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miércoles, 31 de marzo de 2021

DE PATADAS Y VACUNAS...


 Tengo un vecino que a partir de las diez u once de la noche, no importa que sea laborable o festivo, convierte su casa en un laboratorio de ruidos como menos. No se conforma con tirar las cosas al suelo, sino que, al menos por el ruido que origina, las quiere soldar.

Ayer, tras otro terremoto acústico vecinal, llegué a la conclusión de que si algún día reciben la visita de la policía practicando, lo que ahora parece que está de moda en Madrid, la famosa “patada en la puerta” y que los ya metiditos en años conocimos como la famosa, desgraciadamente, “Ley Corcuera”, el vecino de abajo, es decir este vecino del mundo, no va a notar la diferencia.

Por cierto, lo que son las cosas, la mayoría de políticos de su época pasaron para este vecino sin pena ni gloria, sin dejar huella. Pero José Luis Corcuera, entre su famosa patada, y que al menos según su leyenda, comenzó de electricista y llegó a Ministro del Interior, las arenas del olvido no han conseguido enterrarle.

Cambiando de tema…, ayer pasadas las seis de la tarde recibí un mensaje en el móvil diciéndome que tenía que coger cita para la vacuna.

Resumiendo: mañana sobre las tres de la tarde me vacunan. 

Por dos horas de diferencia, el cachondeo no es completo. Porque teniendo en cuenta que la cita es en Illumbe, la plaza de toros de Donosti, las cinco de la tarde hubiera sido la hora exacta para una buena faena de aliño con la AztraZeneca, que creo que es la que me toca. Y que me tiene muy mosqueado, por aquello de que la lotería no nos va a tocar, pero lo malo…

¡Que Dios reparta suerte!

*FOTO: DE LA RED

sábado, 19 de diciembre de 2020

DÍAS DE MUCHA INTUICIÓN...



 ¡Lo sabía! Mi intuición, las pocas veces que me visita (que para eso soy un hombre de lo más normal; con más fallos, eso dicen ellas de todos, que una escopeta de feria), era acertada.

He puesto más marcha, cercana a la paranoia, a las luces, y ahora sus ramas son otras. Me ha parecido, incluso, que me sonreía. Aunque, por supuesto, soy más que consciente, que cada cierto tiempo necesitará relax, los dos lo necesitaremos, incluso penumbra.

Le he elegido el mejor emplazamiento de la casa, a la entrada de la sala, y junto al pasillo, pequeño… Y es que el espacio, los metros cuadrados, en Donosti al menos, se venden en joyerias, que junto con las tiendas delicatessen, siempre están en el Olimpo de los precios.

Es el primer año que me acompaña. Nuestra relación, como la de muchos ahora, comenzó vía internet. Vi su foto por casualidad, como ocurre en muchas grandes decisiones, y supe que era él a quien había estado buscando de un modo casi platónico.

Unas Navidades diferentes, a la fuerza, como la horca, necesitan compañías diferentes.  Preferiblemente que no te recuerden en nada al pasado. Y no convertir la tristeza, la melancolía, la añoranza, en ingredientes que puedan estropear cualquier plato, incluso cualquier momento, al compararlos con ese “El Dorado” que se esconde en los recovecos de la memoria.

*FOTO: F.E. PEREZ RUIZ-POVEDA

sábado, 21 de marzo de 2020

TIEMPOS DE RUNNERS ESCAPISTAS Y ALMOHADAS PELIRROJAS


Una de las imágenes de ayer fue la de esa runner, para más inri, a la carrera, en Donosti por cierto, que desafiando la prohibición salió a correr y acabó detenida y abroncada por los vecinos.

En un asunto tan claro sigo flipando con todos esos que empiezan su discurso con un "sí, pero no…"

Si te saltas lo establecido lo suyo sería decir eso de me han pillado con el carrito del helado y me tengo que atener a las consecuencias, pero no seguir con “por mis mismísimos que yo lo hago una vez y mil más, simplemente, porque yo soy mi mejor amigo”.

Por otro lado de cosas, como alquilar el perro del vecino para sacarle a pasear se ha puesto más caro que un kilo de las auténticas angulas, ya he preparado una horita de música, más o menos, con éxitos de ayer y siempre, y a partir de hoy hay que mover el esqueleto. Más que nada para que el esqueleto no quede secuestrado  por hordas de grasa, que pueden ser tan enemigas como el coronavirus.

Como La Nuri, mi sufrida, no está dispuesta a hacer prácticamente de contorsionista en bailes de salón, y la comprendo, ya he vestido a la almohada  con un aparente vestido color champagne y una peluca pelirroja en una especie de trasunto de Mia Farrow en la versión que protagonizó con Robert Redford, de “El gran Gatsby”, y en el que él acababa peor que su posterior pareja en la vida real, Woody Allen. Y es que muchos siempre han apuntado inequívocas maneras...

Esta noche, y prácticamente entre sueños, se me ha planteado una gran pregunta: ¿Respetamos el status vigente, si ensueños viajamos, por ejemplo, por preciosos atardeceres, o corremos el riesgo de acabar como la runner donostiarra, esposados e increpados más que Felipe VI tras su último mini-discurso? Juraría que me he despertado con un bosquejo de cacerolada al fondo...

Vamos a salir del coronavirus como las antiguas estrellas de cine, que antes de triunfar en la pantalla habían tenido trabajos de todo tipo. Pero, ya se sabe, que lo importante, en este caso, es salir.

*FOTO: DE LA RED

viernes, 27 de septiembre de 2019

EN EL FONDO, AMOR



Veo, es un decir, el cómo va a quedar la futura estación del Ave en Donosti, en Atotxa concretamente, y es tan bonita, e integrada en el entorno, que no diría eso de que parece un San Luis, pero que quizás sobremos nosotros, los que la vamos a manchar tan sólo con nuestra presencia…¡Cosas mías!

