventura. Cayetana Guillén Cuervo como una madame encargada de disfrazar con cierto glamour las más viejas pasiones y aprovecharse de ellas.  Y María Cantuel, dulce y delicada novia de Germán Areta, y cuyo destino indudablemente, sabemos desde el principio los fans de las dos pelis anteriores, que forjará por siempre parte de la personalidad del Areta del después.

Tal como están las cosas actualmente, película no políticamente correcta donde se retrata una sociedad especialmente machista, y donde gusta y se habla mucho de boxeo. Pero es que esta sociedad de ahora hace menos de cuarenta años era así, y Garci retrata un universo de cine negro, eso sí a la española, y donde tiene la humorada de invitar al propio Humphrey Bogart en alguna escena, aunque sea como cameo de escayola. Y es que el Señor Garci sabe como nadie sazonar historias negras con gotas de humor a modo de desengrasante.

Si a todo lo anterior se riega con la banda sonora que en su día creó Jesús Gluck, y en algún momento se retrata al Madrid navideño de antes, tenemos una película nada despreciable para los seguidores de Areta (nunca conviene olvidar que era el segundo apellido del Señor Landa, Don Alfredo) y del siempre académico José Luis Garci, todavía en un estado de gracia envidiable. Película que debería ser estudiada en cualquier escuela de cine que se precie.


Aunque pueda oler a naftalina para algunos, es cine del bueno que no necesita una visión concienzuda, aunque eso sí, pueda tener varias pieles como la cebolla, y alguna te pueda incluso humedecer los ojos de tu memoria.

*FOTO: DE LA RED

martes, 8 de octubre de 2019

LEYENDO ENTRE LÍNEAS...



Hoy he tenido que ir, no me quedaba más remedio para no pasar hambre, al lugar donde plastifican la naturaleza, o sea, al supermercado, y me he llevado una sorpresa. No, no regalaban nada, a parte de unos veinte papeles de promoción, al pagar en la caja, de productos que normalmente no usas. Pero no me refería a eso. Sino que nada más entrar ya he visto otro rastro más de que la Navidad prácticamente ya está, al menos su comercio, a la vuelta de la esquina.

Ya se están promocionando los turrones, polvorones y mantecadas. Como que si no estás un poco espabilado te estrellas contra ellos, porque más que esperarte en la entrada de lo que sería el equivalente al circo romano de la compra de nuestros días, se lanzan a tu yugular. 

Ahora ya no hay leones que tirar al pueblo, sino promociones con las que intentan devorar económicamente lo poco que te va quedando a medida que nos vamos adentrando en el mes correspondiente.
Este vecino del mundo ya se ha hecho el firme propósito de que este año se va a concienciar para no ser tentado por el denominado como viernes negro, cuando se acerque, que todo se andará.

Habrá que adoptar los modales de un político español a la hora de llegar a acuerdos con los demás, y no acercarse a nadie, ni a ningún sitio donde te intenten regalar, como se decía antes, duros a cuatro pesetas, porque en realidad viene a ser una variante del truco del tocomocho y cuando te das cuenta no es que ya ni te queden los bolsillos, ni es que tan siquiera te queda la dignidad, que antes era lo único que quedaba a los pobres.

Por cierto, esta semana pasada estuvieron hinchas belgas en Madrid para animar a su equipo. Sucedió en la Plaza Mayor de Madrid antes del partido de Champions League que enfrentó al Real Madrid contra el Brujas. Y se pudo ver en algunos de los informativos televisivos, unas desgraciadas imágenes en las que degradaban a un más de lo que lo hace la vida, a un grupo de mendigas, intentado quitarles el velo del pelo. 

Porque aparte de todo, hubo también un mucho de machismo. Y este vecino del mundo, por motivos de su edad, acostumbrado en los años setenta a devorar todo tipo de cine, digamos entonces catalogado como “intelectualoide” en aquellas recordadas salas de arte y ensayo,  y a hacer segundas e incluso terceras lecturas, intentando burlar la entonces férrea censura, creyó ver alguna semejanza en cómo nos siguen tratando todavía en los foros europeos. Amagos de famélicas recompensas mientras al final el vaso no está medio lleno, sino siempre medio vacío.

Ya se sabe, una cosa es lo que te proyectan en la tele, y otra cosa lo que crees ver. Y ya nos quieren quitar, suprimiendo la filosofía en las escuelas, hasta la educación para poder leer entre líneas… ¡Hay que joderse!

*FOTO: DE LA RED

miércoles, 2 de octubre de 2019

NOCHE DE LLUVIA Y RECUERDOS...



Será algo psicológico pero entrar, y bien entrado porque ya es día 2, en Octubre, me pone nostálgico y con muchos recuerdos y en blanco y negro. Los recuerdos no tienen por qué ser tristes, porque todo lo vivido tiene mucho de usado, querido y añorado. En este último punto puede haber su aquel tristón, más por lo perdido que por los recuerdos en sí.


Me acabo de despertar, eso me pasa por meterme en la cama para mi temprano, doce de la noche, y son las tres de la mañana y el sueño, como el dinero en una película de gánsteres, o de cine negro, ha desaparecido. Y por la banda sonora que se oye en la calle, me levanto, y compruebo, más imágenes prácticamente en blanco y negro, que llueve y con ganas.


Nunca he envidiado eso de ser famoso, pero esta semana no me hubiera importado ser un “It-boy”, si es que existen, por mera contraposición con “It-girl”, y que por el blog que llevo, alguien me hubiera regalado una entrada para el estreno de “El crack 0”.