Como cosas mías son también que uno viva en Roma todo el año y no conozca el Vaticano, o en versión donostiarra, que uno esté todo el año paseando por el Urumea y sólo conozca el Festival de Cine a través de las noticias, y del “glamour”, que no se vende en droguerías, pero que sí se sufre cada vez que haces compras en “nuestra-querida-Donosti”. Una pena, otra más, el no haber podido ver a Donald Sutherland, y el que una vez fue el Casanova de Fellini. Toda una frustración para cualquier cinéfilo.

Y es que de la leyenda solo nos cae el polvo, además al ojo, y no es ni de oro ni tan siquiera dorado.

Más de uno de nuestros lectores me ha preguntado el por qué me llevo tan mal con Donosti, y siempre digo lo mismo, no me llevo mal, sino que la quiero tanto que soy como el ama de casa que no se siente correspondido. Quizás sea lo que tienen los amores canallas, que te atraen, pero que te dejan siempre con esa sensación de frío, de incomprendido. Y, especialmente, juntar el concepto de "Donosti" con "canalla" es como unir a Cupido con las armas, por muy blancas que sean.

Este vecino del mundo no se encuentra hoy en "La bella Easo", sino en Bilbao, y quizás sea eso de que Bilbao está en todas partes y sienta una especie de morriña donostiarra, quizás por esa ascendencia gallega por parte materna, que aunque no se ve, se siente. Pero lo dicho, seguro que son cosas mías...

*FOTO: DE LA RED

lunes, 8 de julio de 2019

DONOSTI NO ES HOLLYWOOD...



Por “El diario vasco” este vecino del mundo se entera de que Elsa Pataky y su marido Chris Hemsworth han vuelto de vacaciones a Donosti, donde todavía se encuentran en compañía, como se decía antiguamente, de sus tres retoños.  Y es que quizás, por aquello de que el movimiento se demuestra andando, han querido refrendar otra vez ese amor a primera vista que ya habían mostrado el año pasado por unos paisajes, unas gentes, y que ya nos hacíamos eco, hace unas tres semanas, de unas declaraciones de Mr. Hemsworth (https://patxipe.blogspot.com/2019/06/la-teoria-del-tiempo-chicle.html)
diciendo que con la excepción de Australia, San Sebastián sería el lugar donde le gustaría vivir.

Y en más o menos dos días comienza el rodaje del esperado film de Woody Allen. Difícil se nos va  a poner a los que queríamos seguir manteniendo a Donosti como un Edén solo para iniciados. Y es que el turismo de mochila y juventud por todas partes, sólo puede traer comercios, que ya los hay en demasía, y restauración copiada de otros lugares, y que nos haría perder nuestras señas de identidad.

Estaría bien un cameo de la vida real entre el Señor Allen y el Señor Hemsworth en cualquier esquina de la Parte Vieja donostiarra. Siempre se ha dicho que Woody Allen es maestro en improvisar gags en sus guiones, aunque mucho me temo si así fuera, que primero habría que “improvisar”, también, más de una reunión de los despachos que llevan la carrera de ambos profesionales, y colocar más de un asterisco en esa famosa letra pequeña…

Ya me perdonareis pero si ya Donosti para sus habitantes puede resultar más que cara, después de ese respaldo australiano-norteamericano, en cuestión de precios podríamos vivir en un continuo día de la marmota, pero encallados en unos precios a lo “víspera de San Sebastián”.

Los turistas, por propia definición de la palabra, vienen y, especialmente, se van, y los residentes pagamos los platos rotos el resto del año. Eso sin olvidar que además debemos de ser hospitalarios de todo corazón, ese mismo órgano, "corazón", que se nos pone a prueba cada vez que pedimos la cuenta, y que más de una vez hemos tenido que aclarar que no queríamos pagar la cuenta de todos. 

Donosti será cada vez más una ciudad de película, pero nosotros, sus habitantes, no somos estrellas ni ganamos como tal.

*FOTO: DE LA RED

viernes, 21 de junio de 2019

LA TEORÍA DEL TIEMPO CHICLE


Con el tiempo te das cuenta que al final de una juerga, y en torno a la ¨última copa", se suelen decir verdades tan grandes y sólidas como templos. Ayer, sin ir más lejos, me acordé de Koldo, el de la cuadrilla, cuando con lengua de trapo (empapada en alcohol, naturalmente) me dijo aquello de que "El tiempo no deja de ser un chicle que se puede estirar y encoger a conveniencia, todo depende del interés que le pongas a cada instante".

Lo dicho, ayer me acordé de Koldo, y hasta de su prima, cuando en solo tres pisos, en el ascensor, Mari Puri (precisamente "la del tercero") me dijo, entre otras muchas cosas, que este año estaba pasando mucho tiempo ya para que al marido de La Pataki, Don Chris Hemsworth, no le hubieran nombrado todavía "Tambor de oro" por sus declaraciones a una revista internacional, pero en su versión española, en las que confesaba que tras Australia, de dónde él es originario, Donosti sería la ciudad en la que le gustaría vivir.

Entre el segundo y tercer piso conseguí colarle mi opinión, y le dije que sinceramente los oasis conviene quedárselos para uno mismo, porque de lo contrario dejan de serlo.

Creo que a Mari Puri le faltó un piso para arrebatarle ese premio que todavía no le han dado al Señor Hemsworth. Y es que todo es opinable y hasta argumentable, y más cuando en un momento dado se ha puesto el listón a cierta altura, especialmente de la repercusión mediática de sus declaraciones, y te viene un mocetón de más de uno noventa y te hace trizas las expectativas, lanzando el martillo de su opinión tan lejos que si no se agacha le pega en la nuca.

En momentos así, cuando tres pisos, y en virtud de la teoría "tiempo chicle" de Koldo, se te hace un viaje exageradamente largo, doy gracias por no vivir en el último piso del Empire State.

*FOTO: DE LA RED

domingo, 10 de septiembre de 2017

SI DE GATO, GATILLAZO, DE BLOGGER...


El otro día iba paseando por una Donosti que se resiste a que el huracán veraniego se vaya desinflando, cuando me encontré, en realidad el destino me juntó a modo de broma en la esquina de cualquier calle (porque si recuerdo cuál es, es muy probable que no vuelva para no tentar a la suerte otra vez) con un antiguo compañero de trabajo. No, nunca hemos tenido ningún encontronazo, pero es el sexto sentido, ese que siempre te ayuda a sobrevivir,el que siempre ha encendido la luz roja cada vez que estamos cerca.

Me comentó que en ningún momento le había dicho que escribiera en un blog, y que se ha tenido que enterar por otros. Intentando no ponerme en modo “confrontación”, le dije que eso hubiera sido imposible, porque comencé a escribir, de hecho inauguré el blog, una vez nos habían forzado, concretamente a treinta personas, a dejar la empresa mediante un ERE. 

Como él seguía, creo, en la empresa, en cierta forma pareció ponerse en alerta, por aquello de recibir posibles críticas al respecto, aunque en muy pocos segundos pudo comprobar que mi ánimo estaba muy lejos de remover antiguos barros.

El tiempo iba pasando y era evidente que no teníamos mucho de qué hablar, por eso me hizo una pregunta sobre lo único que sabía de mí y mi nueva época: ¿Qué se siente al escribir en un blog?

Si la pregunta fue por pura cortesía, o descortesía, nunca se sabe, en muy poco tiempo debió de arrepentirse, por lo prolija de mi respuesta:

- En realidad cada post es como una liposucción en el alma. Siempre me ha recordado a aquel momento de nuestra niñez, cuando a nuestro profesor/a le fallaban las pilas para seguir dando la clase, y se descolgaba con una redacción urgente. Era como traspasar los poderes a la parte contratante. El problema es que esta redacción me la tengo que autoimponer, y como me llevo bien conmigo mismo, la mayoría de las veces intento no putearme con temas con los que tengo más que perder, y aquí incluyo siempre mi intimidad.

Mientras le sonreía, continué: -Y ya ves que la actualidad no está para que si escribes en un blog, te hagas el sueco y la rehuyas.

-¿Crees que es para tanto?- Me preguntó secamente, sin darme a entender si le estaba interesando nuestra charla forzada, pero charla al fin, o simplemente quizás estaba descubriendo que yo era un gran presuntuoso.

-Sólo te voy a hacer una pregunta, si me dejas –le contesté, mientras me miraba ahora con una gran atención:

-¿Qué opinas de la actuación de Juana Rivas, la madre que se escondió de la justicia con sus dos hijos; bueno, de ella, de la actuación de su pueblo, de los jueces, y si hubieran actuado igual si hubiera sido el padre el que tuviera ese proceder? ¿Se puede todo un pueblo confundir?

- Me pillas en mal momento – me respondió mientras miraba el reloj. - Hace ya diez minutos que tenía que estar en otro sitio.-
Y tomó, como se decía antes, las de Villadiego.

¿Mi opinión a las preguntas que le lancé?
Si mi interlocutor se hubiera quedado, mi respuesta sin duda, entraría en esta historia.

De todas maneras, los que me siguen desde hace mucho, sin duda sabrán mi respuesta. Aunque quizás la última pregunta, ¿Los jueces hubieran actuado igual si hubiera sido el padre el que tuviera ese proceder?, puede dar algo de luz a mi opinión, que por ser solo mía, hoy, como excepción, me la guardo.

Hoy, tocaba otra historia, ya perdonaréis. La historia, a todos nos habrá pasado, de alguien que cree conocerte, y te pide cuentas, aunque éstas, en tu opinión, sumen cero. 

Quizás al dejar esta vez el blog con la sensación de haber sufrido un gatillazo, comprendáis que otras veces, casi siempre, os vais saciados. ¡De nada, viciosill@s!

*FOTO: DE LA RED

viernes, 23 de junio de 2017

AL OTRO LADO DE LA HOGUERA...


Dentro de unos momentos, este vecino del mundo se va a dar un paseo que le servirá a modo de elixir de la eterna juventud. Y es que ya falta poco para celebrar la Noche de San Juan. Aquella noche que, entre otras cosas, significaba el fin de un curso, su intento de dejarlo atrás, y jugar con un futuro que se escondía tras la oscuridad de una noche, sin duda, especial.

Hay ritos, costumbres, noches que son una especie de vuelta a la niñez, quizás de empequeñecer en tamaño, para verlo todo con aquellos ojos grandes que nos caracterizaban cada vez que vivíamos algo que escapaba a la razón. Porque un niño, espera todo, comprende todo.

Y la noche de San Juan, aquellas noches de los años sesenta, tenían para nosotros al menos, mucho de rito que olvidaba la razón para troncar con esa sombra de brujería que se esconde en cada noche. Ese quemar algo viejo, ese saltar el fuego, está más cerca de un aquelarre, de jugar con lo prohibido, de cruzar al otro lado del más allá , de la sinrazón. Más cerca de intentar romper las puertas del cielo, que hacer cola ante el Todopoderoso, para ver si nos hemos portado bien.

La noche de San Juan del 2016 tuve la gran suerte de disfrutarla en la playa de La Zurriola, en Donosti, entre carajillos, bruj@s de distinto pelaje y música de enigmáticos acordeones.