Y es que para los de mi generación, finales de los cincuenta (lo comprendo ya ni de "boy" nada), aquellas dos películas, “El crack”, de 1981, y “El crack 2”, de 1983, de un Alfredo Landa bañado con aires a lo Humphrey Bogart, resultaron mezcla de hito y tortazo en la cara para despertar a la realidad de una corrupción latente, en la vida real, y en ambas películas.

Con el estreno del próximo día 4, de ahí ese deseo de poder verla cuanto antes, se van a convertir en una especie de “trilogía”, en la que la película de ahora, y en blanco y negro, más blanco y negro para una noche, la de hoy, nada apetecible, actuará de precuela. Y hará que los personajes de Garci, entonces interpretados por Alfredo Landa, y su “ayudante”, “El Moro”, como siempre un “Miguel Rellán” inmensamente humano, sean quizás más comprendidos, y sin duda añorados…

Como este vecino del mundo no está bañado ni tan siquiera rozado por el Señor Bogart, tendrá que esperar unos días, siempre demasiados, para poder “volver a empezar”, aunque esa sea otra película, eso sí, del mismo director.

Me niego a terminar este post sin nombrar al gran amor de Areta, o casi,  en las dos películas, y sufridora oficial de la violencia que emanan de ambas historias, Carmen, interpretada por una María Casanova, siempre con un mucho de melancolía inherente a ella y a sus persoanjes; imprescindible entonces en el cine de Garci.

Al que tenga la suerte de ir a cualquiera de los estrenos en España de “El Crack 0” desde ya le odio. Y será para siempre, y a muerte, como el odio en el cine negro...

*CARTEL: EL CRACK 0

viernes, 27 de septiembre de 2019

EN EL FONDO, AMOR



Veo, es un decir, el cómo va a quedar la futura estación del Ave en Donosti, en Atotxa concretamente, y es tan bonita, e integrada en el entorno, que no diría eso de que parece un San Luis, pero que quizás sobremos nosotros, los que la vamos a manchar tan sólo con nuestra presencia…¡Cosas mías!

Como cosas mías son también que uno viva en Roma todo el año y no conozca el Vaticano, o en versión donostiarra, que uno esté todo el año paseando por el Urumea y sólo conozca el Festival de Cine a través de las noticias, y del “glamour”, que no se vende en droguerías, pero que sí se sufre cada vez que haces compras en “nuestra-querida-Donosti”. Una pena, otra más, el no haber podido ver a Donald Sutherland, y el que una vez fue el Casanova de Fellini. Toda una frustración para cualquier cinéfilo.

Y es que de la leyenda solo nos cae el polvo, además al ojo, y no es ni de oro ni tan siquiera dorado.

Más de uno de nuestros lectores me ha preguntado el por qué me llevo tan mal con Donosti, y siempre digo lo mismo, no me llevo mal, sino que la quiero tanto que soy como el ama de casa que no se siente correspondido. Quizás sea lo que tienen los amores canallas, que te atraen, pero que te dejan siempre con esa sensación de frío, de incomprendido. Y, especialmente, juntar el concepto de "Donosti" con "canalla" es como unir a Cupido con las armas, por muy blancas que sean.

Este vecino del mundo no se encuentra hoy en "La bella Easo", sino en Bilbao, y quizás sea eso de que Bilbao está en todas partes y sienta una especie de morriña donostiarra, quizás por esa ascendencia gallega por parte materna, que aunque no se ve, se siente. Pero lo dicho, seguro que son cosas mías...

*FOTO: DE LA RED

jueves, 26 de septiembre de 2019

GEOGRAFÍA HISTÓRICA INVENTADA...



Todas las épocas tienen sus clichés, sus tics,  y uno de los más importantes de ahora sería eso del “relato”, o de contar no  cómo le va a cada uno en su feria particular, sino cómo desea que los demás crean que le va.

Se acaba de terminar una legislatura, desgraciadamente muerta al nacer,  y aparentemente al menos, todos los partidos han estado más preocupados en distribuir su relato de cómo fue todo, a realmente hablar con un hilo directo desde el corazón.

En realidad eso del relato viene  muy ligado a otro concepto, o tic, muy de la época también, el tuneo de las cosas, y que no tiene que ver nada con la tuna universitario, aunque hay un mucho de cantarte coplas e incluso de cantos de sirena, sino precisamente con darle cuerpo, en cierta manera, al relato de cómo deseas que sean las cosas, los objetos, que tienen la suerte de rodearte. Porque hay un mucho en el concepto de "relato" de hacerse un selfish, otro cliché, con el paisaje deseado de vender en torno a tu persona, y no con la realidad a convivir en tus veinticuatro horas diarias. 

Y aquí quizás llegamos ahora a una de las piedras angulares de nuestro día a día, la famosa, tristemente, posverdad, o disfrazar a la mentira con un camuflaje de sabor a verdad verdadera. Lo que vendría a ser intentar borrar tus huellas en el desierto de la realidad para que no se viera ni se sintiera la urdimbre, o la tomadura de pelo si solo fuera una humorada, y no disfrazar la verdad de lo que fue para seguir chupando de la teta de la que quieres seguir mamando. 


La posverdad es hija de su tiempo, y tiene un mucho de “photoshop” y de jugar con la estética de lo políticamente correcto. De hacer que huelan bien los armarios donde guardamos los cadáveres de las promesas incumplidas. La posverdad tiene un mucho de tristeza y de timo, de disfrazar las cicatrices que nos han traido hasta aquí para ponerle un precio, siempre más alto, a lo que va quedando de nosotros mismos. Y hay que seguir viviendo, que no es fácil.

*ILUSTRACIÓN: DE LA RED