Hoy, esta noche, estaré más lejos; lleno de ecos habanero-salineros, y de much@ rubi@ europe@; pero seguiré buscando al otro lado de la hoguera de cualquier playa, ese reflejo, quizás de una cara, o de unos ojos, que no paran de vigilar, prestos a reconocerme el día que ya la hoguera esté en el mismo lado de los dos.

*FOTO: DE LA RED

miércoles, 11 de enero de 2017

LA CASA KOXKERA DE TÓCAME ROQUE


Como blogger, o bloguero, siempre he evitado el ser víctima de un arrebato, y escribir “opinio-sentimientos” de los que, al muy poco tiempo (el mismo día) pudiera arrepentirme. Por eso, y lo he dicho más de una vez en este blog, procuro dar a alguna noticia que me salpica a los ojos o al corazón, un margen de seguridad, o como frecuentemente se utiliza ahora,  ejercer un cordón sanitario”, de unas dos horas, en las que se me vaya enfriando la boca, y  “largar” menos de lo que haría “still hot”.

Y hoy, con el asunto del Tambor de oro 2017, y dárselo o no a Angels Barceló, no es que me he “calentao”, sino que he estado más abrasado que San Lorenzo en su parrilla.

Vayamos por puntos. Como este blog suele leerlo gente de muchos lugares, primero vamos a aclarar conceptos:
¿Qué es el “Tambor de oro”?
Es el máximo galardón con que la ciudad de San Sebastián / Donosti distingue cada 20 de enero, festividad de San Sebastián, en una ceremonia que tiene lugar durante la Tamborrada infantil en el Ayuntamiento, a una persona, física o jurídica, que ha promocionado la imagen de la ciudad. En los comienzos, el galardonado no podía ser nacido en Donosti, pero con el tiempo, en 1986, ésto fue modificado, y así al poco tiempo se le pudo dar, por ejemplo. a Iñaki Gabilando.

En otras palabras,  el tambor de oro va muy unido al buen nombre y promoción de la ciudad. Y lo que se ha creado desde hace dos días, cuando transcendió que el galardón de este año era para Angels Barceló, ha sido de todo, menos ejemplo de cordura.

En Donosti tenemos un gran problema desde siempre, y es que todos tenemos razón. Y somos más de no dar ideas, y cuando se acepta la de alguien, es cuando todos los demás corremos a dar nuestra opinión, eso sí, con carácter de no ser la más acertada, sino la única.

Si el Ayuntamiento, o Consistorio, debiera actuar bajo la imagen de una familia bien avenida, aunque luego limpien los trapos sucios en la intimidad de su hogar, ha actuado, una vez más, como la famosa casa de Tócame Roque, aunque en esta ocasión, en versión Koxkera.
 
No es de recibo otorgar algo y que se haya hecho eco toda la sociedad, y auque faltara una póliza, quitárselo. Luego diremos que los vascos somos personas de palabra… Y eso al margen de que seas de la opinión a favor de Angels Barceló o no, quien está claro que se ha encontrado con un buen pastel sin comérselo ni bebérselo. Y ya se sabe que en Donosti, ni comer ni beber no entra en la lógica.

Seamos serios, en Donosti tenemos el “marco incomparable” porque ya venía en el pack, de lo contrario, entre mirarse el propio ombligo, por parte de cada uno de los partidos que componen el firmamento consistorial y que solo se preocupan de oponerse, y de crear comisiones a favor, y sobre todo en contra, el conseguir cualquier objetivo para la ciudad es más difícil que embarcarse tras la búsqueda del unicornio azul.

Para conseguir el Estadio de Anoeta, si mal no recuerda este vecino, y habla de memoria, inaugurado en Agosto de 1993, se empezó a mover el tema desde que se concedía dinero para “arreglar” Atocha, para los mundiales de 1982, pero se quería ese dinero, para “hacer otras cosas más importantes”, y , claro está, sólo se daba para ese cometido, por lo que, al final se tardaron ocho años más en conseguir el nuevo campo, y bajo la promesa de que también se utilizaría, como pista deportiva, porque de lo contrario no hubieran obtenido los fondos necesarios.

Y la Odisea de la Estación de Autobuses  duró …más de treinta años, y que desde el primer momento de la inauguración ya era, en opinión de este vecino del mundo, pequeña
 (http://patxipe.blogspot.com.es/2016/02/estacion-espacial-donosti.html).                                                                                                     

Uno, este vecino del mundo, que ya no baja de los sesenta, hace mucho tiempo que llegó a la conclusión de que el peor enemigo del donostiarra es otro donostiarra, o incluso él mismo.

Aunque ahora todos los del consistorio se hagan los suecos, seamos serios, lo de “Capital Europea de la Cultura 2016” ha pasado sin pena ni gloria, porque el partido político que consiguió ese objetivo ya no estaba en el poder, y a los demás les importaba, lo que han demostrado, nada.

Ni aprendemos del pasado, ni queremos aprender. Eso sí, tenemos una ciudad muy bonita para ese turismo de calidad tan deseado, pero que, seamos serios, ellos vienen, si vienen, para unos días, y los que se enfrentan con esos precios, también de lujo, somos nosotros, los curritos de a pie.
 
¿Que no se puede hacer otra cosa? Sí, hay lugares, Canarias como ejemplo, que en las tiendas tienen dos precios, aunque no sean oficiales, uno para los habitantes, y otro para los turistas.
¿Que es feo? Peor ha sido lo que se ha hecho con Angels Barceló, y todavía sacaremos pecho. Y que conste que aunque la Señora Barceló me parezca una profesional como un pino, y a la que escucho muchas noches, no tenía el menor interés en que fuera, o no, Tambor de oro. Pero ese feo, no se hace. Y para más inri, al final, el galardón de este año queda desierto. Una especie de "entre todos lo mataron y él solo se murió", "el balón es mío y si no juego lo rompo", o mantener actitudes de cara a la galería.
 
Hoy más que nunca es para recordar el especial de esta pasada Nochevieja de Don José Mota, y su sketch en el que los políticos españoles supervivientes de un accidente aéreo, prefieren permanecer en la isla a ponerse de acuerdo en quién se va y quién se queda en una barca que tenían preparada para salvarse. Es una buena metáfora de nuestro presente, e incluso en el caso de nuestra querida Donosti, se pudiera considerar un auténtico plagio, porque nos retrata a las mil maravillas...

Al final, no sé si ha servido de algo lo del cordón sanitario. Pero, por lo menos, a este vecino del mundo no le saldrá una úlcera por la mala leche acumulada hoy.
*FOTO: DE LA RED.

miércoles, 21 de diciembre de 2016

LA VIDA EN PÍLDORAS ...

 

Hoy, para este vecino del mundo, es uno de esos días en los que valoras la monotonía, el un día más, el me aburro, porque le duele todo por una gripe galopante que le está atacando, y que al galopar le ha debido de pasar por encima, y le hace sentir como si le hubieran dado una gran paliza.

Porque, en realidad, hoy debería de ser uno de esos días en que si fuéramos el famoso Mortadelo, deberíamos estar disfrazados con frac, una banda de “Ministro de Nosequé” y unas tijeras grandes  para cortar esa cinta de las inauguraciones… Y es que hoy es el primer día de invierno, legalmente, con luz y taquígrafos, porque lo que se dice con frío, frío, llevamos ya, y no es una queja, sino la realidad, unos cuantos días.

También, y hablando de inauguraciones, al menos en el País Vasco, es el primer día ya de las Navidades, con un Santo Tomás, 21 de Diciembre, que huele a talo, a txistorra, y a sidra. Con gente y colas por todas partes, como si regalaran algo en la famosa feria. Y cuando te das cuenta, cuando vuelves a casa, en tu bolsillo queda el recuerdo de un dinero, del que calculaste dejar algo, y no queda ni el recuerdo de ese bocadillo, que mirandolo desde el ahora, al final, no estaba tan bueno, porque tú, en tu casa, los haces mejores.

Hoy, es un día de mucho ruido, ruido por todas partes, y al menos en Donosti, con los autobuses repletos de gente, y donde todavía se puede recordar esa expresión, que ya queda muy anticuada, pero que hoy, al menos, es verdad de la buena, yendo todos como en una lata de sardinas

Quizás, comentar, ya que la gripe no me deja mucha materia gris intacta, y lo único que mi cuerpo tolera son píldoras, daré alguna píldora que ya he dado en forma de tweet que he escrito estos días:

En España al "agujero negro" se le llama ahora: "Rescate a las autopistas". Y es que en este cortijo llamado España, para algunos siempre ha sido muy fácil montar negocios, con ese famoso: “Si gano dinero, me lo quedo yo. Si pierdo, paga el pueblo”. El pueblo, que no tiene un rostro concreto, eso dicen, quizás, para que no se lo rompan, pero que tiene bolsillo, aunque ya solo le quede el forro. Porque la tela, se la han llevado "los de siempre”. Por cierto, por el forro de ellos, lo demuestran continuamente, es por donde se lo pasan todo...

O esa otra píldora-tweet en el que escribí:” ¿Lo de Christine Lagarde no demuestra que hay dos tipos, o más, de justicia?

Estoy convencido de que si a Christine Lagarde, directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), le dieran a elegir ser protagonista de un cuento, ella sin duda elegiría, se lo cree, el de La Princesa del Guisante, tan fina, tan delicada, que incluso le molestaría un pequeño guisante debajo de veinte colchones.... Pero visto desde fuera, este vecino no dudaría de que ella daría el perfil perfecto para un cuento como el de “Hansel y Gretel”, pero llevado a nuestros días, con una Bruja sofisticadísima, pero ...bruja al fin.

Hoy, se está celebrando, esa gran victoria en contra de los bancos, de las denominadas “clausulas suelo”. Uno no quiere ser agorero, pero con eso tan de los sesenta, pero tan verdad, de “Spain is different”, todavía, aunque se logre, verlo para creerlo. Porque irán cliente por cliente, y se hará realidad ese dicho, "El que no llora, no mama". 
 
Conviene recordar lo que pasó con aquel fraude, de aquellos coches, a nivel internacional, y que hoy no daré su nombre porque ya todos lo saben, y este vecino del mundo ya tiene suficiente con su gripe,. La publicidad del coche ofrecía una cosa, y la realidad de su técnica no daba lo que se supone que debía dar. En otros países ya han pagado, en España, ni están ni se les espera…

Ya para terminar por hoy, algo personal. Me he enterado, lo he visto en las noticias del Telediario, en Bilbao se ha quemado un restaurante chino del que tengo muy buenos recuerdos con mi sufrida, La Nuri. Entre los amigos y los conocidos que se van, y ahora ésto, pareciera que el tiempo nos quiera borrar, incluso antes de irnos, como la política y la realidad mismas.
*FOTO: DE LA RED

lunes, 12 de diciembre de 2016

PASARELA DONOSTIARRA, O UNA FOTO BUSCANDO EXPLICACIÓN...


Lo bueno que tiene vivir en una ciudad como San SebastiánDonosti para sus habitantes y enamorados, es ese poder intrínseco que tienen sus moradores y visitantes, de poder caminar entre fotografías de historia, salitre y cemento. De poder mezclarse con su horizonte.


Días con sus correspondientes noches en las que todos los gatos son pardos, pero como estamos en la ciudad que estamos, por supuesto que los gatos necesitan ser, tienen que ser, también de pedigrí. Calles, paisajes, en los que caminando, observando, quizás puedas encontrar la cara oculta de la foto perfecta. Ese ángulo que no habías contemplado, y que te sugiere durante unos segundos otra cosa. Puede ser el comienzo de algo efímero, como el abrir de una puerta a algo desconocido, una ciudad olvidada, o sin descubrir quizás, dentro de otra.


Sin embargo, hoy, revisando unas instantáneas tomadas de Donosti en Diciembre, una foto ha jugado a ser traviesa, y mientras siempre se ha dicho, al menos desde que se inventó la fotografía, de que una imagen vale más que mil palabras, una imagen determinada, la que mostramos al principio, ha jugado a necesitar palabras para explicar los mundos que puede abrir.


Ese viaje, quizás a los infiernos, que sugieren esas escaleras que se ocultan, no se pierden, en esa mar que parece ahora en calma. Esa cara B que se puede encontrar tras una cara A a enmarcar. El yin y el yang pero disfrazados de vida diaria. Lo que las luces de la pista central, del paisaje central, no pueden alumbrar. 



Y para remarcar que todo transcurre en una ciudad de foto, de ser observada siempre, ese final de barandilla en primer término, que nos recuerda y enfatiza que nosotros somos los mirones, estamos en una situación pasiva, de observador de escaparate de una pasarela, no de estrellas, sino bajo ellas. Pasarela de frágiles principios pero bien iluminados, y finales sobre arenas movedizas si la marea lo requiere, si el guión de una tragedia lo necesita para ser redondeada, por esos movimientos subterráneos que se disfrazan de calma chicha: la vida misma hecha foto.

*FOTO: F.E. PÉREZ RUIZ-POVEDA

lunes, 24 de octubre de 2016

CHOCOLATE DEL LORO A LA DONOSTIARRA



El tema de hoy, por una vez netamente donostiarra, aunque sin duda ocurrirá en muchos lugares, no lo hubiera querido tocar nunca, y cuando lo comprendáis entenderéis perfectamente la elección de la palabra "tocar" precisamente. Lo he ido postergando de un mes para otro, dando una especie de oportunidad  a la vida, por si cambiaba la situación, pero visto lo visto, habrá que tomar cartas en el asunto.


Tras más de treinta años de tener una estación de autobuses PROVISIONAL, por fin desde primeros de año podemos “lucir” en Donosti, unas instalaciones, como es debido. ¿Como es debido? No diría yo tanto, y sin volver a la opinión que di la primera vez que vi las instalaciones, y que ya expuse en este blog (http://patxipe.blogspot.com.es/2016/02/estacion-espacial-donosti.html) de que la estación era pequeña, ya a corto plazo, por supuesto según la humilde opinión de este vecino del mundo.


El fin de dilatar, como dicho al principio, esta queja era por si las autoridades competentes se daban cuenta, pero al parecer o no tienen necesidades fisiológicas al ir a tomar un autobús, o directamente no necesitan ir a la estación de autobuses, o incluso, pudiera ser, tienen un servicio especial para traseros VIP.


El caso es que si por una de esas casualidades le da esa, digamos, llamada salvaje de la naturaleza, un apretón, y necesita “evacuar”, se encontrará con una desagradable, muy desagradable, sorpresa. El papel higiénico esta diseñado en ¿cómodas? tiras, porque no llega a hojas, de 11x17 cm. Haga la prueba y verá. O es una sílfide, y tiene el pulso de un cirujano, o lo que me temo: defecará doblemente, la segunda metafóricamente, sobre la empresa encargada del mantenimiento, en un ahorrarse, lo que viene a ser el famoso chocolate del loro.


Una de las veces, este vecino del mundo, se lo dijo directamente al que estaba limpiando los lavabos, pero me respondió que él utiliza lo que le dan. Y en el aire quedó un mudo “y que a vosotros os den también”.



Es una vergüenza que una ciudad que se vende al exterior para tener turismo de lujo, y cuyos habitantes tienen que soportar en carne propia durante todo el año esos precios, además nos tengamos que “manchar”, tristemente es literal, porque al parecer, es la única explicación que le puedo dar, y es que los traseros de lujo no visitan esa zona. 


No hará falta recordar, que en más de un momento me he acordado de esa célebre frase "El día que la mierda tenga algún valor, los pobres nacerán sin ... trasero" Al menos en Donosti nos ahorraríamos el problema en los cuartos de baño de la estación de autobuses...


Ni que decir tiene que algunas veces, muchas, el tema logístico, no va ligado a la lógica.


*FOTO: DE LA RED

P.S.: Tras mandar el post a varias instancias del ayuntamiento, y algún seguimiento esporádico en la mismísima estación de autobuses, por fin  el  28.11.16. este vecino comprueba felizmente que el modelo de papel higiénico, ya es continuo. Y aunque está marcado con puntos a la misma distancia que el anterior, el actual permite poder cortarlo en tiras más largas. Eso sí, la calidad del papel sigue siendo horrible en consistencia. 
Es lo que se suele denominar como: "victoria pírrica".



miércoles, 19 de octubre de 2016

EL EXTRAÑO CASO DE LA MUJER OLVIDADIZA




Algunas veces la vida te regala con unos granos de humor del bueno, de ese que tras una sonrisa te deja un poso de amargura que te va a dar qué pensar, que para sí lo hubieran querido tanto Don Miguel Gila, como los mismísimos Tip y Coll.


Hoy, miércoles, seis de la tarde en un supermercado de Donosti.


Llego a la zona de las cajas con el carro casi lleno, y me apresuro a decidir, apenas en unas décimas de segundo, en qué caja voy a desembarcar mis compras.


He tenido suerte y en una de las filas solo hay una mujer que ya está cargando las compras, pocas, en una bolsa. Tras ella hay una señora de edad avanzada sentada en una silla de ruedas. No sé si van juntas, pero observo que la señora mayor no lleva cosas para pasar por la caja. 


Termina la primera, paga y comienza a irse, ya da dos pasos para alejarse. La cajera como si la señora mayor no existiera me mira con una sonrisa, dándome a entender en qué me puede ayudar. Con cara de confusión, le pregunto: -¿La señora?- mientras apunto a la espalda de la señora en silla de ruedas.
En ese mismo momento la señora que se alejaba, como si hubiera sido electrocutada pregunta en alto, pero para sí misma:- ¡¿Señora?!- Y da un giro de ciento ochenta grados que para sí lo hubiera querido el mejor Cristiano Ronaldo.


Al darme cuenta de la situación,  y con el sólo ánimo de teñir el extraño momento con un poco de humor, ya que en situaciones embarazosas tiendo a empatizar con el que las está pasando canutas, he comentado:  -Por un momento he pensado que ahora se venden señoras en el super.-  La mujer olvidadiza, medio cabreada, medio sorprendida, repite en un tono neutro, pero a modo de pregunta: -¿Vender señoras en el super?

Con la sola intención de explicarle el chiste, le aclaro: -Ésto es un super y veo a una mujer en un carro…


La mujer sorprendida en el despiste, comienza a ponerse muy roja y me ataca diciendo: -Usted debería de tener un poco más de educación.


Intentando que la escena no fuera a más, y con una sonrisa en los labios para demostrarle que mis palabras sólo eran de fogueo, y que en ningún momento había pretendido “matarla” le digo: -Le recuerdo que no he sido yo el del olvido.


Y cuando ya el termómetro de la cara de la señora había alcanzado más de cincuenta grados, y parecía que estallaría en cualquier momento, se oye la voz de la señora en silla de ruedas, mientras le mira a la primera, que sentencia lo que yo acababa de decir con un: -¡Eso!


Lo de Fernando Alonso en sus mejores momentos en Renault ha sido poco para la velocidad que han alcanzado las dos señoras mientras desaparecían.



Cuando la joven cajera terminaba de atenderme, he comprobado una vez más que la cara es el espejo del alma. Y el alma de la joven se estaba preguntando si había visto lo que había visto.


*FOTO: DE LA RED


viernes, 14 de octubre de 2016

LA LLUVIA Y SU METÁFORA



Antes de nada un aviso, he quitado todos los objetos cortantes de mi entorno para evitar tentaciones. ¿El motivo? He inspeccionado por el balcón, y el día, al menos en Donosti, es tan malo que parece una metáfora del futuro de mucho españolito de a pie: negro. Y eso no viene nada bien para el estado de ánimo, de ahí las precauciones tomadas.


Hemos pasado de un verano prácticamente tropical, a un escenario a lo “Blade runner”. Quizás, con la meteorología se debería de hacer lo que ocurre en la política española. Tiempo antes de un cambio brusco se van mandando globos sondas, metafóricamente hablando, ya que los verdaderos se utilizan precisamente en meteorología, y se nos va alertando de que vienen cambios, y así al final parece que duele menos; una especie de sufrimiento en diferido, como lo hubiera definido María Dolores de Cospedal, visionaria de un lenguaje que ahora es practicado por muchos bienquedas, que en lugar de luchar porque nuestro presente sea bueno para la mayoría, solo se preocupan de maquillar la realidad.


Una de las últimas verdades verdaderas la he oído de Ignacio Escolar, Director y fundador de eldiario.es, asegurando que “La lealtad a España se declara en el IRPF, no frente a una bandera. La pobreza se combate con impuestos para mantener el Estado de bienestar, no con caridad. No hay solidaridad más hipócrita ni patriotismo más cínico que el de aquellos que loan su amor por España o “los necesitados” mientras esconden su fortuna”.


Está claro que al Señor Escolar, ahora, como siempre, le darán por todas partes. Y es que además es muy fácil porque desde hace un tiempo se ha inventado una palabra comodín que vale para todo, y que con ella no es posible ninguna defensa, porque ya todo suena a excusa, y es: "populismo".



Por cierto, parece ser que el populismo solo se práctica en “las izquierdas”. Porque alguien que está en el centro, ya que a la derecha en España no hay nadie, los asuntos que comenta son promesas, que al final no se podrán cumplir por circunstancias siempre ajenas a ellos.


Tal como están las cosas, aunque sigue lloviendo en Donosti, y mucho, quizás merezca la pena salir a la calle. Por aquello de tener una posibilidad de ahogarse ante tanta belleza.


*FOTO: DE LA RED

jueves, 22 de septiembre de 2016

UN LARGO VIAJE DE CONDENA




¿Qué mensaje se quiere dar cuando se dice “acabo de hacer un largo viaje”?


En mi caso, no he recorrido Estados Unidos de Norte a Sur mezclándome con los nativos, o hijos de guiris en su momento, pero me he echado a mis espaldas un viaje desde el Levante español hasta Donosti en autobús, y solo por la duración, doce horas en teoría, once y media en la práctica, sí merece la pena ese calificativo.


Algunas veces, hoy ha sido una de ellas, hasta se te pueden olvidar tus vacaciones por todo lo que te puede pasar, en teoría nada, en un viaje tan largo.


En primer lugar, se rogaría, como en todas las actuaciones de nuestra vida, respeto, por nuestra parte y por la de todos, al comenzar un viaje tan largo. Pero hay algunos, más de los que podría parecer, que en unos pocos minutos ya han convertido un pequeño recoveco, el suyo, y si pueden el tuyo, en su casa, mediante todo tipo de comportamientos, gestos, e incluso, desgraciadamente, olores.


Hoy me ha tocado, he padecido, a una pasajera, que iba delante mío, que tenía de todo.


¿Que no te gusta que la gente se descalce? No sé si ella ha entrado con zapatos, me imagino que sí, pero en todo momento ha compartido con los demás, como si de una O.N.G. de donantes de epidermis se tratara, sus callosidades, nada envidiables por cierto. Hasta extremos, que por momentos, parecía  el ensayo de alguna pieza de ballet moderno, levantando la pierna hasta casi la zona donde están las salidas del aire acondicionado, lo que viene siendo la balda donde se dejan bolsas y chaquetas para tenerlas a mano cuando hay una parada.


A eso hay que unir, su potente voz, y excelente dicción, en casi todo momento, y la gran cantidad de amigos y conocidos que tenía, tiene, la condenada. Aunque en este caso , el condenado me temo que ha sido este vecino del mundo. 


¡Qué capacidad para relatar todo lo que ha hecho en esos días que, al  parecer, ha estado en Torrevieja, a cada uno de sus amigos y conocidos!


Estaba claro que no mentía, porque ha repetido las mismas cantinelas una decena de veces, por lo que en cualquier momento, me he temido, que todos, a modo de coro de gran tragedia griega, la hubiéramos acompañado en la descripción a un nuevo amigo.


Este vecino del mundo ya había entrado en el autobús cargado de grandes dosis de paciencia ante el largo viaje, y el posible comportamiento, siempre previsible, de alguno de los pasajeros, pero ha estado a punto de tener que requerir más dosis de paciencia, porque casi no llegan para cubrir todo el viaje.


Luego, y siguiendo con la misma pasajera, ya podemos pasar a esa faceta intimista, de ella para conmigo, ya que gentilmente en un momento dado, cuando ha considerado pertinente que de estar en “su” casa, pasábamos a una intimidad compartida, se ha volcado sin el menor reparo ni miramiento hasta los centímetros anteriores, dos o tres, de mis partes más intimas. Pero ha sido tal su casi total reclinación, que aunque ella mantenía una conversación y se supone que mentalmente se encontraba muy lejos de allí, de repente su ángulo de visión, y el mío como consecuencia, presentaba lo que en idioma cinematográfico se describiría como un primerísimo primer plano de mi cara, en su caso, y de la suya, en el mío.


Si aquello hubiera sido una película de Alfred Hitchcock, hubiera sonado sin duda una banda sonora repleta de violines y azúcar, compuesta por Miklós Rózsa, pero en seguida, sin tiempo de intimar,  se ha dado cuenta de la situación, o de mi cara, y un muy bajito y rápido “lo siento” ha dado origen a un retroceso de su butaca, pero sólo de unos dos centímetros, lo suficiente para que ella no viera la epidermis que cubre mi cabeza. Ha quedado más que claro, que para ella "no ver a nadie más" significaba que ya no molestaba. Aunque lo que me temo es que durante unos pocos segundos, mi cara, simplemente, le había alejado de la compañía de su interlocutor.


A modo de resumen, y como hubiera dicho otro gran viajero, James Bond: Ha sido un viaje agitado, no mezclado. ¡Gracias a Dios! Y por muy poco...

*FOTO: DE LA RED

miércoles, 13 de julio de 2016

CON ESO NO SE COME



Ya me he visto unos cuantos vídeos, "tutoriales" se dicen ahora, de cómo se hace una maleta, y la mía no avanza. Todavía es el momento en que tengo más artículos fuera de la maleta, que dentro.


Sí, me voy de vacaciones, pero es como una fuga de cerebros sin cerebro; como una huida hacia al futuro, pero con más presente que futuro; como una emigración interior. Porque no nos engañemos, si tienes un sitio en el que poder dormir, por ejemplo, en algún pueblecito de la zona de Alicante, en el que no molestes a nadie, ni te molesten a ti, no en primera línea de playa naturalmente (pero en el que el sol también te encuentra), la vida, el condumio, te sale mucho más económico que vivir, no gozar, en el “marco incomparable”.


Y es que vivir en una Donosti preparada para la gente guapa de dinero, rebosante de dinero al menos durante unos días, no cuenta con el pequeño detalle de que los donostiarras, y aquí incluyo a todos los que desde hace muchos años viven en San Sebastián, tienen que vivir todo el año, ("the whole year", ya que aquí siempre se hace pensando todo desde un punto de vista internacional) o sobrevivir en una ciudad que tiene de lo bueno lo mejor, pero que él, precisamente, se conforma con comer y vivir normalito.  Y pagar, esa es la madre del cordero, sin tener en cuenta que tenemos la bahía y la isla, que dicho sea de paso, ningún partido político ni las trajo, ni las creo.


Dicho de otra manera para los que no quieren ver, si uno está corto de dinero, se puede vivir más barato en otros lugares, aunque no te pases el día aplaudiendo por lo bonito que es el marco incomparable, porque allí no se llame así, pero que tampoco le hacen ascos sus paisajes.


Y es que este vecino del mundo, y otros con los que él ha hablado en múltiples ocasiones, está un poco cansado, y exhausto de bolsillo, de que todo o casi todo en su ciudad, ya está diseñado para el turista, y a ti solo te queda el papel de relleno o de comparsa en la película que los cabezas pensantes, o gerifaltes, han diseñado para los que puedan venir, mochileros por favor abstenerse, más que para los que viven aquí.



La crisis no perdona, y también nos ha atacado a muchos donostiarras, que tienen que dimitir de serlo al menos unos meses al año, para que su bolsillo pueda respirar. 


¿Morriña? Mucha.  Pero como hubiera dicho la madre que me parió:  Con eso no se come.


*ÓLEO:"PEINE DEL VIENTO-2", de PATXIPE